Alberto Fernández avanza en su idea de suscribir un “pacto de gobernabilidad” con la Unión Industrial Argentina (UIA) y la Confederación General del Trabajo (CGT): hoy se reunieron las tres partes para “definir una hoja de ruta conjunta que permita bajar las expectativas inflacionarias”.
El encuentro, que se prolongó por unas tres horas, se realizó en la Federación de Trabajadores de la Sanidad, en Dean Funes al 1200, que fue la continuación, ampliada, de la reunión que tuvieron el Presidente y la mesa chica de la CGT hace seis días. Ahora se sumaron otros funcionarios y directivos de la central fabril. Y acordaron mantener otro encuentro antes de que el primer mandatario lance públicamente la convocatoria tripartita a esta nueva instancia de diálogo social.
Tanto el sector sindical como el empresarial quedaron conformes con la extensa charla, en la que el Presidente propuso “la necesidad de generar un compromiso con el sector privado, el de los trabajadores y el Estado, con el objetivo de bajar la inflación sin detener el sendero de crecimiento económico y la creación de trabajo”, según informaron fuentes de la Casa Rosada.
No se habló específicamente de un acuerdo para contener precios y salarios, aunque la dirigencia cegetista planteó que deben seguir las paritarias libres, sin topes, mientras que los industriales afirmaron que tras el acuerdo con el Fondo Monetario Internacional (FMI) y de la negociación con el Club de París hay que “buscar consensos” para despejar “las incertidumbres económicas”.
No se habló de ninguna medida concreta y sí, en cambio, de fijar en próximos encuentros “una agenda de temas para trabajar sobre las expectativas que generan la espiral inflacionaria”. Funcionarios, empresarios y sindicalistas evaluaron el impacto en la economía local y los precios de la guerra en Ucrania y coincidieron en que se deberán definir “mesas técnicas” en los próximos días.
Alberto Fernández estuvo acompañado por el jefe de Gabinete, Juan Manzur, y los ministros de Economía, Martín Guzmán; de Producción, Matías Kulfas; de Trabajo, Claudio Moroni; de Agricultura, Julián Domínguez, y de Relaciones Exteriores, Santiago Cafiero. La delegación de la UIA estuvo compuesta por su titular, Daniel Funes de Rioja, además de Luis Betnaza, Adrián Kaufmann Brea y Claudio Rodríguez. Por la CGT participaron sus cotitulares Héctor Daer (Sanidad) y Carlos Acuña (estaciones de servicio), además de Andrés Rodríguez (UPCN), Gerardo Martínez (UOCRA), Armando Cavalieri (Comercio), José Luis Lingeri (Obras Sanitarias) y Jorge Sola (seguros). Como en el último encuentro con el Presidente, tampoco fue Pablo Moyano (camioneros), el otro cotitular cegetista.
Muchos de esos protagonistas de la reunión en Sanidad volverán a reunirse este martes dentro del Consejo Económico Social, pero esta instancia de diálogo está vinculada con el análisis de medidas de largo plazo, mientras que hoy se conversó sobre acordar políticas de corto plazo para “recrear la confianza” y consensuar “un esquema ágil que permita una rápida baja de la inflación”.
La semana pasada, ante el Presidente y el jefe de Gabinete, la dirigencia de la CGT planteó sus dudas sobre las consecuencias del entendimiento con el Fondo: pese a la promesa presidencial, cree que traerá aparejado un fuerte ajuste económico. El jefe del Estado lo relativizó y les aseguró que se trataba de la única alternativa que tenía a su alcance para evitar resultados “mucho peores”.
La comitiva cegetista pidió que lo firmado no implique ninguna limitación para las paritarias y el primer mandatario les prometió lo que querían escuchar: “No hay ninguna posibilidad de que los salarios pierdan poder adquisitivo”. Aunque algunos dirigentes no quedaron tan convencidos, Alberto Fernández insistió en que “no habrá topes” ya que “confía” en la prudencia del sindicalismo.
Para el encuentro de hoy, las tres partes se pusieron de acuerdo en no abordar temas que ocasionaran discrepancias, por lo que sólo sobrevolaron los temas espinosos (como precios y salarios) y se enfocaron en analizar los factores que generan inflación. Por eso se habló de constituir mesas de trabajo que avanzarán en la “sintonía fina” de las medidas que buscan serenar la economía.
La CGT convocará para la semana próxima a una reunión de su Consejo Directivo con el fin de informar sobre estas tratativas con el Gobierno y la UIA. Y la expectativa está puesta en qué postura adoptará el hijo de Hugo Moyano, que fue marginado de las últimas deliberaciones cegetista y que se mantiene en una postura de apoyo crítico del Gobierno y con acercamientos al kirchnerismo.
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