A toda hora chatea por whatsapp con el presidente Alberto Fernández y con los ministros para monitorear cada acción. Madruga desde que se instaló en Buenos Aires el lunes, a tal punto que durante tres días consecutivos llegó a la Casa Rosada antes de las 7 de mañana. Va de reunión en reunión porque quiere imprimirle una aceleración a la gestión de gobierno como reconocen desde su entorno. El ritmo hiperkinético que el nuevo jefe de Gabinete, Juan Manzur, le puso al trabajo diario obliga a todos a levantarse muy temprano, desde los voceros de prensa de cada área hasta el personal policial y el de custodia en Balcarce 50 que depende de la Casa Militar o los mozos que deben servir desayunos en las oficinas.
Su actividad es frenética. A las 6.30 ya está leyendo los diarios en el auto oficial. En apenas una semana logró que la centralidad de las noticias se centren en cada movimiento que realiza el oficialismo. Una semana atrás, luego del duro traspié electoral en las PASO que sufrió el Frente de Todos el 12 de septiembre, la agenda había puesto a la oposición a la ofensiva; pero recurriendo a la metáfora futbolera, se puede apreciar que ahora la pelota quedó de su lado.
Este jueves Manzur arribó a la Rosada a las 6.58, un par de minutos más tarde que ayer miércoles cuando había convocado a la primera reunión de Gabinete a su cargo, según dijo “por instrucción directa del Presidente”. Hasta su arribo al despacho que está muy cerca del presidencial todo arrancaba después de las 9. Ya el martes organizó una conferencia de prensa a las 8.30 en la que junto a la ministra de Salud, Carla Vizzotti, se anunciaron qué restricciones iban a eliminarse a partir del mes de octubre, como la no obligatoriedad en el uso del barbijo, el regreso del público a los estadios de fútbol y a otros espectáculos masivos al aire libre y también el ingreso de turismo extranjero con esquema completo de vacunación.
Manzur conversa muy seguido con el ministro de Economía, Martín Guzmán, porque los anuncios económicos predominarán durante esta primera semana en la que se instaló en la Jefatura. También es fluido el contacto con su antecesor, Santiago Cafiero, ahora a cargo de la Cancillería argentina. Con Gabriel Katopodis, el titular de Obras Públicas, habla de la recuperación de la “territorialidad”, uno de los mandatos que les impuso al ex intendente de San Martín y también a Juan Zabaleta, de Desarrollo Social y a Eduardo “Wado” de Pedro. Según trascendió, una de los órdenes de Alberto Fernández es que se recorra “cada barrio, cada municipio y cada provincia” con el fin de escuchar las demandas de la población que le permitan al Gobierno un mejor resultado electoral en las elecciones legislativas del 14 de noviembre.
Claudio Moroni, el responsable del Ministerio de Trabajo, mantuvo ya dos cónclaves a primera hora con Manzur, el martes y el miércoles. Tras el anuncio del aumento del Salario Mínimo, Vital y Móvil, se esperan nuevos anuncios desde ese área.
Este jueves Gustavo Béliz, secretario de Asuntos Estratégicos, y De Pedro fueron de los primeros en instalarse en sus despachos. De Pedro a las 11 recibirá al gobernador de Tierra del Fuego, Gustavo Melella, y una hora después se encontrará con otro mandatario provincial, Sergio Ziliotto, de La Pampa. En esas dos jurisdicciones el Frente de Todos obtuvo un resultado adverso en las PASO del 12 de septiembre.
Junto a Zabaleta esta mañana Manzur se mostrará en el municipio bonaerense de Moreno donde presentará el programa “Mi pieza”, destinado a la compra de materiales de construcción para mujeres de escasos recursos. El miércoles, el jefe de Gabinete había estado en el palco junto al Presidente en el acto en José C. Paz para inaugurar la Facultad de Ciencias Médicas que depende de la Universidad Nacional de ese distrito.
Por la tarde estuvo con Martín Insaurralde, el ex intendente de Lomas de Zamora que recientemente fue designado por Axel Kiciloff como su jefe de Gabinete en la provincia de Buenos Aires. Según se informó posteriormente el objetivo fue establecer un acuerdo y trabajar en una agenda en común. Coincidieron en fortalecer las políticas de producción y creación de empleo”.
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