“Esa ley va a echar por tierra la posibilidad de sostener un proceso industrial en Argentina, se van a perder muchísimos puestos de trabajo y vamos a retroceder a los momentos del 2001″. No es una frase de la carta de renuncia de Máximo Kirchner a la presidencia de su bloque en Diputados. Son declaraciones de octubre del 2016, proferidas en una cena de gremialistas y dirigentes kirchneristas que se hizo en el Hotel Bauen, y la ley a la que se alude es la que el entonces Gobierno de Cambiemos sancionó en marzo de aquel año para acordar el pago a los Fondos Buitre. El autor de esas palabras fue Francisco Abel Furlán (62), flamante secretario general de la Unión Obrera Metalúrgica (UOM), que acaba de desplazar al histórico Antonio Caló de la conducción de ese sindicato.
Furlán llega a la cúpula del sindicato fabril más importante del país tras encabezar la seccional de Campana de ese gremio desde el 2008. Si bien no ha tenido un perfil público muy elevado a nivel nacional, hace 30 años que integra la UOM en Zárate, de donde es oriundo, y desde allí supo moverse estratégicamente para avanzar en espacios de poder tanto al interior del sindicalismo como de la estructura político-partidaria del justicialismo, primero, y del kirchnerismo luego.
El metalúrgico, nacido el 2 de noviembre de 1960, inició su carrera sindical en 1992, cuando tenía 32 años, en la seccional de su ciudad. Por entonces, a través del metalúrgico Ángel Recúpero, Furlán supo ubicarse y ganar reconocimiento como referente gremial en Siderca, una empresa metalúrgica estratégica del grupo Techint.
En el 2004, mientras que Antonio Caló reemplazaba al histórico Lorenzo Miguel en la conducción de la UOM a nivel nacional, el zarateño llegó a ser secretario adjunto de la regional Zárate-Campana. Ocho años después, Furlan se convirtió en el secretario general de la UOM de esa seccional, cargo que sostuvo hasta la actualidad.
Si el peronismo es, con idas y vueltas, inseparable del sindicalismo desde su nacimiento, la UOM es uno de los sindicatos de mayor preponderancia en la historia de ese movimiento político. Furlán no ignora esa historia y en paralelo a su carrera sindical también tejió redes en la dirigencia política: fue concejal y presidente del Concejo Deliberante de su municipio entre el 2003 y el 2007, por el Partido Justicialista. Posteriormente, comenzó a empatizar y a tender redes en el incipiente kirchnerismo. “Siempre estuve convencido de que Néstor y Cristina nos devolvieron las banderas históricas del peronismo”, expresó el metalúrgico en discurso que dio en 2017.
A partir de la década del 2010, el gremialista ganó más peso como dirigente del peronismo de la segunda sección electoral bonaerense. En ese sentido, en el 2014 fue elegido presidente del PJ de Zárate y al año siguiente logró un lugar muy preeminente en la lista de candidatos a diputados nacionales de la provincia de Buenos Aires. Furlán se ubicó en el cuarto lugar de la boleta que encabezó Eduardo “Wado” De Pedro para la Cámara baja. Por entonces, le agradecía a Caló por el apoyo que el otrora líder de la UOM le había dado para conseguir ese lugar.
La relación con Máximo Kirchner
Durante los cuatro años como diputado nacional, Furlán tuvo una agenda legislativa orientada hacia el sector del trabajo y la industria. Pese a algunas fracturas que en aquél entonces se dieron en el Frente para la Victoria (FpV), el sindicalista se mantuvo leal al kirchnerismo. “Yo fui tentado para dejar el bloque cuando decían que el kirchnerismo se había terminado. Yo decidí quedarme en el bloque”, reconocía en 2016, en el discurso que dio en el Bauen.
Tras el regreso del peronismo al Ejecutivo nacional en 2019, Furlán se alineó con el Frente de Todos y permaneció cercano al kirchnerismo. Cuando surgió la candidatura de Máximo Kirchner para presidir el PJ bonaerense, fue uno de los dirigentes que integró la “Rama Gremial” de apoyo al hijo de la Vicepresidenta. “Máximo es un gran compañero que siempre me honra con su generosidad”, sostuvo Furlán cuando firmó la integración en la lista que encabezaba Máximo. “Hemos compartido el trabajo en Diputados y desde ahí forjamos un vínculo de compañerismo y lealtad”, se sinceró el zarateño.
Su llegada a la conducción de la UOM
A nivel nacional, Furlan fue secretario de prensa, propaganda y cultura de la UOM desde el 2008. Si bien gran parte de su trayectoria gremial fue paralela y cercana al liderazgo de Caló, en la víspera de las elecciones internas de los metalúrgicos para este año, el exdiputado nacional ganó protagonismo en el ala de las seccionales rebeldes que se organizaron para llegar a la conducción.
Con el respaldo de la mayoría de las seccionales, Furlan desplaza a Caló tras 18 años al frente de la UOM y abre una nueva etapa en un sindicato clave. En plena fractura del Gobierno a nivel nacional, el kirchnerismo logra otro espacio de poder estratégico.
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