El presidente estadounidense Joseph Biden le envió una invitación formal a Alberto Fernández para que participe del Foro de Grandes Economías sobre Energía y Clima, que tendrá lugar de forma virtual el próximo 17 de septiembre. El evento contará con la participación de los líderes del G-20, quienes se reunirán con el objetivo de discutir el camino y los esfuerzos conjuntos para hacer frente a la crisis climática y transformar la matriz productiva mundial para no sobrepasar el objetivo de aumento global de 1,5 °C consensuado en el Acuerdo de París.
Biden convoca a este Foro de Grandes Economías sobre Energía y Clima como preparación para la COP 26 de Glasgow, Escocia, que se hará entre el 1 y el 12 de noviembre, y en seguimiento del Diálogo de Alto Nivel sobre Acción Climática en las Américas co-organizado por Argentina y otros países de la región, así como de la Cumbre Mundial de la Tierra del mes de abril, en el que la Administración Biden, junto a la Argentina y otros países del mundo y de la región, dieron a conocer los lineamientos de su renovado compromiso ambiental.
En la carta que le envió, Biden le agradece a Fernández la reciente organización del Diálogo de Alto Nivel sobre Acción Climática en las Américas que se realizó el miércoles de esta semana de manera virtual desde el Mueso del Bicentenario de la Casa Rosada y que contó con la presencia de varios líderes políticos de la región.
“La crisis climática nos enfrenta tanto a un profundo desafío generacional como a una oportunidad extraordinaria para crear una economía más próspera y sostenible que beneficie a todos”, dice uno de los párrafos de la carta del mandatario estadounidense que está fechada el miércoles pero que recién hoy fue difundida por Presidencia de la Nación.
“Como líderes de las principales economías del mundo, debemos asegurarnos de que nuestros esfuerzos durante esta década crítica sean lo suficientemente rápidos y audaces para mantener el objetivo de mantener el aumento de la temperatura en 1,5 grados centígrados al alcance”, agrega. “En julio de 2021, los ministros de clima y energía del G20 declararon la intención de todos los países del G20 de presentar contribuciones ambiciosas determinadas a nivel nacional por la COP26. Muchos ya lo han hecho. Nuestra reunión es una oportunidad para que los líderes informen sobre los pasos adicionales que están dispuestos a tomar”, afirma el líder demócrata.
Biden tiene como prioritaria la agenda referida al Cambio Climático. Por eso en el encuentro que sostuvieron Alberto Fernández y el Enviado Especial para el Clima de Estados Unidos, John Kerry, el 14 de mayo de este año en Roma, se empezó a gestar la reunión regional que encabezó esta semana el presidente argentino desde Buenos Aires. Fernández ha puesto este tema también como uno de los que más le preocupan.
Antes, el mandatario estadounidense había invitado al jefe de Estado argentino a participar de la Cumbre sobre Cambio Climático que se desarrolló el 22 de abril de este año cuando se celebró el “Día de la Tierra”.
omo líderes de las principales economías del mundo, debemos asegurarnos que nuestros esfuerzos durante esta década crítica sean lo suficientemente rápidos y audaces para mantener el objetivo de mantener el aumento de la temperatura en 1,5 grados centígrados al alcance. En julio de 2021, los ministros de clima y energía del G20 declararon la intención de todos los países del G20 de presentar contribuciones ambiciosas determinadas a nivel nacional por la COP26. Muchos ya lo han hecho. Nuestra reunión es una oportunidad para que los líderes informen sobre los pasos adicionales que están dispuestos a tomar”, escribió Biden.
El miércoles el presidente Alberto Fernández planteó la necesidad “de pensar mecanismos innovadores para reconstruirnos mejor”, entre los que consideró la revisión de los plazos y condiciones de la deuda contraída con el Fondo Monetario Internacional (FMI), durante la apertura de la Cumbre Latinoamericana sobre Cambio Climático de la que participó Kerry y el secretario general de las Naciones Unidas, António Guterres, junto a mandatarios, ministros y otros funcionarios técnicos de la región.
En su discurso de apertura, Fernández agradeció al representante de la Casa Blanca por el “enorme aliento que significa escuchar al gobierno americano comprometido nuevamente con este problema que a todos nos afecta” como es el cambio climático, y señaló que “el reloj de la destrucción planetaria no se va a detener si no actuamos ahora”.
En ese encuentro en el que participaron 21 países de la región, Alberto Fernández ratificó su respaldo al “multilateralismo ambiental” y solicitó que la deuda contraída con el FMI sea negociada por acciones que mitiguen la emisión de gases de industrias contaminantes.
“Las lecciones aprendidas con las vacunas en esta pandemia tienen que ser aplicarlas a la pandemia que ya padecemos, la del cambio climático. Necesitamos aplicar la emisión de los Derechos Especiales de Giro (DEG) del FMI a un gran pacto de solidaridad ambiental, que incluya esencialmente a países de bajos ingresos y de renta media, y que sirva para extender los plazos para atender los pagos del endeudamiento y la aplicación de menores tasas bajo las actuales condiciones estrés sanitario y ecológico”, sostuvo el jefe de Estado.
Fernández reconoció que Argentina es “un país afectado por el endeudamiento tóxico y depredador”, aunque su visión se aplica “para el resto de los países que aumentaron su exposición en la deuda de la pandemia”. “Los canjes de deuda por acción climática, los mecanismos de pago por servicios ecosistémicos y el concepto de deuda ambiental, junto la categoría de “acreedores ambientales” -que son los países menos desarrollados- son otras claves para al salida de la crisis”, expuso el mandatario.
Además, convocó a “identificar a los avances en tecnologías limpias como bienes públicos globales, fortaleciendo el concepto de “multilateralismo ambiental”, y solicitó “acuerdos de transferencia tecnológica para la adaptación ecológica y una liberación de las patentes de estos bienes tan necesarios para impulsar la adaptación al cambio climático”.
A su turno, John Kerry cuestionó que haya perdido el tiempo el gobierno norteamericano anterior de Donald Trump para impulsar políticas que detengan el calentamiento global, ratificó que el presidente de Estados Unidos, Joseph Biden, se comprometió a aumentar el presupuesto ambiental.
El ministro argentino de Ambiente y Desarrollo Sostenible, Juan Cabandié, remarcó después que con los países de la región hay “muchos puntos en común”, y resaltó las coincidencias sobre la importancia de promover medios de implementación, canje de deuda por acción climática, y poner el acento en la adaptación y su financiamiento.
“Somos una región vulnerable a las consecuencias del cambio climático, con una vulnerabilidad ambiental y social muy grande. Estamos en una etapa donde tenemos la oportunidad de construir una transición que sea justa y solidaria”, subrayó Cabandié.
Además de Kerry y Guterres otros políticos que intervinieron en el evento del miércoles pasado fueron la primera ministra de Barbados, Mia Amor Mottley; los presidentes de Colombia, Iván Duque; de Costa Rica, Carlos Alvarado Quesada; de Panamá, Laurentino Cortizo Cohen; de República Dominicana, Luis Abinader; y de Paraguay, Mario Abdo Benítez; la Presidenta de la COP25 y ministra del Medio Ambiente de Chile, Carolina Schmidt; y el presidente de la COP26, Alok Sharma.