Se acerca el plazo autoimpuesto para reformar la Ley de Alquileres y el panorama en la Cámara de Diputados no parece alentador. El próximo miércoles, 11 de mayo, se realizará la última reunión pactada de la comisión de Legislación General. En teoría, de allí surgiría un dictamen de consenso para modificar la norma sancionada en 2020. Pero hasta ahora, no hay consenso entre el oficialismo y la oposición.
El tema se instaló en la agenda mediática a fines de marzo. Tras fuertes reclamos de los inquilinos, las inmobiliarias y los propietarios, Juntos por el Cambio convocó a una sesión especial para derogar la ley vigente. No tenía los votos suficientes para avanzar, pero alcanzó para presionar al Frente de Todos, que coincidió en que había un problema y se comprometió a conformar en lo inmediato la comisión correspondiente para debatir la cuestión.
Tras varias semanas durante las cuales expusieron los representantes de los inquilinos, corredores inmobiliarios, ONG y especialistas en la materia, quedó claro que no había coincidencias en la mejor solución. La ley había extendido los contratos de 2 a 3 años y fijó los aumentos anuales en base a un promedio de la inflación y los salarios.
Desde Juntos por el Cambio ahora ultiman los detalles para unificar un criterio. Según pudo saber Infobae, los principales puntos a modificar serían el plazo del contrato y el índice de actualización.
Una de las soluciones que por el momento goza de mayor consenso es reducir el contrato a dos años pero agregando una la renovación “automática” que tenga el menor costo posible para el inquilino (por ejemplo, sin pagar adelantos, depósitos, comisiones, renovación de garantías, etc). Por otro lado, tratarán de “flexibilizar lo más posible el acuerdo entre las partes” a la hora de determinar cómo se actualizarán los precios de los alquileres. Incluso se evalúa algún tipo de “tope”, que deje margen para la libre negociación.
Desde la bancada del Frente de Todos también apuntan a llegar con un criterio unificado. Pero bastante alejado de la postura de la oposición.
Ante la consulta de Infobae, un diputado del oficialismo aseguró que dentro del bloque se considera que “la ley ha sido un avance y todavía hay que darle tiempo”. En esa línea, insisten en que el problema no es la norma en sí sino los desequilibrios macroeconómicos. “Con una inflación del 60% cualquier índice para actualizar los alquileres va a ser problemático”, lamentó un legislador.
Además, insistieron en que la mayoría de las asociaciones de inquilinos no cuestionaron el plazo de 3 años durante las jornadas informativas. Por lo tanto, una posible solución al problema de los alquileres giraría en torno a los incentivos para que más propietarios pongan sus propiedades en el mercado. Por ejemplo, que los propietarios que alquilen sus propiedades puedan hacer descuentos de Ingresos Brutos o algún otro impuesto.
“Sería una respuesta insuficiente ir solamente por el lado de los incentivos”, reprocharon desde la oposición.
Algo parece seguro: no habrá dictamen unificado el próximo miércoles. Aunque desde Juntos por el Cambio sospechan que el oficialismo buscará demorar el debate, algo que incluso les impediría avanzar con un dictamen de minoría.
Como la oposición no tiene mayoría en la comisión, ya analizan alternativas para impulsar la reforma por otros canales institucionales. Convocarán a una conferencia de prensa para denunciar que el Frente de Todos no cumplió con su promesa de buscar una solución en un plazo de 30 días hábiles. Luego, buscarán convencer a los otros bloques opositores para convocar a una sesión especial.
“Acordamos que había que abandonar los extremos, por eso nosotros dejamos de pedir la derogación total de la ley y ellos descartaron el rechazo. Pero ahora no pueden cumplir, por eso no se sientan a negociar”, analizaron desde Juntos por el Cambio.
Por lo pronto, la oposición pedirá una reunión previa antes del miércoles para analizar los pasos a seguir.
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