Luego de algunas semanas de silencio, el ministro bonaerense y dirigente de La Cámpora Andrés “Cuervo” Larroque volvió a plantear objeciones sobre la política económica instrumentada por la Casa Rosada.
En una entrevista concedida a Radio Provincia, el funcionario que responde a Cristina Kirchner aseguró que si bien hay reuniones habituales entre los miembros de los diferentes espacios del Frente de Todos, aún es necesario resolver los problemas económicos que afectan especialmente al poder adquisitivo del salario y a los sectores sociales más bajos.
“Hay un contacto permanente, no quiero profundizar en algo que he sido claro, creo que es necesario que se resuelvan por los problemas de fondo porque, si no, no hay política social que alcance”, aseguró Larroque ante una pregunta de la periodista Gabriela Pepe.
El ministro de Desarrollo de la Comunidad del gobierno de Axel Kicillof habló además de la posibilidad de que la coalición oficialista llegue unida a las elecciones del 2023. “Sin la unidad no se puede y con la unidad no alcanza”, reconoció. Sin embargo, desarrolló: “Lo que venimos planteando es cómo dotamos de sentido la unidad; no es una cuestión mágica que la simple reunión la pueda sostener, si nosotros no resolvemos los problemas de la gente”.
“Hay que alivianar las dificultades del conjunto de nuestra sociedad, sobre todo de los sectores más postergados. Después, en la situación en la que estamos, es muy difícil prever escenarios electorales y a mí no me gusta hacerlo”, agregó.
Larroque reconoció que hay una recuperación marcada de la economía pero aludió a las palabras de Cristina Kirchner en un acto realizado en La Plata a fines de 2020, cuando la vicepresidente apuntó a la distribución del ingreso como una de las principales dificultades de la gestión.
Desde que se desató la interna en la cúpula del poder político, Larroque se transformó en una suerte de vocero encargado de visibilizar el malestar del sector de Cristina Kirchner con la Casa Rosada, especialmente con el ministro de Economía, Martín Guzmán.
La última vez que la vicepresidenta habló en público fue el 6 de mayo, en la provincia de Chaco, dónde no sólo criticó al equipo económico, sino que además minimizó el rol de Alberto Fernández en el Frente de Todos porque -dijo- “no representa a ninguna fuerza política”.
Desde aquel discurso, surgió una nueva mala noticia sobre la coyuntura económica: el índice de precios de abril fue más alto de lo esperado y llegó a 6 por ciento. Además, Roberto Feletti, un hombre identificado con CFK, dejó la Secretaría de Comercio Interior en desacuerdo con la conducción de Guzmán.