El jefe de Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires, Horacio Rodríguez Larreta, aseguró este jueves que la decisión del gobierno nacional de traspasar el servicio de colectivos a la órbita porteña es un nuevo ataque de la Casa Rosada.
“Es una muestra más de los embates, un avance sobre la autonomía de la Ciudad. Ya sucedió con el recorte de la coparticipación”, describió el mandatario durante un acto en el Centro de Monitoreo Norte del Anillo Digital ubicado en el límite entre CABA y Vicente López, en el que se anunciaron mejoras en materia de seguridad.
Según anticipó Infobae, el Ministerio de Transporte convocó a funcionarios porteños para empezar a negociar el traspaso de las 34 líneas de colectivos cuyo recorrido comienza y termina en la Capital Federal. Detrás de la decisión política, hay una discusión sobre qué administración se hará cargo de los subsidios y cuál será la tarifa del boleto, hoy en 18 pesos.
“Es otra vez el gobierno nacional contra la Ciudad, otra vez el gobierno nacional contra los ciudadanos y contra millones de argentinos que circulan por la ciudad. Muchos son porteños y muchos de la provincia”, insistió Larreta.
Asimismo, el jefe de gobierno porteño advirtió que la decisión del gobierno nocional significa un avance contra el federalismo. “Tenemos que volver a ser un país federal y esto supone respetar la autonomía de cada distrito. Acá no puede haber ningún traspaso de funciones que no esté coordinado, que no esté acordado”, enfatizó.
Pese a las diferencias, Rodríguez Larreta aseguró que irán a la reunión: “Siempre estamos a favor del diálogo, pero están yendo contra los ciudadanos que viven y circulan en la Ciudad”.
El traspaso se daría solamente con las 34 líneas jurisdiccionales, o sea todas las que transitan solamente por el territorio porteño. Las otras 268 líneas que cumplen servicios entre la Ciudad y el Conurbano mantendrían los subsidios como están. Mientras el boleto mínimo cuesta $18 en CABA y el conurbano bonaerense, en Córdoba, Rosario, Mar del Plata o Bariloche está entre 60 y 70 pesos.
En 2021, esos subsidios fueron de alrededor de 14.600 millones de pesos. Actualmente ese costo se afronta casi en partes iguales, unos 7.000 millones de pesos aporta cada parte.
En tal sentido, Jorge Macri, ministro de Gobierno del gabinete porteño, recordó que “si el gobierno nacional decide quitarle un subsidio a una línea que maneja el propio gobierno nacional y eso tiene impacto o no en la tarifa, la tiene que comunicar y explicar a la sociedad de la misma manera que lo hizo con la luz en algunos barrios”.
“El subsidio está para que una tarifa no suba. Por lo tanto cuando quitas un subsidio, la tarifa sube. Es una decisión del gobierno definir el valor de la tarifa”, concluyó.
En las últimas horas, el jefe de gabinete porteño, Felipe Miguel, reconoció que “cuando se trata de traspasos de competencias se requiere de un acuerdo y de una ley que avale esos acuerdos; por eso es importante el trabajo conjunto”.
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