Un texto elaborado por el líder de la Resistencia Ancestral Mapuche (RAM), Facundo Jones Huala, desde la celda donde permanece detenido en Chile tendría relación con el ataque al campamento de Vialidad Provincial en Bariloche y el incendio de un centro de informes a punto de inaugurar en el centro de El Bolsón, ocurridos a principios de mes. Así lo cree el Gobierno de Río Negro, que el viernes pasado denunció ambos episodios ante la Fiscalía Federal de Bariloche.
“Resulta insoslayable, como quedará acreditado en la investigación, que el accionar denunciado se circunscribe en el marco del llamado a profundizar y radicalizar la lucha, realizado por una carta publicada días atrás por Facundo Jones Huala” aseguró la provincia, a través del Fiscal de Estado y ex Ministro de Seguridad y Justicia de la provincia, Gastón Pérez Estevan.
Jones Huala es el líder de la RAM, agrupación que se adjudicó haber protagonizado el ataque al campamento de Vialidad Provincial, el pasado 3 de octubre.
Está detenido en Chile, luego de ser extraditado a ese país para cumplir una condena por un atentado incendiario ocurrido en 2013 contra la estancia Pisú Pusé, en Valdivia.
La RAM opera desde hace más de 10 años en la Patagonia, tanto argentina como chilena, con numerosos ataques en las provincias de Neuquén, Río Negro y Chubut, y en varias provincias trasandinas.
El vecino país, por decisión de su Presidente Sebastián Piñera, decretó el Estado de Emergencia y dispuso el envío de militares a cuatro provincias ubicadas en dos provincias del Sur. Se debe a que en las últimas horas se registraron numerosos ataques como el incendio del fundo mencionado, un complejo turístico y dos iglesias.
“Las Fuerzas Armadas podrán prestar apoyo logístico, tecnológico y de comunicaciones. También apoyo de vigilancia, patrullaje y transporte, a los procedimientos policiales que se desarrollen en las zonas declaradas en Estado de Emergencia”, argumentó el mandatario.
En Argentina, por su parte, el Gobierno rechazó el envío de fuerzas federales a la zona de conflicto y apeló al diálogo con las comunidades para detener la violencia. El anuncio, en boca del Ministro de Seguridad Aníbal Fernández, fue criticado duramente en las provincias australes.
En el escrito al que hace referencia el Gobierno de Río Negro en su denuncia, Jones Huala invita a profundizar la conciencia y la “combatividad desde la lógica Mapuche de Weichan. Menos llanto y más combate debe ser la prioridad… si muchos mayores plantean que hay que combatir pero los jóvenes están miedosos, estamos mal…”.
La nota del convicto agrega que “todo aquel que tenga la vitalidad para empuñar un tralka, una piedra, que sea capaz de soportar la represión y responder debe hacerlo, esa es la dignidad de la Nación Mapuche. Basta de discursos pacíficos, basta de hipocresía, y si hay niños y ancianos dejenlos en un lugar resguardado o alejense una distancia prudente para combatir sin exponerlos, que no sea una excusa para esconder cobardía, quienes no nos sentimos representados por los institucionales y los cobardes no tenemos porque obedecerlos ni seguirlos, ni seguir dejando que se impongan, ellos se imponen y los agresivos somos nosotros? No, basta! es tiempo de poner las cosas en su lugar”.
El ataque que Río Negro calificó como “terrorista”
La misma agrupación a la que hace referencia el Gobierno de Río Negro, se adjudicó el último ataque al campamento vial a pocos kilómetros de Bariloche.
En la presentación gubernamental ante la Fiscal Federal interina, Sylvia Little, se menciona el texto en el que la agrupación admite haber incendiado el campamento, en “solidaridad con la lucha que lleva adelante la Lof Quemquemtreu – un grupo autodenominado mapuche de escasa representatividad”- en el paraje Cuesta del Ternero, donde tres integrantes de esa comunidad mantienen la ocupación de un predio perteneciente a un productor forestal.
El grupo que protagonizó los ataques “tiene como finalidad la de imponer sus ideas por medios violentos” dice la querella, y sostiene que “no tiene por objeto cometer incendios, amenazas ni robos. Muy por el contrario y como venimos desarrollando, y se acreditará con la investigación, estos hechos delictivos buscan sembrar el terror para imponer sus ideas, y es esa la afectación al orden público”.
SEGUIR LEYENDO: