Héctor Luis Yrimia estuvo a punto de ser juez federal de la Nación. A mediados de los 90 llegó a posicionarse bien para ocupar el juzgado federal 4 dónde quedaban resabios del Caso Yoma. Su postulación era avalada por el por entonces ministro de Justicia Rodolfo Barra. Pero el juzgado quedó en manos de Gabriel Cavallo, que tenía el apoyo de Carlos Corach.
Yrimia había sido fiscal federal y luego pasó a ser juez de Instrucción de la Capital, es decir que se dedicaba a investigar casos criminales no relacionados con la política. Fue célebre por unos instantes a raíz de una toma de rehenes: el 3 de marzo de 2000, dos hombres entraron a robar a un negocio de motos de Villa Urquiza y tomaron rehenes. Yrimia era el juez a cargo del caso y convocó al Grupo Especial de Operaciones de la Policía Federal. También conformó un Comité de Crisis que presidió. Toda la situación fue televisada en vivo. Pese al enorme operativo cerrojo, los secuestradores escaparon.
Llegaron hasta el barrio de La Paternal y allí fueron cercados nuevamente . El magistrado, detrás de un árbol, dio la orden de abrir fuego. Murieron los dos delincuentes y uno de los rehenes terminó herido. Se mostraba entonces como un juez de mano dura. En tercera persona, a lo Diego Maradona, aquella noche dijo: “El juez Yrimia nunca negocia”. Cuando el rehén herido se repuso contó que había sido baleado por los policías, a quienes Yrimia (conocido como un juez “canero”) sobreseyó. En 2004 se alejó de la justicia después de ser denunciado por encubrir un caso de tortura llevado adelante por un colega de Instrucción.
Se dedicó entonces a su estudio de abogados y a mostrarse como experto en cuestiones de seguridad. De hecho, se presenta como presidente de la Fundación Defensa de los Activos Críticos mediante Sistemas de Seguridad Inteligentes (DACSSI).
Caminaba por tribunales y pasaba casi inadvertido hasta que el fallecido fiscal Alberto Nisman lo denunció como parte del entramado creado para el encubrimiento del atentado contra la AMIA mediante el Memorándum con Irán. El ex juez fue sobreseído.
Reapareció públicamente después de un tiempo gracias a que el consultor informático Javier Smaldone (@mis2centavos en Twitter) lo halló como parte de la estructura Zoe, un grupo conducido por Leonardo Cositorto, que se sospecha realizó una millonaria estafa con el esquema de Ponzi o piramidal y afectó a cientos de ahorristas que sufrieron la pérdida de sus inversiones. Yrimia se presentó como el “director jurídico de Zoe”.
La causa más avanzada en la que se investiga la estafa piramidal armada por el hoy prófugo internacional Cositorto es la que se lleva adelante en Villa María Córdoba. La fiscal a cargo de la investigación, Juliana Companys, titular de la Fiscalía de Instrucción del segundo turno de Villa María imputó a los “zoeanos” por los delitos de estafa y asociación ilícita.
Villa María no se trata de un punto perdido en el mapa de la organización: era el segundo centro más importante de Zoe en el país, luego de su oficina en el barrio porteño de Belgrano, cerrada después de que ahorristas que se agolpaban para buscar en vano su dinero. Por pedido de la fiscalía cordobesa hay varios detenidos y algunos prófugos, como Cositorto, quien salió al exterior antes de su pedido de captura.
El hallazgo de Smaldone permite ver a Yrimia en una exposición en la que explica que fue él quien armó el “el esquema jurídico” de Zoe. Porque, explicó “Era alegal, es decir, que funcionaba bajo ninguna regulación, pero como estábamos en pandemia, la gente del Gobierno no trabajaba y no se movía, entonces no había problemas, pero pensé que cuando volviera la normalidad íbamos a tener inconvenientes”.
Yrimia, en aquel video rescatado de los intentos de borrado, aseguró: “Somos una empresa que está hoy en 22 países, junta dinero, lo administra, lo pone a trabajar en distintas actividades , principalmente…compra de acciones, divisas oro, criptomonedas, compra y venta de inmuebles, hacen muebles baratos y los venden más caro, tiene autos. Teníamos que buscar en el estudio qué fortaleza le podemos dar que si viene una autoridad del Gobierno y nos pregunta por qué recaudan dinero. Consideramos que el fideicomiso de administración e inversión era la figura adecuada”.
Yrimia dijo entonces que esa figura estaba bajo “una autoridad regulada, que es el ministerio de Justicia de la Nación, porque está inscripta en una institución como la Inspección General de Justicia”.
Además de proveerle un andamiaje legal a Zoe, Yrimia invirtió y cuando se dirigió a su auditorio en el video, aseguró que el proyecto de Zoe era “loco, grande y posible”. Tal vez los estafados que han perdido sus ahorros no piensen lo mismo.
SEGUIR LEYENDO