El gobernador de Buenos Aires, Axel Kicillof, defendió hoy la gira presidencial de Alberto Fernández a Rusia, China y Barbados y reivindicó la incorporación a la Iniciativa de la Franja y la Ruta, la ruta comercial del gobierno chino de Xi Jinping, al afirmar que el gobierno anterior encabezado por Mauricio Macri “prometió hacerlo y no pudo”.
Durante un acto oficial por la conmemoración por el 202° aniversario de la provincia de Buenos Aires, el mandatario provincial cuestionó “las anteojeras ideológicas” con las que se criticó la política exterior de Alberto Fernández en el marco del viaje hacia Asia en el que se rubricaron acuerdos y convenios con sus pares presidenciales Vladimir Putin y Xi Jinping.
“Tantas pavadas se han dicho sobre el viaje y sobre los encuentros”, arrancó con su discurso el gobernador frente al Cabildo Histórico de Luján. En la alocución, resaltó la “importancia histórica” de haber adherido “Argentina a la Ruta de la Seda”-el proyecto geopolítico y comercial que impulsa China-, y sostuvo que la gestión de de Cambiemos intentó un acercamiento para formalizar esa incorporación.
“Aunque ahora como oposición lo han criticado a mansalva, el gobierno anterior quiso hacerlo pero no pudo. Alberto Fernández firmó la participación en la Ruta de la Seda. Lo veíamos a Macri, prometiendoló con Xi Jinping, pero había que hacerlo”, sostuvo en la conmemoración en el interior bonaerense.
En ese marco, el gobernador apoyó la política exterior de Alberto Fernández y planteó que hay que “usar la cabeza” para vincularse con el mundo. “¿Qué tenemos que hacer en materia de relaciones exteriores? Tenemos que encontrar y concretar todos los acuerdos que sean de mutua conveniencia con todos los pueblos del mundo. Las anteojeras ideológicas las tienen los que niegan el multilateralismo, los que hablaban de integrarse al mundo. Esto es de conveniencia mutua”, fustigó.
“Traemos muchísimos proyectos de inversión para la provincia. Aun para los obtusos, les vamos a pedir que nos acompañen, para buscar nuevos horizontes y el bienestar de nuestro pueblo. El resto es charlatanería ideológica”, completó Kicillof.
El acto se llevó adelante desde las 11 en la calle Lezica y Torrezuri Nº 917 de Luján, donde el mandatario bonaerense estuvo acompañado por su gabinete.
Este 11 de febrero se conmemora los hechos ocurridos en 1820, cuando desapareció el poder central creado con la Revolución de Mayo y dio lugar a la formación de unidades provinciales soberanas. En particular, la provincia de Buenos Aires se constituyó en entidad política autónoma cuando se designó a Manuel de Sarratea como su primer gobernador.
En el marco de esa celebración, Kicillof cuestionó en muy duros términos a los “ignorantes que nos proponen descuartizar la provincia de Buenos Aires” para cambiar su forma de administración. “Parece que les molesta no lo que anda bien, sino que les molesta la Provincia de Buenos Aires. Esa incomodidad que ha generado la Provincia de Buenos Aires es parte de la trama de nuestra historia”.
Según el racconto histórico del mandatario, en 1820, la provincia de Buenos Aires “pretendía ser una nación” aparte del resto del territorio que provenía del virreynato del Río de la Plata. “No nos sentimos mal por esto. Somos una de las provincias de la República. Que ni se les ocurra rompernos o dividirnos para sacar provecho de un pueblo que es la primera potencia productiva, industrial y agropecuaria del país”, afirmó el dirigente del Frente de Todos.
“Nunca más la provincia de Buenos Aires puede atravesar políticas neoliberalismo porque la rompen, la destruyen. Tuvimos cuatro años de neoliberalismo y dos de pandemia, van seis años de una crisis durísima. Nuestro pueblo no aguante más. Por eso el compromiso tiene que ser el de recuperar lo perdido en la crisis”, concluyó.
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