A nueve días de las elecciones PASO, y con la intención de frenar cortes, piquetes y movilizaciones en la calle, el ministro de Desarrollo Social, Juan Zabaleta y representantes de cuarenta organizaciones populares que no están alineadas con la Casa Rosada, se reunirán mañana, a las 10, en el piso 14 del edificio ubicado en Lima y Moreno, en el centro porteño. La denominada “Unidad Piquetera” le entregará un escrito en el que demandan, entre otros puntos, “trabajo genuino, apertura irrestricta de los programas sociales y su universalización para terminar con los punteros y los mediadores, el aumento del monto de los planes que han sido desvalorizados por la inflación y alimentos de calidad y variedad para los comedores populares mientras dure la emergencia”.
Los movimientos sociales que se verán cara a cara con el funcionario de Alberto Fernández están encabezado por el Polo Obrero y otras organizaciones sociales. Según pudo saber Infobae, representados por el dirigente Eduardo Belliboni, las organizaciones sociales le entregarán en mano a Zabaleta “una propuesta para que efectivamente, y sin manipulaciones políticas se conviertan los planes sociales en trabajo genuino”. El propio ministro aseguró que ese es su objetivo desde que llegó a la cartera en reemplazo de Daniel Arroyo.
“En los últimos 20 años los gobiernos de turno lo único que hicieron es aumentar el asistencialismo sin conseguir modificar la situación de pobreza, desocupación e indigencia en la que millones de familias se encuentran”, sostienen desde el sector piquetero de izquierda.
En caso de no obtener una respuesta positiva en los próximos días, el Polo Obrero amenaza con “intensificar” las medidas que vienen llevando adelante desde el mismo día en que asumió su cargo el ex intendente de Hurlingham.
El 18 de agosto pasado, la “Unidad Piquetera” realizó una masiva movilización desde Puente Pueyrredón hasta el edificio de Desarrollo Social. Zabaleta calificó como “política” la marcha ya que la mayoría de las organizaciones que participaron forman parte del Frente de Izquierda Unidad, que también compite en el acto eleccionario del próximo domingo 12 de septiembre.
Ese día, la ciudad de Buenos Aires fue un caos y hasta derivó en una causa judicial ya que las cámaras del canal de noticias TN grabó a un grupo de dirigentes tomando presente a personas encolumnadas con la Organización Clasista Revolucionaria (OCR) y que reciben planes sociales en lo que parece ser una “coacción”, según se desprende del expediente que tramita en Comodoro Py.
Los piqueteros también le reclamarán a Zabaleta, como lo hicieron durante la marcha pasada, un plan de obras públicas para utilizar mano de obra a través de las cooperativas de trabajo que ellos mismos manejan y también solicitarán “soluciones habitacionales”. Como se ve, la mayoría de las exigencias que mañana le realizarán a Zabaleta son de largo aliento e involucran a otros ministerios.
Desde el mismo día de su asunción, el ex intendente aseguró que el suyo es un ministerio de puertas abiertas y que no hará falta cortar calles para encontrar soluciones a los conflictos sociales. Ese es el encuadre que Zabaleta le dará a la reunión de mañana.
Si bien el funcionario hará todo lo posible para evitar que el centro porteño se trasforme en un caos de tránsito por las movilizaciones en la última semana antes de las elecciones PASO, la lectura en la Casa Rosada es lineal, no existe promesa que pueda calmar las marchas. “El negocio de la izquierda son los piquetes y mucho más ahora, en plena campaña electoral. Ellos juegan para el Frente de Izquierda y es parte de su estrategia, lo hacen siempre”, describe un funcionario de Jefatura de Gabinete.
Hay otro factor para tener en cuenta. Si Zabaleta llegase a comprometerse con ellos a otorgar planes sociales por fuera de lo ya acordado con los movimientos sociales alineados con el Gobierno, como los que forman parte de la Unión de Trabajadores de la Economía Popular (UTEP) habría rebelión en la granja, y eso es algo que se quiere evitar.
Al medio día, el Polo Obrero realizará una conferencia de prensa en la zona del obelisco para evaluar los resultados del encuentro.
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