En medio de las explícitas y duras críticas del kirchnerismo duro hacia Martín Guzmán, los funcionarios del área de Energía, Darío Martínez y Federico Basualdo, quienes han mantenido varios enfrentamientos contra el ministro de Economía, se mostraron en público junto al gobernador de la provincia de Buenos Aires, Axel Kicillof.
Si bien se trató de un acto por la firma de un convenio para reactivar obras de la Planta Transformadora de la localidad de 25 de Mayo, la puesta en escena de los titulares de la Secretaría de Energía con el ex ministro de Economía de Cristina Kirchner, es todo un gesto en medio de la arremetida de La Cámpora contra Guzmán.
Federico Basualdo es el subsecretario que el año pasado quiso echar el titular de la cartera de Economía por oponerse a avanzar con una actualización tarifaria que permita reducir el nivel de subsidios. El dirigente cercano a Cristina Kirchner logró resistir en el cargo. En ese momento, Guzmán planteaba que las tarifas se ajusten por inflación. Esta propuesta fue rechazada por un amplio sector del kirchnerismo y se dio marcha atrás con el plan de Economía. Luego, y en el marco de las negociaciones con el Fondo Monetario Internacional, desde Energía presentaron un esquema tarifario con un solo aumento del 20% en el año y la eliminación de subsidios para determinados barrios de mayor poder adquisitivo.
Guzmán rechazó esta iniciativa y propuso al FMI un aumento tarifario para todos los segmentos sociales y la eliminación de los subsidios para el 10% más rico de la población.
Días atrás, Basualdo reavivó la interna con un informe en el que advirtió que el aumento tarifario que pide Guzmán no se puede aplicar. El documento de 24 páginas analiza los impactos de la aplicación de esas medidas y asevera que no es posible de aplicar técnicamente el incremento tarifario propuesto, que tendría oposición jurídica por no ser gradual, que atentaría contra el objetivo de sostener el crecimiento económico y aceleraría la inflación.
Por su parte, Darío Martínez también se ha mostrado crítico de la administración del ministro de Economía. En marzo, mientras el Gobierno cerraba el acuerdo con el FMI, el secretario de Energía envió una dura carta a Alberto Fernández y al ministro en la que señala -en medio de un muy volátil contexto global para los commodities energéticos luego de la invasión de Rusia a Ucrania- que Argentina no contaba con recursos para pagar el gas aquél mes, y que como consecuencia también afectaría la generación de energía eléctrica. Aparecieron los fondos pero las diferencias políticas persisten.
Martínez y Basualdo acompañaron a Kicillof este jueves por la tarde en la localidad de 25 de Mayo. El gobernador suscribió con los funcionarios de Energía un convenio para la reactivación de las obras de la Planta Transformadora de 500/132 Kv.
Según se informó oficialmente, “su puesta en marcha permitirá mejoras en el abastecimiento de electricidad y un servicio más económico en beneficio de un millón de habitantes, industrias y comercios de la zona centro de la provincia de Buenos Aires”. También estuvieron presentes el ministro de Infraestructura y Servicios Públicos, Leonardo Nardini; el subsecretario bonaerense de Energía, Gastón Ghioni; y el intendente local, Hernán Ralinqueo.
Kicillof destacó que “esta es una obra central para la Provincia que, como tantas otras, fue planificada hace mucho tiempo, iniciada y luego paralizada”. “Con apoyo del gobierno nacional, resolvimos las deudas y los problemas administrativos para reactivarla, porque vinimos a terminar todas las obras que hacen falta para mejorar la calidad de vida de los y las bonaerenses”, añadió.
”Sabemos que hay quienes creen que la Provincia es inviable por su tamaño y diversidad productiva. Para nosotros es todo lo contrario: tenemos un enorme potencial y futuro y lo que necesitamos es desarrollar igualdad de oportunidades”, señaló el Gobernador, al tiempo que valoró que “esta obra representa la reparación de una injusticia en una región en la que faltaba seguridad energética para apuntalar la industria y el crecimiento de la producción”.
La nueva planta tendrá una capacidad de transformación de 600 MVA a 132 Kv y quedará preparada para recibir dos líneas adicionales de 500 Kv, permitiendo el despacho de energía eléctrica en localidades como Saladillo, Chivilcoy y Lobos, indicaron a través de un comunicado.
Por su parte, Martínez afirmó: “Es un día muy importante porque, después de resolver todos los conflictos que se generaron cuando se paralizaron los trabajos, volvemos a poner en marcha las obras para llegar con energía a lo largo y a lo ancho del país”. “Esta obra es emblemática porque brinda estabilidad a toda la región, dando factibilidad a la industria y al trabajo y robusteciendo el sistema energético de un país que demanda cada vez más energía”, dijo.
”Esta obra es central para el oeste y el centro de la provincia de Buenos Aires, ya que va a permitir desarrollar mayor capacidad industrial y comercial en beneficio de los distritos de la zona”, expresó por su parte, Basualdo. El subsecretario de Energía manifestó que seguirán trabajando en el plan de desarrollo de infraestructura energética “que permita la consolidación del proceso de crecimiento económico que está impulsando el gbierno nacional”.
Mientras tanto, en medio de los cuestionamientos recibidos dentro del ala kirchnerista del Gobierno, Guzmán, insistió con que está para dedicarse 100% a la gestión y no para “inmiscuirme en disputas de poder”. “Yo me dedico a usar cada minuto que tengo en gestionar políticas para mejorar la vida de nuestra gente”, declaró este jueves el ministro.
SEGUIR LEYENDO: