Los datos estadísticos son contundentes e inapelables: el 82% de los internados en las unidades de terapia intensiva de la provincia de Buenos Aires por COVID-19 no están vacunados.
Infobae accedió a un trabajo realizado por el ministerio de Salud bonaerense en el que se destaca que solo el 18% de los hospitalizados en la UTI están inmunizados con el calendario completo. Esa cifra baja de manera considerable si se resta a los pacientes vacunados pero con enfermedades de base preexistentes.
Hasta el 24 de diciembre, en el sistema de salud a cargo de Nicolás Kreplak, 224 enfermos en cuidados intensivos. De ese total, 184 no se habían aplicado ninguna dosis de vacuna; 40 estaban inoculados. De ellos, dos con la primera dosis y 38 con las dos aplicaciones.
Este mapa de situación marca a las claras que las vacunas, todas las que se aplican y fueron aprobadas por la ANMAT, sin importar el laboratorio que las produce, es el arma más efectiva para combatir la pandemia del nuevo Coronavirus. Por esa razón, desde la cartera sanitaria solicitan “acudir de inmediato a los vacunatorios para frenar contagios”.
En la actualidad, 14.757.634 bonaerenses recibieron la primera dosis en el marco de la campaña VacunatePBA, pero sólo 12.647.914 personas se aplicaron la segunda dosis, esto es 2.109.720 menos. “Es fundamental recibir todos los refuerzos previstos ya que las personas vacunadas tienen menos riesgo de internación y contagio”, destaca Kreplak en diálogo con Infobae.
Como se observa en el “informe diario de gestión de camas”, el contexto actual de aumento sostenido de casos de COVID-19 no está acompañado de una fuerte demanda del sistema de salud, tanto público como privado, como ocurrió durante la primera y segunda ola. Los funcionarios bonaerenses se basan en esta situación epidemiológica para pedirle a los ciudadanos, no solo que se vacunen, sino también que retomen las medidas de cuidado para evitar restricciones más fuertes, las que “van a depender del comportamiento de las personas y del avance en la vacunación”, según la advertencia del titular de la cartera de Salud.
En la provincia de Buenos Aires todas las personas mayores de 3 años pueden acercarse a cualquier vacunatorio para recibir la primera o segunda dosis libre, sin necesidad de inscripción previa o turno. Además, se habilitó la vacunación libre para no residentes, es decir una persona que viva en otra provincia, o extranjeros que estén de visita, pueden inmunizarse en territorio bonaerense.
Egreso e ingreso de pacientes en terapia
En la región del Área Metropolitana Buenos Aires (AMBA), entre el 12 y el 27 de diciembre, los ingresos y egresos de pacientes adultos en el sistema de salud provincial se mantuvieron prácticamente constantes. En esas dos semanas, la ocupación de las unidades intensivas por casos de COVID-19 fluctuó entre el 11 y el 12 por ciento.
En el resto de la provincia de Buenos Aires la situación es aún más aliviada, aunque el incremento de internaciones fue de casi 50%. Pasó del 4,7% de ocupación de camas UTI por COVID-19 el 12 de diciembre, al 8,1% el lunes pasado. Es decir, el 27 de diciembre, último día cargado en el sistema.
Si se toma en cuenta el total de camas de terapia ocupadas tanto por casos de Coronavirus como por otras patologías en la región del AMBA, el promedio es del 49,5%. En el sector público la ocupación es del 52,4% y en el efector privado, la ocupación desciende al 47,3%. En total las camas que aún están libres son 1.830.
Ayer por la tarde, el ministro Kreplak confirmó lo que se preveía: la variante Ómicron, la más contagiosa de todas, ya llegó al territorio que gobierna Axel Kicillof. “Tenemos casos en la provincia de Buenos Aires. Hacemos una búsqueda en toda la provincia, especialmente en el conurbano, y hacemos una muestra representativa que enviamos a estudiar. Ayer (por el lunes) tuvimos la confirmación de algunos casos que están en el conurbano y en La Plata”, reconoció el ministro de Salud. Sin embargo, aclaró que “el movimiento de la curva de contagios se debe a que la Delta es muy contagiosa”.
La provincia de Buenos Aires es la jurisdicción sanitaria donde más casos de coronavirus se registran. Ayer, por ejemplo, de los 33.902 nuevos contagios detectados en el país, 11.695 fueron en territorio bonaerense. El índice de positividad en el país es del 29,07%. Esto marca los pocos testeos que se realizan. La Organización Mundial de la Salud (OMS) aconseja que ese número debe ser inferior al 10%.
La segunda jurisdicción es la provincia de Córdoba, allí se informaron 8.520 casos y en tercer lugar la Ciudad de Buenos Aires con 6.084 enfermos.
Si se tiene en cuenta la cantidad de habitantes, las posiciones serían exactamente a la inversa. Sin querer entrar en polémica, Fernán Quirós, el ministro de Salud porteño, asegura que un buen porcentaje de esos positivos corresponden a personas de la provincia de Buenos Aires que trabajan en la ciudad o que se realizan los testeos en CABA por mayor accesibilidad a los lugares de hisopados o a las Unidades Febriles.
A nivel país, según el reporte diario del ministerio de Salud de la nación, los pacientes internados en terapia intensiva por Coronavirus son 892 y la ocupación de camas UTI por todas las patologías representan un 34,4%, es decir que el sistema de salud, al igual que en provincia de Buenos Aires, aún esta lejos de estresarse.
Fue por esta realidad que el presidente Alberto Fernández estar preocupado por la nueva ola de coronavirus tras la llegada de la cepa Ómicron a la Argentina, pero aseguró que por el momento no evalúa nuevas medidas restrictivas, tal como informó este medio. Al igual que en las tierras de Kicillof, el Gobierno apuesta a la profundización de la campaña de inoculación. “En la medida en que nos vacunemos, todo va a ser más fácil de llevar”, dijo el primer mandatario durante un brindis de fin de año con periodistas en la Casa Rosada.
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