El submarino ARA San Juan implosionó a las 10:55 hs del 15 de noviembre de 2017, luego de que -según la hipótesis que maneja la Justicia- una explosión en uno de sus bancos de baterías dejara a la tripulación incapacitada para poder maniobrar la nave para llevarla a la superficie. Esa fue la información que surgió más de un año después de aquel día en el marco de la investigación, pero por entonces sólo se tuvo conocimiento de la desaparición de la nave tras días sin dar señales ni ser registrado por los radares.
De manera inmediata, luego de conocerse la noticia el Comando Naval de Tránsito Marino difundió el despliegue de un operativo de búsqueda y rescate denominado SAR SUB para el submarino “ARA San Juan” y sus 44 tripulantes. “Un corte de energía que generó un incendio en el banco de baterías”, fue la información que trascendió en un primer momento. En los meses siguientes, los familiares de la tripulación impulsaron de manera constante la búsqueda de sus seres queridos.
En diciembre de aquel año, los familiares de los tripulantes se reunieron con representantes de los distintos bloques en el Congreso de la Nación para exigir que se conforme una Comisión Investigadora por fuera de la que ya trabajaba y que respondía a la Armada Argentina. Todos los frentes, incluido el oficialismo, dieron el visto bueno al pedido de las familias, que se realizó en medio de mucha emoción y de un reclamo unánime: “Que no se abandone la búsqueda”. Los familiares incluso ya habían aceptado la visita del entonces Presidente de la Nación, Mauricio Macri.
Desde un principio se montó un operativo de enorme escala con colaboración internacional para la búsqueda. La Armada Argentina sumó aeronaves y embarcaciones nacionales y extranjeras. Varios países comenzaron a brindar su colaboración con aviones, radares, barcos y otros navíos equipados con tecnología de vanguardia. Llegó ayuda desde Estados Unidos, Reino Unido, Alemania, Francia, Chile, Perú, Brasil, Uruguay, Colombia, Rusia y Noruega.
En agosto de 2018, el Gobierno contrató a la empresa estadounidense Ocean Infinity para continuar con las tareas de rastrillaje. La compañía dispuso del buque noruego Seabed Constructor, equipado con cinco submarinos robóticos que pueden sumergirse a 6.000 metros de profundidad, filmar y recolectar datos en alta resolución.
En noviembre de 2020, en tanto, se supo que la Armada conocía la ubicación del submarino hundido 20 días después de su desaparición. El contraalmirante Enrique López Mazzeo, imputado en la causa, reconoció entonces que desde el 5 de diciembre de 2017 el gobierno de Mauricio Macri sabía en qué posición se encontraba el navío siniestrado con sus 44 tripulantes. Lo hizo ante la Cámara de Apelaciones de Comodoro Rivadavia.
La juez federal Marta Yañez fue quien tomó las riendas en la investigación de las posibles responsabilidades del entonces presidente Mauricio Macri, de su ministro de Defensa, Oscar Aguad, y también del ex jefe de la Armada en el naufragio Marcelo Srur, entre otros.
La aparición del submarino ARA San Juan
Un día después de cumplirse un año de su desaparición, el submarino ARA San Juan fue hallado a 907 metros de profundidad y a unos 500 kilómetros del Golfo San Jorge, a la altura de Comodoro Rivadavia. Aquel sábado 17 de noviembre de 2018, la información fue confirmada a Infobae por las máximas autoridades de la Armada Argentina. La embarcación fue hallada a las 0.30.
En conferencia de prensam, las autoridades de la Armada admitieron que por la zona buscaron todas las marinas que participaron del rescate en aquel tiempo. También aseguraron que se trataba de un área muy próxima al lugar donde se sintió la implosión, llamada “ruido acústico”; y que había 90% de probabilidades de localizarlo en el área en la que efectivamente estaba.
Sobre la factibilidad de reflotar del fondo del mar los restos del ARA San Juan, Oscar Aguad -por entonces el ministro de Defensa de la Nación- admitió aquel día que el Estado no contaba con los elementos ni la tecnología para rescatar los restos de la nave.
“No tenemos medios para rescatar el ARA San Juan, no teníamos medios ni siquiera para bajar a las profundidades del mar y no tenemos equipamiento para extraer un buque de estas características”, reconoció en ese momento el funcionario.
Las primeras imágenes captadas por la empresa Ocean Infinity fueron muy borrosas, pero permitieron precisar algunos datos para entender qué pasó con el submarino:
– El casco resistente del ARA San Juan, es decir la parte central, apenas se deformó. Los especialistas creen que pasó los 400 metros de profundidad sin sufrir modificaciones en su estructura principal.
– No se encuentran perforaciones en el casco principal.
– Sólo ingresó agua al submarino cuando cedieron las soldaduras del casco principal con otras partes anexas, como la proa y la popa.
– Las estructuras anexas que estaban soldadas al casco principal, como la proa, la popa, el chaperío, la hélice y el palo del timón están dispersas en un radio pequeño. De ahí que se cree que el submarino llegó prácticamente intacto al fondo del mar. En las imágenes se pueden ver tres partes principales: la proa, la popa y el casco principal.
La denuncia de espionaje a familias de víctimas del ARA San Juan
La Agencia Federal de Inteligencia (AFI) denunció a fines de septiembre de 2020 que el gobierno de Cambiemos hizo espionaje ilegal sobre familiares de los tripulantes del submarino que en 2018 fue hallado hundido en el océano Atlántico tras un año desaparecido.
Cristina Caamaño, que desde diciembre de 2019 ocupa el cargo de interventora de la AFI por decisión de Alberto Fernández, presentó ante la Justicia una denuncia que afecta a diversos ex funcionarios, entre ellos Macri; quien fuera su jefe de inteligencia, Gustavo Arribas, y su segunda, Silvia Majdalani.
Caamaño especificó entonces que se presentó la acusación tras hallar tres discos duros con documentación que acredita ese presunto espionaje, que se realizó, afirmó, “por fuera de cualquier mandato judicial y en abierta violación a la ley de inteligencia nacional”.
”No estábamos hablando de terroristas ni de crimen organizado, sino de un grupo de familiares que estaba tratando de buscar a los familiares que quedaron atrapados en el submarino ARA San Juan”, señaló la interventora hace casi un año atrás.
Macri, este jueves, irá a declarar ante el juez de Dolores Martín Bava justamente en el marco de la causa que investiga el supuesto espionaje a familiares de los tripulantes del submarino ARA San Juan.
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