El oficialismo no lograba los números para aprobar el Presupuesto 2022 y volvió a la mesa de negociación. Y llegó el llamado de la Casa Rosada. Alrededor de las 7 de la mañana el presidente Alberto Fernández llamó y explicó el ofrecimiento que había que hacer como “gesto de buena voluntad” con la oposición.
Minutos más tarde, y en un encuentro que se desarrolló en el despacho posterior a la presidencia de Diputados, el titular de la cámara, Sergio Massa y el presidente del bloque del Frente de Todos, Máximo Kirchner, se reunieron con Cristian Ritondo del PRO y Mario Negri de la UCR, para llevar el ofrecimiento presidencial con la idea de negociar una salida a la caída de la sesión.
En ese encuentro, el oficialismo puso sobre la mesa pasar a un cuarto intermedio hasta el martes y en el medio traer un presupuesto modificado. La propuesta incluía que el lunes se presente en la Cámara el propio ministro de Economía, Martín Guzmán.
Esa oferta se repitió, minutos más tarde, ante el presidente del bloque de la Coalición Cívica, Juan Manuel López, y su par de la UCR Evolución, Rodrigo de Loredo.
Al término del encuentro, los cuatro jefes de los bloques se reunieron con la totalidad de los diputados del interbloque de Juntos por el Cambio y presentaron la propuesta del oficialismo. En un encuentro en el salón Delia Parodi, contiguo a Pasos Perdidos, la oposición mantuvo una acalorada discusión sobre el camino a seguir.
“Los sectores denominados halcones estaban por no aceptar. El argumento era que el oficialismo intentó quebrar al bloque y, como no pudo, trajo esta oferta. La discusión se elevó en el momento en que la Coalición Cívica volvió a su histórica posición y ahí se produce la fisura. Hubo muchos gritos y legisladores que se mostraron muy enojados”, explicó una fuente de Juntos por el Cambio que participó del encuentro.
En medio de la discusión apareció una nueva opción: solicitar un cuarto intermedio y que el Ejecutivo mande una carta pidiendo retirar el proyecto de ley que, en los términos prácticos era lo mismo que ir al cuarto intermedio hasta el martes pero que era de mayor agrado para los duros porque quedaba más en evidencia la derrota.
Sin embargo, se impuso la postura de los sectores que buscaron una salida consensuada y la posibilidad de lograr llevar adelante una opción de presupuesto con un argumento “temporal”. “Nosotros queremos ser gobierno en 2023 y vamos a necesitar el presupuesto”, argumentaron.
Con el regreso de los legisladores al recinto comenzaron los discursos en donde el diputado Luis Di Giacomo, del interbloque de las Provincias Unidas, propuso el cuarto intermedio, lo que generó la primera chispa de la oposición que pidió que sea el oficialismo quien “se haga cargo”.
Como hasta ese momento el acuerdo estaba en pie, el presidente de la Cámara, Sergio Massa le hizo una seña al presidente de la Comisión de Presupuesto, Carlos Heller, quien minutos más tarde pidió el cuarto intermedio.
Cuando toco el turno de que cada presidente de bloque argumentara si acompañaba o no la moción, los discursos fueron elevando el tono con acusaciones cruzadas, señalamientos personales y una propensión de la oposición a remarcar que el oficialismo había intentado “romper el interbloque, hacer que legisladores se vayan” y que esto era una derrota del Frente de Todos.
Cuando llegó el momento del oficialismo, fue el presidente del bloque del Frente de Todos, Máximo Kirchner, quien pidió la palabra para cuestionar la actitud de algunos referentes de Juntos por el Cambio que ocuparon cargos importantes durante la gestión de Mauricio Macri.
“Insultó a nuestras figuras, a nuestros representantes”, dijo indignado una legisladora del bloque opositor. “Estaba todo acordado, fue la intención de Máximo Kirchner la de salir a romper”, agregó.
Finalmente, se pasó a votación el proyecto de Presupuesto 2022 y obtuvo 132 votos en contra -115 de Juntos por el Cambio, 8 del Interbloque Federal, 4 de los bloques liberales, 4 del Frente de Izquierda y 1 Somos Energía Para Renovar Santa Cruz-. Los votos a favor fueron 121 -116 del Frente de Todos, 5 del interbloque Provincias Unidas-. Hubo dos ausentes, Alvaro Gonzalez del PRO y María Luisa Montoto del Frente de Todos y una sola abstención: Claudio Vidal de Somos Energía Para Renovar Santa Cruz.
“Nosotros sabemos de qué se trata y lo hemos planteado en todos estos días: no era lo mismo para un gobierno tener una negociación con el FMI con o sin presupuesto, prácticamente nos dijeron ‘marchen presos, nos da lo mismo’. Acá lo que no puede funcionar es la extorsión, porque hay una cuestión de responsabilidad, nosotros también hemos sido gobierno y cometido errores y aciertos y sabemos lo que significa. Ahora, estos muchachos se agarran el país para jugar a las bochas pero lo están haciendo con la gente, no con las bochas en una cancha”, señaló el radical Mario Negri.
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