La semana que viene vuelve la actividad normal y la presencialidad total a la Cámara de Diputados ya que el oficialismo llamó a una sesión especial para el próximo martes 5 de octubre para tratar, entre otros temas, la ley de etiquetado frontal de los alimentos.
El llamado a sesión llegó hoy y en el temario se agregan otros proyectos de ley, todos de procedencia del oficialismo. Así, también está en el temario la ampliación de derechos para las personas en situación de calle, régimen diferencial especial para trabajadores vitícolas y despido y remuneración mínima a los trabajadores del sector de viñas y frutales.
Un dato que llamó la atención de los legisladores de Juntos por el Cambio es que en el temario quedó excluida la ley Ovina, otro proyecto que está a la espera de ser tratado en la Cámara baja, que ya tiene media sanción y que, al igual que etiquetado, si no se aprueba este año pierde estado parlamentario.
Pero no solo es llamativo que no esté en el temario por su posibilidad de perder estado parlamentario, sino porque es de vital importancia para la producción de las provincias patagónicas, en especial, de Chubut.
Quizás la respuesta se encuentre más en la Casa Rosada que en el Palacio Legislativo. Ayer el gobernador de la provincia patagónica, Mariano Arcioni, un hombre muy ligado al massismo, estuvo en la Casa Rosada reunido con el jefe de Gabinete, Juan Manzur. El encuentro habría sido para tratar de convencer al chubutense de que baje su lista -que quedó tercera en las PASO- para arrastrar sus votos a la lista del Frente de Todos.
Por ahora Arcioni no dio ninguna señal respecto a la decisión que tomará frente al pedido del Gobierno de retirar de la competencia la lista que lleva como candidato al ministro de Seguridad, Federico Massoni. Recordado por haberse sacado totalmente la camisa para darse la vacuna contrale COVID-19, y con el sugestivo sobrenombre de “el Berni de Chubut”, el candidato ya adelantó que no tiene planeado bajarse.
Reglamento
Hasta dos horas después del llamado que hizo el oficialismo, la sesión corría riesgo porque desde el bloque de Juntos por el Cambio reclamaban dar de baja el reglamento sanitario que firmó hace algunos días atrás el presidente de la Cámara de Diputados, Sergio Massa, porque entendían que era un cambio a la normativa y que eso tiene que ser aprobado por tres cuartos de la Cámara.
Pero mientras muchos esperaban que la discusión por lo que se conoció como “Protocolo de Recinto Protegido”, que establecía excepciones para la presencialidad, se sucediera en labor parlamentaria, Massa decidió firmar una nueva resolución modificando la anterior y estableciendo la presencialidad total sin tantas excepciones.
“Dado que a la fecha se establece la presencialidad para la realización de las sesiones y las reuniones de las comisiones, las solicitudes de licencias y las ausencias se regirán por lo normado en los artículos 16 a 28 del Reglamento Interno”, señala el documento.
En Juntos por el Cambio festejaron a medias el cambio. “Dispone el regreso de la presencialidad absoluta, sin el festival de excepciones que cuestionó Juntos por el Cambio, pero el presidente de la Cámara no quiso responder los cuestionamientos de nuestro bloque pero da respuesta a los que hizo el diputado Luis Di Giacomo, aliado rionegrino”.
Di Giacomo le envió una carta a Massa coincidiendo con algunos puntos de la resolución sobre “Recinto Protegido”, pero le pide “su reconsideración y revisión de algunos de sus puntos”.
“Para Juntos por el Cambio es un triunfo, al igual que el retorno de las sesiones totalmente presenciales en el Senado. De este modo, el martes hay sesión en Diputados con los temas pedidos por el Frente de Todos”, sostuvieron.
Este primer encuentro también servirá para semblantear el humor de los bloques de cara a la discusión del Presupuesto 2022, que se espera que arranque el debate en comisión.
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