Sergio Berni continúa con sus críticas hacia el Gobierno Nacional luego de haber confirmado su salida del kirchnerismo. El ministro de Seguridad de la provincia de Buenos Aires considera que a la administración de Alberto Fernández le hace falta un “baño de realidad” y que en las Legislativas del año pasado el Frente de Todos perdió algo más importante que votos: “Despilfarró credibilidad”.
Tras dos largos años de diferencias públicas con el Poder Ejecutivo Nacional, la semana pasada Berni pegó el portazo en el oficialismo: “Llegó el momento de cortar el cordón umbilical”. Más allá de su salida, permanece al frente de la cartera de Seguridad del gobierno de Axel Kicillof, y mantiene su autonomía a la hora de insistir con sus cuestionamientos al Presidente, a sus ministros y también a La Cámpora. El fin de semana tomó un rol protagónico al mostrarse combatiendo los incendios que azotan la provincia de Corrientes y despertó la polémica: “Nuestra presencia molesta porque deja en evidencia a los inoperantes, insensibles y miserables”.
“Corrientes no está pasando por un momento para hacer más política, solo estando ahí se puede comprender lo que está pasando”, afirmó este lunes al regresar a Buenos Aires. “Nunca vi algo de esta magnitud, el fuego se come minuto a minuto el fruto del trabajo de años y años de los correntinos”, graficó sobre la dramática situación y, sin dar nombres, cargó contra las autoridades: “No se puede contemplar desde una pantalla de televisión, hay que ir y ponerse al servicio de los correntinos”.
“Se nos está prendiendo fuego una provincia, no podemos hacernos los distraídos, es de insensible mirar para otro lado y estar haciendo operaciones mediáticas para criticar a los que fuimos a trabajar”, acusó y señaló que “a la política le hace falta compromiso”.
Consultado por su salida del kirchnerismo, Berni manifestó que continúa acompañando a Kicillof porque considera que “está generando políticas estructurales para cambiar la realidad de la provincia de Buenos Aires, es una persona transparente y comprometida, es un muy buen gobernador”.
Sobre Máximo Kirchner dijo que guarda “un gran respeto” pero que tiene “una mirada de construcción de la política totalmente distinta”. “No tolero cuando los espacios se cierran”, expresó en relación a La Cámpora. En ese sentido, comparó al kirchnerismo como “un tornado”: “Destructivo en el núcleo y expulsivo en la periferia”.
En diálogo con A24, el ministro opinó que “el Gobierno se boicotea todo el tiempo”. “Tiene muchas energías puestas hacia dentro y no hacia afuera, le falta un baño de realidad, se disocia de la realidad, no logra comprender que hay problemas que hay que resolver”, cargó contra el Ejecutivo Nacional.
Consultado sobre los funcionarios que proyectan la reelección de Alberto Fernández en 2023, Berni ironizó: “Una fantasía no se le niega a nadie”. “Una persona que va a una elección tiene que tener el valor más importante que le delega la sociedad que es la credibilidad, yo creo que este Gobierno en la última elección aparte de haber perdido una gran cantidad de votos, despilfarró mucha credibilidad”, sentenció.
Más allá de las críticas, Berni respaldó la negociación con el FMI por el refinanciamiento de los 44 mil millones de dólares contraídos por la gestión de Mauricio Macri: “Queremos creer que el acuerdo con el Fondo es el principio de la solución de una Argentina que requiere una terapia intensiva fuerte, queremos creerle al ministro de Economía; nadie está contento con este acuerdo, nadie quiere firmarlo, pero hay una realidad; tenemos un problema y este acuerdo debe servir para generar planes económicos que paren la inflación, que empiece a generar una Argentina con crecimiento y distribución”.
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