El canciller Felipe Solá expondrá hoy desde las 13 ante la Comisión de Relaciones Exteriores del Senado de la Nación mediante una videoconferencia la posición argentina ante el conflicto que se planteó con Chile por un decreto que dictó el presidente de ese país, Sebastián Piñera, la semana pasada en el que fijó límites de las áreas marinas y terrestres chilenas que se superponen con las argentinas.
Solá estará acompañado por Daniel Filmus, secretario de Malvinas, Antártida y Atlántico Sur, y por los equipos técnicos de la Cancillería. La presentación del canciller irá acompañada de documentos y mapas que respaldan la postura argentina. “Vamos a enviar un documento formal con nuestras razones a la Cancillería chilena”, le anticiparon fuentes del Palacio San Martín a Infobae. Por ahora no se analiza realizar una presentación ante ningún organismo porque “el tratado de Paz y Amistad celebrado entre ambos países en 1984 contempla sus propios mecanismos de arbitraje”. Recurrir, por ejemplo, ante la Corte Internacional de La Haya “sería la última instancia”.
Con los 19 senadores que integran esa Comisión también se analizarán los tres proyectos de resolución que presentaron legisladores de la Cámara Alta durante los últimos días ante la escalada en el diferendo limítrofe. Uno es de la senadora por el Frente de Todos, la fueguina María Eugenia Duré, quien adhiere al comunicado que difundió la cartera que conduce Solá “en respuesta al decreto publicado en el diario oficial de la República de Chile pretendiendo apropiarse de una parte de la plataforma continental”. El radical Pablo Blanco, también de Tierra del Fuego, firmó otro proyecto donde rechaza la decisión adoptada por Piñera “que extiende la plataforma continental chilena sobre la Argentina”.
El último pertenece al puntano Adolfo Rodríguez Saá. En su iniciativa se expresa el “más formal y expreso rechazo al decreto supremo 95, emanado del Ministerio de Relaciones Exteriores del gobierno chileno (publicado oficialmente el pasado 27 de agosto en el Diario Oficial de ese país) mediante el cual, Chile, de modo arbitrario, inconsulto y violatorio de los tratados internacionales vigentes, se atribuye ilegítimas facultades para proyectar la plataforma submarina continental” de ese país, “al Este del meridiano 67º 16′ 0”. Entre los senadores habría consenso para que se unifiquen los tres proyectos.
Argentina, mediante un comunicado que se emitió el sábado 28 de agosto a través de la Cancillería, había acusado a Chile de “pretender apropiarse de una parte de la plataforma continental argentina y de una extensa área de los fondos marinos y oceánicos”, tras un decreto del presidente Sebastián Piñera que fijó los límites de su territorio soberano en la zona del Cabo de Hornos, en el extremo más austral del continente americano.
La decisión del jefe de Estado chileno desconoce los acuerdos sobre Hielos Continentales de 1998 y el tratado de Paz y Amistad de 1984. Con su decreto del 23 de agosto, a pocos meses de terminar su mandato, Piñera intenta apropiarse de 1.000 kilómetros cuadrados de una zona de los Hielos Continentales que ya estaba delimitada y sumar otros 5.000 kilómetros cuadrados al territorio de Chile que pertenecen a la plataforma continental de la Argentina.
“Esta medida pretende proyectar la plataforma continental al Este del meridiano 67º 16´ 0, lo cual claramente no condice con el Tratado de Paz y Amistad celebrado entre ambos países en 1984”, expuso el comunicado de la Cancillería argentina. De acuerdo a los términos del Estado argentino, el límite exterior de la plataforma continental nacional en esta zona se refleja en la Ley Nacional 27.557, sancionada el 4 de agosto de 2020 por unanimidad.
Este martes, Solá reaccionó en su cuenta de Twitter por el comunicado que había emitido la secretaría de Relaciones Internacionales del PRO con la firma de la presidente de ese partido, Patricia Bullrich. “Reniegan de nuestros derechos dejando de lado los intereses de la Patria. Sin palabras”, escribió el canciller. “El PRO ha puesto en un plano de igualdad el reconocimiento de la ONU de los derechos argentinos sobre el mar austral con una decisión unilateral expresada en un decreto presidencial de Chile”, consignó.
El PRO había difundido un comunicado en el que proponía que ambas Cancillerías se reúnan e inicien una etapa de diálogo que “permitan zanjar las diferencias existentes”. En ese texto se concluía con que “en los últimos 30 años, Argentina y Chile han podido resolver pacíficamente más de 25 diferendos fronterizos a lo largo de 5.000 kilómetros, que habían producido graves tensiones durante más de un siglo. Con ese mismo espíritu, no podemos retrotraernos a los tiempos de desconfianza recíproca”, lo que provocó la reacción casi inmediata de Solá.
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