La cabellera rubia de Myriam Bregman apareció por el balcón del elegante salón del hotel donde el Frente de Izquierda-Unidad instaló su búnker electoral, en el barrio porteño San Nicolás. “¡Vamos, Solano, vamos!”, gritó “la Rusa”. El precandidato a legislador detuvo su charla con algunos periodistas, miró hacia arriba y le devolvió, entre risas: “¡Cómo te gusta el balcón!”.
La escena pinta el clima descontracturado que se vivía desde temprano en la base del sector mayoritario de la izquierda unida: ya corría por aquí la brisa primaveral del optimismo que se coronó con los números oficiales publicados pasadas las 21. Las PASO dejan al FITU a las puertas de una elección histórica, con muy buenos números -en relación con sus expectativas- en Provincia de Buenos Aires, Ciudad Autónoma y Jujuy.
En la provincia de Buenos Aires, el FITU obtiene 5,14% (a las 22.18 del domingo) y supera la lista de José Luis Espert. El Frente de Izquierda se jugará en noviembre las únicas dos bancas nacionales que tiene en Diputados. Con estos números es un escenario posible.
Lo mismo ocurre en CABA. Con Myriam Bregman a la cabeza de la lista, la izquierda va por la conquista de una banca en el Congreso Nacional por el territorio porteño por primera vez en sus 11 años de historia como Frente. Con casi el 90% de las mesas escrutadas, las listas de las precandidatas Bregman y Celeste Fierro (MST) suman 6,22%.
Pero también podrían conquistar un sillón de Diputados desde Jujuy, donde en la noche del domingo conseguían el 23,66% de los votos. En esa provincia se disputan tres lugares en la Cámara Baja del Congreso. Y son tres partidos: el radicalismo, el peronismo y la izquierda. El FITU tiene dos caminos para obtener una banca: o superar al peronismo (28,07%) o lograr que el radicalismo (46,36%) no lo duplique en votos. También hace una muy buena elección en Neuquén, Chubut, Córdoba, San Juan y Santa Cruz. Aunque allí será mucho más difícil obtener un lugar para el Congreso.
“En la Provincia de Buenos Aires se destaca en la elección de La Matanza donde estamos por encima de la media de la provincia y al borde de ingresar al Consejo Deliberante”, remarcó Gabriel Solano, entre abrazos y cantitos, como el clásico “Frente de Izquierda / patrones a la mierda”. En ese distrito, el más populoso de la Provincia, el FITU cosechó el 8%, una cifra histórica. “Entre los más humildes nos votaron en muchos distritos, se nota el descontento”, remarcó uno de los hombres que estuvo detrás de la exitosa campaña de la izquierda, con los famosos spots viralizados en los que parodiaban a las series Okupas y Los Simuladores.
El resultado de las PASO se interpreta aquí como “un fortalecimiento” para este sector, que en las últimas semanas apuntó a “polarizar” con el candidato de extrema derecha Javier Milei, a quien se lo analiza como la principal amenaza en la disputa por el voto joven y el de los migrantes, una de las patas sobre las que se sostiene la estructura electoral este espacio.
“Fue una campaña durísima. El FITU fue totalmente ninguneado. La derecha tuvo mucho espacio en los medios”, comentó Bregman a Infobae. Y agregó: “La izquierda que se une está dando una sorpresa. Se la premió y da un ejemplo de lucha en las calles, en el Congreso y en todas las legislaturas del país. Se habló mucho de que hay una derechización y es verdad, hay un sector que quiere que el ajuste lo pague el pueblo trabajador”, comentó la precandidata a diputada por CABA.
“La gente acompañó a esta izquierda que se une. La Lista 1A es un claro referente en la lucha contra el extractivismo, por los derechos de las mujeres, el pueblo es consciente que si se quieren cambiar las leyes laborales, qué mejor que votar a la izquierda. ¿Quién te va a defender mejor en el Congreso? Somos los únicos que no tenemos compromiso con los sectores de poder”, remarcó Bregman.
”La gente que votó a Milei diciendo ‘yo amo a la dictadura’, ‘amo los planes de ajuste’, que lo vote. El problema es que hay mucha gente confundida por el discurso antipolítica de Milei”, había dicho el diputado nacional y precandidato a su reelección por la provincia de Buenos Aires, Juan Carlos Giordano al ingresar al búnker.
“El FIT ha hecho una muy buena elección en todo el país con una importantísima elección en Jujuy, con más de 20 puntos, donde estamos disputando ingresar al Congreso, en CABA la mejor elección desde que existe el FIT y en PBA los primeros datos dicen que somos la tercera fuerza en la Provincia. Hemos estados en la lucha del pueblo trabajador y la apostamos multiplicar”, proyectó Nicolás Del Caño, precandidato a Diputado Nacional en la Provincia.
Las proyecciones marcan que si el FITU (la alianza del Partido Obrero, el Partido de los Trabajadores Socialistas, Izquierda Socialista y el Movimiento Socialista de los Trabajadores) mantiene estos números en noviembre podría conservar las dos bancas puestas en juego en Provincia y quizás dar el batacazo en Jujuy y CABA.
En el búnker de la izquierda no ocultaron el enojo con los sectores de la misma ideología anticapitalista que buscaron ir en otras listas, como Luis Zamora (Autodeterminación y Libertad) en Capital, que consiguió el 2,64% de los votos, y Manuela Castañeira (Nuevo MAS) en Provincia de Buenos Aires, que pasadas las 22 había conseguido el 0,83%. Para sumar lo que necesitan para entrar al Congreso, en el FITU esperan que los votos a los partidos de izquierda que no entren a la elección general de noviembre, como sería el caso de Casteñeira, sirva para sumar y alcanzar el objetivo.
“Todo el mundo pensaba que iba a haber una elección muy importante de la derecha y nadie tenía en cuenta a la izquierda. Y podemos asegurar sin la menor duda que la izquierda es la gran sorpresa electoral del día. Es muy significativo. El Frente de Izquierda defiende a los trabajadores en un contexto de ajuste”, remarcó, entre gritos y abrazos, Gabriel Solano.