Mientras la justicia federal comenzó a intervenir en el conflicto diplomático por la ruta en Argentina que realizó un avión venezolano, retenido en el aeropuerto de Ezeiza, se conocieron imágenes de al menos dos iraníes que viajaban en la aeronave. Según supo Infobae, los cinco hombres nacidos en Irán de la tripulación son Mohammad Khosraviaragh; Gholamreza Ghasemi; Mahdi Mouseli; Saeid Vali Zadeh; y, Abdolbaset Mohammadi.
En el avión viajaban también catorce venezolanos. Mientras se investigan sus antecedentes, el Gobierno decidió retenerles los pasaportes y quedaron alojados en un hotel de la zona de Ezeiza. “Tienen una estadía provisoria. En este momento pueden salir del país únicamente en un avión de línea, pero no pueden subirse al avión de Emtrasur”, explicó una fuente oficial.
La decisión se basó en el artículo 35 de la Ley de Migraciones que habla de una “sospecha fundada que la real intención que motiva el ingreso difiere de la manifestada al momento de obtener la visa o presentarse ante el control migratorio”.
Las primeras fotos de los iraníes fue aportada por el periodista Damian Pachter en el medio Israel Today. Por su lado, el analista internacional Andrei Serbin Pont confirmó la identidad de Ghasemi. “Es el Gholamreza Ghasemi de Qeshm y de la Guardia Revolucionaria Islamica”, señaló en las redes sociales.
Sobre la situación de la tripulación, el abogado Rafael Resnick Brenner presentó un habeas corpus ante el juzgado federal de Lomas de Zamora, a cargo de Federico Villena, para que se libere la aeronave y se devuelva los pasaportes a todos sus tripulantes.
Algunos de ellos, según la información de inteligencia enviada a la Argentina, tendrían vínculos con la Fuerzas Quds, una división de los Cuerpos de la Guardia Revolucionaria Islámica especializada en operaciones de inteligencia militar.
“Debido a los vínculos con IRGC Fuerza Quds, sería relevante para la seguridad de los argentinos confirmar, vía huellas digitales, a todos los ciudadanos iraníes que arribaron en este vuelo al país. Debe aclararse cuáles son sus intenciones en nuestro territorio, algo que aún sigue bastante confuso”, opinó el diputado Gerardo Milman.
El ex funcionario del Ministerio de Seguridad apuntó a Gholamreza Ghasemi, registrado como el capitán de la aeronave. “Es accionista y miembro de la junta directiva de la aerolínea iraní Qeshm Fars Air (sancionada por Estados Unidos). Previamente fue presidente de Irán Naft Airlines, luego re-denominada Karun Airlines, y ex oficial de la Guardia Revolucionaria Iraní (IRGC)”, apuntó Milman.
El juez Villena reaccionó rápido porque se trata de un habeas corpus y le pidió información a Migraciones, PSA, ANAC, Aduana, y a la Empresa Argentina de Navegación Aérea (EANA S.E) sobre el avión venezolano con matrícula iraní.
Sobre la tripulación, el magistrado pidió saber “si se les han retenido sus pasaportes y/o documentación de identidad, especificando en su caso las razones; como así también si los nombrados registran impedimentos en cuanto al ingreso y/o egreso a la República Argentina”.
El avión, un Boeing 747-3B3(M) de la empresa Emtrasur, aterrizó el lunes en el aeropuerto de Córdoba por la neblina que había en Buenos Aires, pero luego llegó a Ezeiza, donde lo estaban esperando. Rápidamente intervino la PSA, la Aduana, Migraciones y la PFA en un operativo conjunto. El miércoles a la tarde, intentó viajar a Uruguay para cargar combustible y de esa manera poder regresar a Venezuela, pero el gobierno de ese país decidió cerrar el espacio aéreo y le impidió la maniobra. Desde entonces, está parado en Ezeiza.
YPF y Shell se niegan a venderle combustible por las alertas internacionales.
El escándalo se filtró ayer a partir de un pedido de informes firmado por el diputado Gerardo Milman y otros legisladores de Juntos por el Cambio. En esa presentación le pidieron al Gobierno detalles sobre el avión venezolano con matrícula YV3531. “Dado el comportamiento enigmático del vuelo, la propiedad cuanto menos confusa de la aeronave y la composición de la tripulación, es que solicito a mis pares que me acompañen en el presente proyecto”, dice el proyecto en sus fundamentos.
Más allá de este pedido de informes, radicaron una a denuncia en el juzgado federal de Lomas de Zamora contra varios funcionarios que participaron del operativo. La presentación lleva las firmas de Ricardo López Murphy y Gerardo Milman, en conjunto con el consultor aeronáutico Franco Rinaldi, “para que el juez interviniente en la causa del avión venezolano/iraní avance en la investigación contra los funcionarios”.
En el texto de la denuncia se advierte que el avión circuló entre Córdoba y Buenos Aires “con el transponder apagado, como si no quisiera ser localizado”. De hecho, se cuestionó que la aeronave ingresó el 6 de junio con 19 tripulantes, de los cuales 14 eran venezolanos y 5 iraníes, tal como anticipó ayer Infobae.
Entre las irregularidades por parte de la empresa de la aeronave, también se indicó una sanción por parte de la Oficina de Control de Activos Extranjeros y Sanciones del Departamento del Tesoro de Estados Unidos. Al haber circulado con el transponder apagado, se sospecha que el avión formaba parte de una maniobra más profunda y se sospecha que “serían pruebas de reconocimiento de rutas”.
La denuncia, patrocinada por los abogados María Eugenia Talerico y Yamil Santoro, apunta a José Glinski, (Director Nacional de la Policía de Seguridad Aeroportuaria), María Florencia Carignano (Directora Nacional de Migraciones), Paola Tamburelli (Administradora Nacional de Aviación Civil), Gabriela Logato (Presidenta de la Empresa Argentina de Navegación Aérea), y Silvia Brunilda Traverso (Directora General de Aduanas).
SEGUIR LEYENDO: