Con el crimen del kiosquero en Ramos Mejía, todas la miradas apuntan a la gestión de la Municipalidad de la Matanza en materia de seguridad, distrito gobernado desde 2005 por Fernando Espinoza, con una interrupción entre 2015 y 2019 de Verónica Magario que responde al histórico intendente. Según el último informe de la Procuración bonaerense, hoy es la tercera jurisdicción con mayor tasa de criminalidad luego de Lomas de Zamora y San Martín. Pese a esos números, desde Juntos por el Cambio denuncian que durante los últimos dos años hubo una subejecución del presupuesto del 31% en el 2020 y de más del 50% en 2021 en materia de seguridad. “Prioriza la especulación financiera y el gasto electoral mientras empeoran las condiciones de vida de todos los matanceros”, alertaron desde la oposición.
Según un análisis presupuestario realizado por la Mesa Política de Juntos por el Cambio La Matanza, en 2020 sólo se utilizó el 31% de los casi $1.000 millones destinados para los programas de Seguridad y Protección Ciudadana. “Es incomprensible encontrar en los registros contables importantísimos montos no ejecutados en rubros como salud, educación y tecnología, adultos mayores, infraestructura urbana, seguridad y protección ciudadana ante los incontables reclamos de los vecinos. Del mismo modo, es inconcebible que a los cuantiosos saldos favorables entre ingresos y egresos se los destine a engrosar los plazos fijos y los bonos dolarizados, inversiones voluminosas que conviven con demandas básicas, decadencia infraestructural y descuido de las prioridades más acuciantes”, alertaron.
Justo en el 2020, año en el que más días de cuarentena estricta hubo, ocurrieron 140 homicidios dolosos cometidos, dos de ellos en ocasión de robo, con 107 tentativas. 33 de estos casos fueron criminis causa, matar o intentar matar para ocultar otro crimen. Los robos son otra historia: hubo más de 20.647 casos, con 7.581 de los hechos cometidos a mano armada. Hubo, también, casi 10 mil casos de hurto, según el último informe de la Procuración.
De los homicidios, 14 fueron presuntamente cometidos por menores. 270 de los casos de robos corresponden a esta categoría. En comparación general, Lomas de Zamora registró 145 crímenes consumados. La pandemia como factor había bajado notablemente las estadísticas. Sin embargo, el cuadro de La Matanza para 2019 muestra 133 homicidios consumados y 123 intentados.
Si bien los números de la Procuración sobre el 2021 no estarán publicados hasta abril del próximo año, esta semana el crimen de Roberto Sabo reflotó en el territorio bonaerense el flagelo de la inseguridad, a pocos días de que se realicen las elecciones legislativas. El asesinato ocurrió sobre la Avenida de Mayo al 800, en la localidad bonaerense de Ramos Mejía, cuando el comerciante de 48 años atendía su kiosco llamado “Drugstore Pato”, ubicado a tres cuadras de la Comisaría Seccional Segunda. Allí fue sorprendido por una pareja de delincuentes armados que intentó asaltarlo, le disparó y lo mató. Segundos después y para escapar, los asesinos (un ex convicto de 30 años y su cómplice, una adolescente de 15 años) le robaron un auto a un remisero y, luego, una moto a un delivery: no llegaron muy lejos y los detuvieron.
Según un informe elaborado por los equipos técnicos de Alejandro Finocchiaro, referente de la oposición en La Matanza, la tendencia que se registró el año pasado se repitió este año. Es que durante el 2021, de acuerdo a esa investigación, se ejecutó sólo el 55,6% del presupuesto destinado a programas de protección ciudadana y fortalecimiento de la seguridad, cuando a esta altura de año debería haberse gastado al menos el 75%. En paralelo, aseguran que en estos 9 meses del 2021 “la inversión en plazo fijo y en bonos pasó de $ 9.655 millones a $ 14.375 millones”. Es decir que se incrementó en $4.720 millones.
Otro dato sorprendente es en los gastos en salud. Al 30 de septiembre del 2021, sólo se subejecutó el 22,5% del presupuesto en los programas para la atención en las internaciones, centros de salud y proyectos para la mejora del sector. A eso hay que sumarle que La Matanza es uno de los distritos con menor tasa de vacunación contra el Covid-19.
Las mismas fuentes aseguran que los ingresos reales de este trimestre fueron de $ 29.484 millones y los gastos $ 24.709 millones, lo que resultó un superávit por no gastar de $ 4.774. Algo similar a lo que sucedió en el 2020, donde “gran parte de ese superávit se puso en el plazo fijo y los bonos $ 4.720 de incremento de la inversión”.
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