El presidente Alberto Fernández sostuvo esta mañana que “no hay futuro para países ermitaños que se encierren en sí mismos o emprendan aventuras en soledad”, al exponer en la reunión del Mercosur que se desarrolló en forma virtual desde Brasil, con la participación de los cuatro países que integran el bloque regional y con representantes de estados asociados.
”Vivimos el desarrollo de otros países como nuestro propio desarrollo. El crecimiento de uno ha favorecido el del resto”, afirmó el mandatario argentino en su disertación desde la Residencia de Olivos, donde estuvo acompañado por el ministro de Relaciones Exteriores, Santiago Cafiero; el ministro de Desarrollo Productivo, Matías Kulfas; el embajador argentino en Brasil, Daniel Scioli -quien viajó especialmente a Buenos Aires invitado por el Presidente-, el secretario de Asuntos Estratégicos, Gustavo Beliz y la secretaria de Relaciones Económicas Internacionales de la Cancillería argentina, Cecilia Todesca.
Fernández destacó que se “debe priorizar la integración dinámica y competitiva en las cadenas regionales de valor” y aseveró que el bloque es “el proyecto de integración regional más importante para la Argentina” y pidió “discutir a fondo con lealtad y franqueza cómo seguir asociándonos en materia de infraestructura, conectividad, energía e inteligencia comercial”.
También insistió en que “la clave es conseguir aperturas de mercados relevantes sin asumir obligaciones imposibles de cumplir”, lo cual “nos exige una visión comercial integrada y una capacidad de coordinación para atender a cada uno de nuestros intereses nacionales”.
“Estamos terminando el segundo año de una pandemia que, a diferencia del anterior, ha sido el de la recuperación económica. Nuestras economías han comenzado a recobrar impulso. Ahora tenemos por delante el desafío de hacer sostenible ese crecimiento, asegurando que sus beneficios puedan llegar a toda la población. La Argentina respalda con entusiasmo la Declaración sobre la Recuperación Post pandemia”, describió Fernández. Después remarcó que “hace 10 años alcanzamos niveles record de intercambio. El desafío es recuperar esos niveles. Compartamos las visiones de prospectiva. Tenemos un ejemplo: el de los industriales de nuestros países y sus centrales. Ellos comprendieron mejor que nadie que ninguno puede solo”.
Luego de hacer un repaso de las dificultades que se debieron atravesar durante la pandemia, en el último tramo de su discurso el jefe de Estado argentino habló del Arancel Externo Común, que es uno de los temas que mayores diferencias provocan entre los países del Mercosur: “Han pasado más de tres décadas y venimos revisando el Arancel Externo Común para adaptarlo a las nuevas realidades de nuestros países y del mundo. Adoptamos un enfoque productivo, apuntando a una rebaja en insumos y materias primas que nos permita ganar en competitividad, promoviendo también nuestra inserción en las cadenas regionales de valor”.
La afirmación de Fernández sonó como un guiño cómplice hacia Lacalle Pou, quien esta vez adoptó una posición más moderada que en ocasiones anteriores. El mandatario uruguayo destacó que en los últimos años se produjo un “sinceramiento” dentro del mercado común y que si bien “no pudimos llegar a entendimientos, sabemos hacia donde vamos, con un futuro próximo un poco distinto”. También agregó que esta discusión del AEC, “genera tensiones entre los intereses nacionales” y propuso “llegar a un punto central para que todos se sientan satisfechos”. Para finalizar Lacalle Pou pidió que ese debate continúe: “El mundo necesita nuestros productos, apostando a esa apertura al mundo”.
Bolsonaro, por su parte, insistió durante su mensaje que la rebaja de la tarifa externa común seguirá siendo prioritaria para Brasil. “Lamentamos que no hayamos podido lograr un acuerdo sobre este tema en este semestre, a pesar de los esfuerzos realizados por Brasil y de aceptar una rebaja menor de la que queríamos inicialmente; el tema seguirá siendo prioritario en nuestra agenda”, dijo.
Además, destacó que, a pesar de la crisis sanitaria, Brasil, al frente del bloque en la presidencia pro-tempore, mantuvo abiertos todos los canales de diálogo con los socios extranjeros para ampliar las posibilidades de acuerdos comerciales. En este sentido, afirmó que Brasil trabajó con la UE para “avanzar rápidamente” rumbo a la firma del acuerdo comercial, siempre manteniendo “el equilibrio original” al que se llegó después de largas negociaciones.
El brasileño fue el primer orador de la LIX Cumbre de Jefes de Estado del Mercosur bloque regional y los Estados Asociados en la que Brasil le traspasará a Paraguay la presidencia pro témpore del bloque. También hubo intervenciones del presidente de Chile, Sebastián Piñera, y del de la República Cooperativa de Guyana, Irfaan Ali.
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