El ciudadano iraní Asan Azad, detenido el viernes en Concepción del Uruguay cuando intentaba comprar un pasaje a Concordia con documentación falsa, será indagado durante el transcurso de la mañana del lunes por el juez federal Pablo Seró.
El procedimiento se realizará en la sede de la Justicia Federal de Concepción, ubicada en calle Galarza al 600, donde funciona el Tribunal Oral en lo Criminal Federal dependiente de Seró.
Azad, de unos 30 años de edad, tiene serias dificultades para comunicarse ya que habla un inglés muy rudimentario. Según informó el subjefe de la Policía Departamental de Uruguay, comisario Ramón Albornoz, se le tomaron huellas digitales al momento de su detención. Las impresiones serán cotejadas con un sistema global a efectos de conocer su verdadera identidad y si posee o no antecedentes penales.
Los datos de este procedimiento de identificación podrían demorar hasta 3 días, por lo que se espera que en las próximas horas lleguen datos concretos de quién es esta persona.
Albornoz dijo al portal entrerriano Diario Río Uruguay que hasta el momento se ha imputado al iraní por el delito de falsa identidad. Fue luego de que intentara comprar un pasaje desde Concepción del Uruguay a Concordia con el DNI de una persona de Corrientes. Además, tenía en su poder el registro de conductor de otra persona oriunda del partido bonaerense de Tigre.
Quien encendió la alarma de lo que estaba sucediendo fue el encargado de la Terminal de Ómnibus, quien de inmediato dio parte a la Policía de Entre Ríos. El documento que exhibía Azad no era apócrifo, pero no coincidía con su persona, según manifestó Albornoz.
El hombre permanece detenido desde el viernes en la Comisaría 1ª de la policía de Entre Ríos en Concepción del Uruguay. Durante el procedimiento de detención, afirmó haber llegado a la localidad entrerriana desde Capital Federal, pero ese dato y otros comentarios que hizo no pudieron ser constatados fehacientemente hasta el momento.
La detención del ciudadano iraní coincide con el inicio en el fuero federal de una investigación por las sospechas generadas en torno al arribo a Ezeiza de un avión con tripulación de ese país y de venezolanos.
Días atrás, la fiscal federal Cecilia Incardona pidió investigar la relación del piloto del avión de Emtrasur, Gholamreza Ghasemi, con posibles actos de terrorismo. También imputó al resto de los tripulantes de la aeronave retenida en Buenos Aires, pudo saber Infobae de fuentes judiciales.
“Con el avance de las tareas investigativas llevadas aquí adelante, surgieron varios rastros que imponen la necesidad de proseguir la investigación respecto de Ghasemi Gholamreza, de toda la tripulación que de él dependía, de la aeronave y de su carga, conforme las obligaciones del Estado Argentino para prevenir y sancionar hechos de terrorismo”, dice el dictamen de la fiscal.
Y agrega: “Tales circunstancias irregulares llevan a indagar si el verdadero objetivo del arribo de la aeronave a nuestro país fue exclusivamente para transportar mercadería de autopartes, o bien si estuvo fundado en razones diferentes a las alegadas y constituya, eventualmente, un acto de preparación para proveer bienes o dinero que pudieran utilizarse para una actividad de terrorismo, su financiamiento u organización”.
Luego de recibir el informe del FBI que confirma la vinculación directa del piloto del avión de Emtrasur, Gholamreza Ghasemi, con las Fuerzas Quds, la división de la Guardia Revolucionaria iraní especializada en operaciones de inteligencia, y con Hezbollah, el juez Federico Villena le corrió vista a la fiscal el fin de semana “para delimitar el objeto procesal”.
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