En un contexto marcado por las tensiones internas en Juntos por el Cambio, principalmente con María Eugenia Vidal, el jefe de Gobierno porteño, Horacio Rodríguez Larreta, y la presidenta del PRO, Patricia Bullrich, se volvieron a mostrar juntos. Esta vez con fiscales del PRO que participaron en las últimas elecciones y les agradecieron por el trabajo realizado.
A pesar de los 30 grados que marcaban los registros ayer pasadas las 17:30, ambos dirigentes sonrieron e intercambiaron ideas con parte del grupo que trabajó en la campaña, durante el encuentro que se concretó en la Plaza Libertad, frente al Teatro Colón, en el barrio porteño de Retiro.
“Ambos dirigentes les agradecieron por el trabajo realizado, dialogaron sobre la experiencia de participar en tan importante hecho político e intercambiaron ideas para aportar en futuros comicios”, señalaron voceros de ambas partes.
Luego del resultado de las PASO, el jefe de Gobierno comenzó a acercarse paulatinamente al sector conocido como “los halcones” de Juntos por el Cambio, que tiene como caras más representativas a Mauricio Macri y a la propia Bullrich. Y esa tendencia pareció acentuarse tras los resultados definitivos de las elecciones legislativas.
El encuentro de Larreta con la ex ministra de Seguridad, el segundo en menos de 10 días (la semana pasada recorrieron las instalaciones de la Superintendencia de la Policía Científica ubicada en la Villa 31), se produjo en medio de la discusión y las acusaciones cruzadas por la posición de los diferentes sectores con respecto a la re reelección de los intendentes en la provincia de Buenos Aires, una ley que sancionó Vidal cuando era gobernadora y que anoche tanto la oposición como el oficialismo modificaron.
No es el primer traspié que sufre la ex gobernadora. A principio de esta semana, la mesa nacional de Juntos por el Cambio se reunió para rediseñar su conducción y la ahora Diputada nacional quedó fuera de ese esquema.
A esto hay que sumarle el duro golpe que recibió tras conocerse el video que muestra el momento en que su ex ministro de Trabajo en la Provincia de Buenos Aires, Marcelo Villegas, plantea crear “una Gestapo” para armar causas judiciales contra sindicalistas.
La diferencia de criterios aumentó la tensión interna en la coalición, la que comenzó cuando se armaron las listas de candidatos para las elecciones legislativas. En ese momento, Bullrich amenazó con desistir de su renunciamiento y presentarse al frente de una nómina propia en la ciudad de Buenos Aires para competir contra Vidal. Algo que finalmente no ocurrió.
Pero tanto Rodríguez Larreta (del sector más moderado) como Bullrich (de los Halcones del PRO) entienden que la unidad es el valor más importante que tienen como frente opositor para derrotar al oficialismo en el 2023.
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