En vísperas del desembolso de USD 1.100 millones que debe enfrentar el Gobierno entre el viernes y el martes próximo para cumplir con el Fondo Monetario Internacional (FMI), el embajador argentino en China y funcionario del entorno de Cristina Kirchner, Sabino Vaca Narvaja, planteó la necesidad de “cerrar” el acuerdo con el organismo internacional “de la mejor manera”. “A nadie le sirve que se dilate”, afirmó el diplomático que descartó que Beijing salga al rescate de Argentina en la negociación de la deuda.
Vaca Narvaja declaró, a partir de reuniones que ha mantenido con el Gobierno de Xi Jinping, que “China siempre ha apoyado nuestra posición con el FMI” pero que “al ser parte del Fondo, quiere que a Argentina le vaya bien y tenga un acuerdo”. No obstante descartó que si no se llegue a buen puerto en las negociaciones, el gigante asiático interrumpa las inversiones en nuestro país.
Estas definiciones fueron parte de una entrevista que brindó el embajador a El Diario AR. Al ser consultado sobre si hay alguna ayuda concreta que se esté gestionando para fortalecer las reservas del Banco Central, como ampliar el swap o la transferencia de los Derechos Especiales de Giro sobrantes, Vaca Narvaja se limitó a responder: “Eso se lo dejo a Miguel Pesce, pero vamos a tener buenas noticias al respecto”. “Solo quiero rescatar algo que se logró y que fue muy importante: que se le permitió a Argentina empezar a pagar en yuanes las vacunas. Las últimos 20 millones de dosis de Sinopharm fueron con un descuento muy importante y eso fue también producto de un trabajo muy fuerte que después del swap empezó a hacer Pesce y nosotros lo ayudamos con el Banco Popular de China”, agregó.
Sobre cómo influye en la relación con Estados Unidos, la cercanía con el gigante asiático y el multilateralismo que pregona el Gobierno de Alberto Fernández, el diplomático consideró que “la apuesta con la administración Biden es la correcta, porque no es lo mismo que Trump”. “También hay un costo en Estados Unidos, porque lo que hicieron con Trump fue un apoyo claramente político”, remarcó en relación al préstamo de 44 mil millones de dólares concedido a la gestión de Mauricio Macri. “Nunca el Fondo había dado ese volumen de préstamo para que lo usen casi en una elección”, criticó.
El 4 de febrero Alberto Fernández aterrizará en Beijing, en el marco de los Juegos Olímpicos de Invierno. Al día siguiente mantendrá una reunión bilateral con su par Xi Jinping en la que firmarán acuerdos comerciales. Con respecto a un posible pedido de apoyo y de ampliación de los swap, Vaca Narvaja fue contundente: “Puede ayudar, pero de ahí a depender de China y pedir que nos dupliquen el swap, para mí no sería bueno”.
“Soy de la idea de tener esta mirada autónoma. Yo no basaría una estrategia unidireccionalmente con ningún país en ese sentido, ni para que te rescaten de un lado ni de otro”, continuó e insistió con que “nosotros tenemos que cerrar con el Fondo de la mejor manera; a nadie le sirve que eso se dilate”.
“La verdad es que no veo esa cuestión de que China te resolvería... primero porque no veo a China peleándose a ese nivel con Estados Unidos” y además porque “es parte del FMI”, argumentó el diplomático.
Vaca Narvaja, al igual que el ministro de Economía, Martín Guzmán, consideró que el Fondo Monetario Internacional perderá legitimidad si Argentina se desestabiliza. “Yo creo que no se va a desestabilizar porque vamos a tener esta ayuda de países que también tienen peso, que van a estar presentes y estuvieron presentes cuando más lo necesitamos. Creo que la política va a reaccionar”, expresó.
Guzmán arrancó la semana retomando las conversaciones con el staff del organismo internacional de crédito para acelerar un acuerdo de reestructuración del préstamo Stand By de 2018 y despejar los más de 19 mil millones de dólares de vencimientos de deuda que tienen lugar a lo largo de 2022.
El tiempo apremia y entre el viernes y martes próximo, el Gobierno debería pagar USD 1.100 millones al FMI. Si el Poder Ejecutivo toma esa decisión y asume el compromiso, dejaría al Banco Central con un nivel de reservas crítico. De incumplir, aunque no implique un default inmediato, sumaría más ruido a un mercado que ya cuenta con presiones cambiarias y financieras.
Vaca Narvaja asegura que en un par de años “China va a ser nuestro primer socio comercial”. Sin embargo, esa relación hoy no sirve para salvar a Argentina de la agobiante deuda.
SEGUIR LEYENDO: