Diputados del Frente de Todos (FdT) presentaron un proyecto de ley para establecer un Salario Básico Universal (SBU) que garantice la protección social de todos los trabajadores.
La iniciativa, que fue presentada a las 11 en el Salón Delia Parodi del Palacio Legislativo, tiene la autoría de los legisladores Itaí Hagman, Natalia Zaracho y Federico Fagioli, pero el acompañamiento de otros diputados como Leonardo Grosso, Hugo Yasky, Mónica Macha, Pablo Carro, Juan Carlos Alderete, Carlos Selva, Pablo Carro, Mara Brawer y Graciela Landriscini.
Pero también estuvieron presentes varios legisladores y referentes de los sectores que conforman el Frente de Todos como la senadora y presidenta del bloque de Unidad Ciudadana, Juliana Di Tullio, el director del Banco Nación, Claudio Lozano, el presidente del bloque de diputados del Frente de Todos, Germán Martínez, el diputado y ex ministro de Desarrollo Social, Daniel Arroyo y el referente político de los legisladores que impulsan la medida, Juan Grabois, entre otros.
El texto propone establecer un Salario Básico Universal “como una prestación monetaria mensual no contributiva y de alcance nacional destinada a trabajadores y trabajadoras de bajos ingresos”. De acuerdo a la iniciativa, el SBU “será otorgado a las personas que se encuentren desocupadas; se desempeñen en la economía informal; se encuentren inscriptas en la categoría ‘A’ del Régimen Simplificado de Pequeños Contribuyentes o se encuentren inscriptas en el Régimen de Inclusión Social y Promoción del Trabajo Independiente”.
La presentación estuvo a cargo de Itaí Hagman: “Es el resultado de un proceso de discusión para garantizar un piso de ingreso para todas las personas en la Argentina. Es un concepto que usó el Papa Francisco en la Pascua de 2020 en una carta que envió a los movimientos sociales. Hay un sector muy importante de la población que está excluido del trabajo formal y que no tienen las condiciones mínimas garantizadas, y esto no es un problema de productividad, sino de concentración de riqueza e ingresos inédito en la historia de la humanidad y su contrapartida es un sector excluido de la sociedad”, expresó.
Según explicó el diputado, el Salario sería de 13.000 pesos por mes “para alrededor de 9 millones de personas, lo que tendría un costo fiscal de 2.1% del PBI”. Y agregó: “Si a eso le restamos algunas partidas subsumidas, el costo neto es 0,9%. Tiene un costo de 400.000 millones de pesos”.
Para el diputado del Frente de Todos, que responde a la línea de Juan Grabois, hay que “pensar mecanismos de transferencias universales y en eso se enmarca esta propuesta” y advirtió que existe un precedente que son las leyes para las jubilaciones en aquellos casos que no cumplían con los aportes y la Asignación Universal. “Ahora nos toca pensar qué hacer con la población adulta que no tiene un ingreso garantizado”, afirmó.
Por su parte, Fagioli señaló: “Hace mucho tiempo que se plantea a un salario básico universal para acompañar a una parte de la sociedad que la viene pasando muy mal, muchos que están por abajo de la línea de indigencia para que mientras vamos reconstruyendo la economía ir acompañando a ese sector. Desde la economía popular venimos trabajando para ese sector que está al margen”.
Aunque llegó tarde, la presencia del jefe del bloque de Diputados del Frente de Todos, Germán Martínez, buscó mostrar una idea de unidad. Tanto es así que la propuesta enriquece el debate. “Bienvenido sea esta y otras tantas propuestas de lo que plantea el Presidente del desafío de recuperar los ingresos y la productividad”. Por si no quedaba claro, Martínez sentenció: “Por más que nos traten de encasillar, somos integrantes del bloque del FdT que venimos con trayectorias distintas e historias distintas, es importante que cada compañero que sienta que puede hacer un aporte al espacio y al Gobierno lo pueda hacer con total libertad”.
Pero las diferencias existen, tanto que es un nuevo proyecto que ingresa al Congreso de la Nación que, aunque tiene un costo fiscal, no fue conversado con el ministro de Economía, Martín Guzmán.
Otro diputado que estuvo presente y que está representado en el Frente Renovador de Sergio Massa es el ex ministro de Desarrollo Social Daniel Arroyo quien, luego de asegurar su “pleno apoyo” a la medida, dijo: “No me asustaría con el impacto fiscal, hay que debatirlo y trabajarlo. Yo creo que es por acá, por el salario universal por eso voy a acompañar enfáticamente el proyecto”.
Que digan por qué no
Aunque se pudo ver a varios referentes del oficialismo, el proyecto no fue discutido con el Ministerio de Economía y no todos en el Gobierno están de acuerdo. Esto quedó en claro cuando Juan Grabois, referente de los legisladores que presentaron el proyecto, tomó la palabra.
En clara alusión al discurso de hace unos días de la vicepresidenta Cristina Kirchner, Grabois tomó el micrófono y sostuvo: “Les voy a contar una infidencia. Arroyo está de acuerdo, el ministro de Desarrollo Juanchi Zabaleta, la mayoría de los diputados y los senadores, los movimientos sociales están de acuerdo. Hasta algunos opositores. Les voy a contar otra infidencia. El doctor Facundo Manes, de la UCR, me dijo que cuando uno está en la lucha por la subsistencia su capacidad cognitiva se reduce, tiene ocupado el disco rígido, y puede proyectar menos”.
Pero más allá del ejemplo de Manes, Grabois apuntó a los miembros del Gabinete Económico que se oponen a la medida. “Las ideas de pasar los planes a los trabajos son eslogan, lo que hay que hacer es pasar de trabajo sin derecho a con derecho. Trabajo hay, lo que no hay es empleo, que es trabajo en relación de dependencia. El Ministerio de Producción dice que en 10 años vamos a tener 2 millones de trabajos nuevos. Eso es el crecimiento vegetativo, son 200.000 por año, necesitamos eso ahora. Con este proyecto sacamos a todos de la indigencia y reducimos la pobreza y la plata está, es mentira que no está”.
“Lo que estamos tratando discutir es un modelo de país donde quepamos todos y todas y es lo que hoy no hay. Estamos dándole racionalidad a una discusión que los que dicen representarla no la dan. Cuando se hace la estadística de la desocupación y dice 7% es porque le preguntan a la gente si trabaja o no, y responden que si trabajan, por lo que el 93% dice que si, entonces tenes a la mitad de la clase trabajadora en la informalidad”.
En ese contexto es que el dirigente social dijo que “los que se oponen a esto dentro del Frente de Todos nos tienen que explicar por qué está mal” y pidió que “propongan algo, lo que sea, empezar por las provincias más pobres, algo, no puede ser que cuando apriete la conflictividad social haya un bono que estamos agradecidos pero que es espasmódico”.
Por último, les pidió a los diputados del oficialismo que “hablen con la oposición” porque “en el Senado hay número para aprobarlo, pero en Diputados no”.
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