La titular del PAMI, Luana Volnovich, regresó al país en medio de las fuertes críticas que emanaban desde el interior del Frente de Todos por su decisión inconsulta de viajar al exterior como turista en medio de la crisis económica. No conversó con Alberto Fernández mientras se encontraba de vacaciones en el caribe mexicano, confirmaron en Gobierno, y se esperaba que en las próximas horas tengan un contacto, en medio de las especulaciones sobre su permanencia en el cargo.
Fuentes oficiales aseguraron que la funcionaria que lidera la obra social de los jubilados y pensionados tenía previsto regresar el viernes y que ya se encontraba en el país. Su regreso, en medio del escándalo, fue mantenido en reserva hasta último momento. No había definiciones, al momento, sobre la vía de ingreso a la Argentina.
El retorno regreso se produce en medio de especulaciones sobre su permanencia en el cargo. Ayer la portavoz de la Presidencia, Gabriela Cerruti, evitó responder ante una consulta periodística en conferencia de prensa si se le pediría la renuncia. Hoy desde la Casa Rosada informaron que el jefe de Estado dejará la decisión en manos del jefe de la organización de la que forma parte, Máximo Kirchner.
El affaire desatado a raíz del viaje inconsulto de Luana Volnovich, lejos de disiparse, escalaba en las últimas horas, y en Casa Rosada atan la permanencia de la titular del PAMI en el cargo a una decisión de Máximo Kirchner. Al fin y al cabo, la dirigente fue designada al frente de la obra social de los jubilados como representante de La Cámpora durante la repartija de espacios en el Gobierno en 2019. Y su salida depende, en última instancia, del líder de esa organización.
En la coalición del Frente de Todos cada espacio ocupa distintos lugares, que fueron distribuidos minuciosamente después de largas negociaciones, hace dos años, antes de la asunción de Alberto Fernández al frente del Ejecutivo. Las salidas de los principales funcionarios dependen de sus referentes políticos, recordaron hoy en Balcarce 50, y aseguraron que el caso de Volnovich no es la excepción.
En la Casa Rosada había reserva sobre la posibilidad de darle salida a Volnovich a raíz del escándalo que generó fuertes ruidos no sólo de parte de la oposición sino dentro del propio oficialismo. Aunque entre el martes y el miércoles esa posibilidad se había negado a rajatabla, ayer la portavoz del Gobierno, Gabriela Cerruti, evitó responder una consulta periodística durante su conferencia de prensa de los jueves por la mañana. “Sin comentarios”, dijo la vocera presidencial. Sus palabras parecieron dejar abierta la posibilidad de una salida.
En tanto, el viaje a México con su pareja y también funcionario, Martín Rodríguez, dejó a la titular del PAMI, Luana Volnovich, en soledad en su propia organización política. Más allá de las críticas que emanaron desde los ministerios conducidos por dirigentes cercanos a Alberto Fernández, hubo pocas y leves expresiones de apoyo público en las filas de La Cámpora, donde reinaba el malestar, según pudo reconstruir Infobae.
Pocos se animaban a expresarse públicamente en contra de una compañera militante,pero la mayoría estaba lejos de manifestar respaldo ante una actitud que cuestionaron con severidad, por lo bajo.
Por ahora el futuro del PAMI es una incógnita. Hasta ayer, como publicó Infobae, había malestar en las filas del Instituto Patria y La Cámpora con la funcionaria, que desobedeció una de las máximas del espacio al vacacionar en el exterior en lugar de privilegiar el fomento de la economía interna. Sin embargo, no había indicios de que se piense en reemplazarla. Más bien, todo lo contrario. “Estuvo mal, seguro. O fuera de lugar. Esto es una mancha por una actitud personal de falta de tacto. Pero nunca se puso en juego su continuidad, porque su gestión es excelente”, plantearon esta mañana desde el kirchnerismo. Por la tarde, voceros oficiales se manifestaron en el mismo sentido.
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