Filoso como de costumbre, José Luis Espert volvió a utilizar sus redes sociales para abrir una polémica, en este caso por el feriado del 12 de octubre, que se celebró con un fin de semana extra largo con fines turísticos desde el viernes 8 hasta el lunes 11.
“Mañana 12 de octubre los seres humanos normales festejamos, como toda la vida, el Día de la Raza. Y eso no tiene nada de racista. Los simios drogados kirchneristas, no sabemos qué engendro lingüístico festejarán”, disparó el candidato a diputado nacional en la provincia de Buenos Aires por el espacio Avanza Libertad.
El economista hizo este comentario citando un artículo de la agencia estatal Télam que da cuenta sobre la resignificación del 12 octubre que, gracias a una medida impulsada por Cristina Kirchner en 2010, le cambió la denominación al feriado por Día del Respeto a la Diversidad Cultural para quitarle los tintes racistas a los festejos por la llegada a América de Cristóbal Colón.
“Octubre Marrón, actividades para resignificar el 12 de octubre en clave antirracista”, se titula la nota de Télam, que hace un repaso sobre distintas actividades culturales -obras de teatro, muestras fotográficas, festivales, instalaciones y exposiciones artísticas- para “interpelar los lugares que históricamente nos han sido asignados social y culturalmente”.
Según la explicación oficial, en 2010 se cambia la denominación para dotar a la fecha “de un significado acorde al valor que asigna nuestra Constitución Nacional y diversos tratados y declaraciones de derechos humanos a la diversidad étnica y cultural de todos los pueblos”.
“Este cambio de paradigma implicó dejar atrás la conmemoración de ‘la conquista’ de América para dar paso al análisis y a la valoración de la inmensa variedad de culturas que han aportado y aportan a la construcción de nuestra identidad”, completa.
La iniciativa para modificar el nombre comenzó en 2007 por impulso del INADI, que presentó un proyecto para que la fecha se convirtiera en un “día de reflexión histórica y diálogo intercultural”. Sin embargo, no fue hasta noviembre de 2010 que, a través de un decreto, la ex presidenta Cristina Kirchner lo llevó a cabo.
“El cambio tuvo que ver también con que el concepto de división de la humanidad en ‘razas’ no poseía validez alguna y sólo conservaba una idea sociocultural y política errónea y peyorativa. Aquella alusión, además, solo favorecía a las reivindicaciones racistas”, se explica en la página del Ministerio de Cultura.
Y completan: “De esta manera, se dejó atrás la única valoración sobre la cultura europea para conmemorar la enorme diversidad de culturas. Entre ellas, la de los pueblos indígenas y afrodescendientes que siguen aportando y construyendo parte de la identidad nacional”.
Este día se conmemora solamente en la Argentina el 12 de octubre, aunque en 2001 se aprobó la Declaración Universal de la UNESCO sobre la Diversidad Cultural y en 2002, a través de la resolución 57/249, la Asamblea General de las Naciones Unidas declaró el 21 de mayo como el Día Mundial de la Diversidad Cultural para el Diálogo y el Desarrollo.
Según la UNESCO, “las tres cuartas partes de los mayores conflictos tienen una dimensión cultural” y “superar la división entre las culturas es urgente y necesario para la paz, la estabilidad y el desarrollo”.
“La diversidad cultural es una fuerza motriz del desarrollo, no sólo en lo que respecta al crecimiento económico, sino como medio de tener una vida intelectual, afectiva, moral y espiritual más enriquecedora. Todo esto está presente en las siete convenciones de la cultura, que proporcionan una base sólida para la promoción de la diversidad cultural. Esta diversidad es un componente indispensable para reducir la pobreza y alcanzar la meta del desarrollo sostenible, gracias, entre otros, al dispositivo normativo, hoy día ya completo, elaborado en el ámbito cultural”, afirman en la página oficial.