72 horas después de haberse celebrado el recambio de autoridades del Partido Justicialista en los 135 municipios de la provincia de Buenos Aires -un proceso que incluyó once internas donde no se consiguió la unidad-, el presidente del PJ bonaerense y diputado nacional del Frente de Todos, Máximo Kirchner, se comunicó con quienes definieron la conducción a través de internas. Ganadores y perdedores cruzaron mensajes y llamadas con el líder de La Cámpora, quien se comprometió a trabajar con todos los sectores y avanzar en un plan de cercanía y contención.
Kirchner dejó pasar unos días y a través de uno de sus secretario fue llamando a los once municipios donde hubo internas: Tres de Febrero, San Miguel, Ramallo, General Pueyrredón, Partido de La Costa, Ayacucho, San Isidro, Lobería, Necochea, Chascomús y Magdalena. Allí habló con ganadores, a quienes felicitó, pero también con perdedores. Con los que no logró comunicarse de manera directa les hizo llegar un mensaje de agradecimiento.
“Nos felicitó, nos dijo que vamos a trabajar en conjunto y me deseó que lleve adelante una excelente gestión”, le contó a Infobae uno de los nuevos presidentes de los PJ locales que este domingo fueron a elección para dirimir la conducción partidaria. “Le dije que nosotros lo necesitamos a él”, agregó el mismo dirigente.
La decisión de hablar con ganadores, pero sobre todo con quienes compitieron en las internas y quedaron en segundo o tercer lugar, tiene como objetivo apaciguar algún foco de conflicto que podría haber quedado activo de lo que fueron los cierres de listas partidarias y -más atrás también- por la llegada de Kirchner a la conducción del PJ bonaerense. El resultado de las internas en los once municipios fue más balanceado hacia el sector afín a Máximo Kirchner. La Cámpora, incluso, ganó en Tres de Febrero, Mar del Plata y San Miguel. En los tres distritos la organización se jugaba un pleno.
La elección del PJ local en San Isidro también se llevó buena parte de la atención. Es que las dos listas que compitieron tenían referencias políticas de peso. De un lado, una alianza entre el director del Banco Provincia, Sebastián Galmarini (Frente Renovador) y presidenta del bloque del FdT en el Senado bonaerense, Teresa García, una referencia del gobernador Axel Kicillof y de diálogo con la vicepresidenta, Cristina Kirchner. Del otro, una lista apadrinada por el Canciller y hombre de confianza de Alberto Fernández, Santiago Cafiero. La lista que forjaron el massismo y el peronismo K terminó imponiéndose a la opción que impulsaba el albertismo.
Sin embargo, para Kirchner esa situación aparece como una página del pasado reciente. En las comunicaciones que mantuvo con quienes compitieron en las elecciones internas del último domingo, adelantó que trabajará en el territorio para ampliar el espectro peronista.
A la par de la idea de Kirchner de mostrarse aperturista en la conducción del PJ bonaerense, resurgió la crítica del intendente de Esteban Echevarría, Fernando Gray, quién todavía sostiene su malestar por haber quedado fuera del esquema de poder que forjaron Kirchner y La Cámpora con los intendentes del conurbano, capitaneados por el actual jefe de Gabinete bonaerense, Martín Insaurralde. En distintas entrevistas en los últimos días, volvió a cruzar a La Cámpora por su posicionamiento en la negociación entre el gobierno nacional y el Fondo Monetario Internacional (FMI). “Máximo (Kirchner) está representando a La Cámpora, no está representando al peronismo y eso es un grave problema, porque el peronismo no es La Cámpora”, dijo en declaraciones a A24.
Cerca del hijo de la Vicepresidenta le restan relevancia al posicionamiento de Gray. Por el contrario, como contó Infobae, creen que luego de la marcha del 24 de marzo último y en medio de la interna del Frente de Todos, Kirchner recuperó centralidad y caudal político dentro del esquema de poder en la provincia de Buenos Aires.
Es que además de motorizar una multitudinaria marcha desde la ex ESMA hasta Plaza de Mayo, Kirchner estuvo escoltado todo el trayecto por diversos dirigentes oficialistas. Desde el gobernador bonaerense, Axel Kicillof, a intendentes del PJ bonaerense. Y, ya sobre el cierre de la movilización, se mostró con la portavoz presidencial, Gabriela Cerruti. Además, sostienen que el sentido que tuvo la marcha -además de la fecha histórica- no fue un mensaje contra Alberto Fernández sino hacia él.
“En estos últimos 50 días habrán visto a los canales de televisión que se han dedicado a criticar nuestra postura frente al FMI. Uno elige: los estudios de TV o la calle y la gente. Lo que tenemos que entender es que cuando la gente es parte de un gobierno, lo banca, lo malo es menos malo y lo bueno es más bueno. Es con la gente adentro”, lanzó Kirchner en plena movilización en un mensaje hacia la interna del Frente de Todos.
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