El oficialismo bonaerense dio el primer paso. Legisladores presentaron un pedido de juicio político contra el Procurador de la provincia de Buenos Aires, Julio Conte Grand y ya adelantaron que esperan un gesto de la oposición -necesario en términos operativos- para avanzar con el proceso. Al funcionario judicial y ex Secretario de Legal y Técnica de la gestión de María Eugenia Vidal se lo acusa por el mal desempeño en el ejercicio de sus funciones. Una acusación que tomó volumen tras la aparición del video donde el ex ministro de Trabajo bonaerense, Marcelo Villegas asegura frente a agentes de la AFI, empresarios y funcionarios de la anterior gestión provincial que podían avanzar en una denuncia contra el jefe de la UOCRA La Plata, Juan Pablo “Pata” Medina porque se había chequeado con “el juez, Procuración y la fiscalía”. El procurador, jefe de los fiscales, era y es Conte Grand. Para todo eso, el oficialismo requiere el apoyo opositor y haría un intento en la tercera semana de enero con una sesión extraordinaria en la Cámara baja.
“Vamos a buscar consensos con los demás bloques políticos”, aseguró el diputado y vicepresidente III de la Cámara baja, el massista Rubén Eslaiman, en la conferencia de prensa que brindó junto al titular del bloque del Frente de Todos, César Valicenti y la vicepresidenta de la bancada, Susana González.
En los demás bloques políticos reina el hermetismo y el estado deliberativo. Técnicamente se precisan los dos tercios para habilitar el tratamiento sobre tablas del expediente que da inicio a la acusación contra Conte Grand. El oficialismo cuenta con 43 bancas. Además, cuenta para sí, al unibloque 17 de noviembre. También cree que recibirá un acompañamiento de la Izquierda que tiene dos bancas más -aunque en dos unibloques diferentes- y no descarta convencer a la terna de legisladores que integran Avanza Libertad. Con todo, en ese escenario optimista podría llegar reclutar 49 voluntades. Quedan también dos bancas que integran el bloque Cambio Federal. En principio tendría el quórum necesario para dar inicio a la sesión. Pero no todavía las 62 manos para habilitar la votación al tratamiento del juicio político a Conte Grand, siempre y cuando las bancas tengan ocupación plena.
El Frente de Todos espera replicar lo que fue el escenario para modificar la ley que limita las reelecciones indefinidas votada la semana pasada. Si bien aquella norma se terminó sancionando con votación dividida tanto en el oficialismo como en la oposición, el Frente de Todos confía en que otra vez pueda conseguir los votos. La sesión podría ser la tercera semana de enero.
La clave está en la uniformidad, o no, que muestre el bloque de Juntos, integrado por vidalistas, legisladores que responden a intendentes del PRO, las diferentes líneas de la UCR y los representantes de la Coalición Cívica. Hoy, en ese bloque de 40 votos, reina el enojo y pase de facturas, luego de lo que fue la sesión por las reelecciones indefinidas de intendentes.
Sin embargo, la lectura política entre aquella votación y la situación que se busca establecer sobre Conte Grand no es la misma. “Más allá de los enojos va a haber una defensa cerrada de Juntos”, asegura un dirigente con poder de decisión dentro de la alianza opositora.
El enojo al que hace referencia fue la votación por la modificación a la ley de reelecciones indefinidas. Allí, el malestar emana desde el radicalismo y los intendentes del PRO por el accionar discursivo y el escenario que se planteó desde el vidalismo, que votó en contra a las modificaciones a la ley, denunciando supuestos privilegios que se buscaba sostener desde la clase política, habilitando la reelección de los intendentes por un período más. El resto de los sectores de Juntos aseguran que lo que se votó, en realidad, es mejorar y corregir un decreto firmado por la ex mandataria que habilitaban las licencias a los intendentes dos años antes de cumplir el segundo mandato, permitiendo así ir por un tercer mandato. Es apenas una foto de una película intrincada que atraviesa la alianza opositora.
Sin embargo, en lo que hace a la situación de Conte Grand, advierten que en lo inmediato habrá un bloque uniforme trabando el pedido del Frente de Todos. Lo que suceda a partir de marzo, cuando entren en discusión otras negociaciones oficialismo-oposición, será otro capítulo.
En reserva desde Juntos sostienen que ya hay una investigación judicial en curso y que la avanzada del Frente de Todos es un apuro en medio de un escenario que -reconocen- es de atomización. Con un dejo de ironía hacia el interior de la fuerza opositora, un diputado de la UCR consignó a Infobae que “si nos guiáramos por los focus group, acompañaríamos al kirchnerismo para remover a Conte Grand, pero el accionar de nuestro partido no se guía por lo que digan los gurús”, buscando plantear un llamado de atención hacia el PRO.
En el Senado, el oficialismo pidió convocar a una sesión para el martes 11 de enero. El tema es similar, solo que el objetivo es responder a los requerimientos de la Justicia sobre el senador Juan Pablo Allan. Sucede que el juez federal de La Plata, Ernesto Kreplak, dispuso el allanamiento del despacho del senador provincial de Juntos que participó de la reunión cuya filmación fue revelada por la AFI.
“Nuestro bloque ha ingresado para el día martes una respuesta al requerimiento del Juez Kreplak que es convocar al Cuerpo para tratar la situación del senador Juan Pablo Allan”, aseguró la presidenta de la bancada oficialista, María Teresa García. Es que para avanzar con un allanamiento en las oficinas del legislador se requería del aval de la Cámara Alta. Allan, sin embargo, ya había consentido el allanamiento a su despacho.
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