Especialista en derecho penal y con un paso por el gobierno de Néstor Kirchner, Alejandro Slokar fue designado hoy como presidente para el 2022 de la Cámara Federal de Casación Penal, el máximo tribunal penal del país después de la Corte Suprema de Justicia de la Nación. Por allí pasan las investigaciones y los juicios orales de las causas de corrupción que involucran a los funcionarios públicos y empresarios.
De 57 años, hincha de Independiente, Slokar es juez de la Cámara de Casación desde septiembre de 2011 cuando llegó con otros jueces en una renovación del tribunal que fue creado por el gobierno de Carlos Menem. Es su primer cargo como magistrado y llegó tras un concurso público en el que quedó primero en la terna. El gobierno de Cristina Kichner lo designó.
Progresista en su mirada del derecho, Slokar es discípulo del ex juez de la Corte Suprema y actual integrante de la Corte Interamericana de Derechos Humanos Eugenio Zaffaroni. En los 90 integró la cátedra de Zaffaroni en la Facultad de Derecho de la Universidad de Buenos Aires y con el ex juez de la Corte y el fiscal Alejandro Alagia escribió el libro “Derecho Penal. Parte General”. En la UBA también integró la cátedra de Esteban Righi, ex procurador General de la Nación durante los gobiernos de Néstor y Cristina Kirchner.
El nuevo presidente de Casación se recibió de abogado 1987 y trabajó en la justicia de la ciudad de Buenos Aires, en la Morón y en la defensoría General de la Nación. Cuando en 2011 asumió como juez el primer piso de los tribunales de Comodoro Py -donde está la Cámara Federal de Casación Penal- el lugar no le era ajeno. En los 90 había sido secretario letrado de Jorge Casanovas, juez de ese tribunal.
Slokar tuvo un paso por la política. En abril de 2004 asumió como subsecretario de Política Criminal del Ministerio de Justicia de la Nación. Entonces el ministro era Gustavo Béliz, hoy secretario de Asuntos Estratégicos del Gobierno de Alberto Fernández.
Su faceta política la llevó a la justicia cuando impulsó como fundador “Justicia Legítima”, una agrupación judicial que dispuso el poder a la tradicional Asociación de Magistrados y Funcionarios de la Justicia Nacional (AMFJN). Se trata de una agrupación cercana a las posturas judiciales del kirchnerismo de la que Slokar integró su comisión directiva.
No será la primera vez que esté al frente de Casación. Slokar ya fue presidente del cuerpo en 2016. Repite el cargo en la rotación de presidentes con los vicepresidentes. Slokar fue durante el 2021 vicepresidente primero. La elección estaba disputada entre él y Daniel Petrone, juez de la Sala I de Casación. La designación de Petrone como presidente hubiese significado que deje la sala, una costumbre de quienes son electos presidentes. Y en la Sala I se encuentran las causas por la firma del memorándum de entendimiento con Irán y Hotesur-Los Sauces, dos expedientes en los que el año que viene el tribunal deberá resolver si confirma los sobreseimientos de Cristina Kirchner y si ordena que sean juzgados. La salida de Petrone de la sala hubiese agitado más las aguas con su reemplazante en dos causas de alto impacto político.
Como vicepresidente de Casación este año Slokar tuvo una participación activa en una disputa interna que se generó. Fue cuando se conoció que sus colegas del tribunal Gustavo Hornos y Mariano Borinsky habían visitado varias veces en la quinta de Olivos al entonces presidente Mauricio Macri en fechas cercanas a fallos que dictaron contra Cristina Kirchner y funcionarios de su gobierno.
Slokar pidió la renuncia de Hornos como presidente del cuerpo y varias veces pidió que los 13 jueces de Casación -hoy 12 por la renuncia en septiembre pasado de Liliana Catucci- se reúnen para tratar el tema. Nunca se llegó a juntar los concesos internos. “Es necesario un cambio de rumbo y en particular la remoción del Presidente de la Cámara. Acá no hay lugar para distraídos, el linchamiento mediático y la complicidad judicial no se pueden negar”, dijo Slokar en una entrevista radial en marzo sobre lo que ocurría en Casación.
Como juez dictó varios fallos importantes. En agosto pasado fue uno de los magistrados que confirmó la condena de seis años de prisión al ex secretario de Obras Públicas José López por los bolsos con nueve millones de dólares; lo propio hizo en 2014 con la ex ministra de Economía Felisa Miceli por el dinero encontrado en el baño de su despacho pero ordenó que se fije una nueva pena. También ratificó las condenas a los genocidas Jorge “Tigre” Acosta y Alfredo Astiz, entre otros, en el primer juicio por los crímenes de lesa humanidad cometidos en la Escuela de Mecánica de la Armada (ESMA) durante la última dictadura militar.
En 2002, Slokar tendrá como vicepresidente primero a Mariano Borinsky y como vicepresidenta segunda Ana María Figueroa.
SEGUÍ LEYENDO: