Tratar de dar vuelta la página con lo que fue la foto de Olivos: ese es el plan. El Frente de Todos cerró filas y ordenó “mirar hacia adelante”. En ese contexto, el oficialismo realizó hoy un gran plenario con dirigentes nacionales y provinciales para trabajar sobre las líneas de campaña y repasar logros de gestión de cara al último mes antes de las PASO.
El acto se llevó a cabo en el Estadio Único Diego Armando Maradona de La Plata y apuntó a que Alberto Fernández y Cristina Kirchner, ambos presentes, refuercen una imagen de unidad, junto al gobernador, Axel Kicillof, el presidente de la Cámara de Diputados de la Nación, Sergio Massa y el presidente del bloque del Frente de Todos en la Cámara de Diputados, Máximo Kirchner, además de los candidatos a diputados nacionales por la Provincia.
“Tenemos que imaginar la vida que queremos porque la vamos a volver a tener”, afirmó la vicepresidenta al inicio de su discurso. “Tenemos que tener en Casa Rosada y en las bancas sentados hombres y mujeres que estén dispuestos a soportar las más grandes presiones que sufren los que queremos que la vida de la gente sea cada vez mejor”, agregó. “La vida que queremos requiere no de uno, sino de muchos períodos de gobierno”, amplió.
En otro pasaje, y sin nombrar a la oposición, afirmó: “Es mentira que siempre todo estuvo mal, nos quieren convencer de lo inconcebible”.
El cierre estuvo a cargo del presidente Alberto Fernández. Inició con fuertes críticas a Mauricio Macri y a los dirigentes de Juntos por el Cambio, a los que llegó a calificar como “ladrones de guante blanco” cuando describió los procesos de licitación de la obra pública durante la gestión de Cambiemos, y afirmó: “Estamos orgullosos de lo que hicimos en este tiempo; en la campaña no vayamos con dudas, la pandemia fue un obstáculo, pero no se olviden todo lo que hicimos fue inmenso, la cantidad de medidas y acciones que tomamos”.
El diputado Máximo Kirchner fue el primer orador del encuentro y luego fue el turno de Massa. “A pesar de que hablan de la vocación hegemónica del Frente de Todos, de que salimos de la republica, pero lo real es que gobernamos con un Congreso en minoría, no teníamos ni mayoría ni quórum para imponer las herramientas que el presidentes sentía que eran importantes imponer para llevar adelante las soluciones que nos piden los argentinos”, afirmó.
Y agregó: “Entendiendo que cometimos errores como comete cualquiera, tenemos tres semanas para ir a buscar a los vecinos a cada barrio para decirles que sigan confiando en nosotros”.
La bajada de línea fue tratar de dejar atrás el escandalo del festejo clandestino en Olivos es mirar hacia adelante. Mostrar lo que se hizo y lo que se hará. Ese fue el pedido para todos los candidatos.
Kicillof, a su turno, apuntó contra la oposición y la gestión bonaerense de María Eugenia Vidal: “Pretendieron gobernar la provincia desde la ciudad de Buenos Aires; fue un gobierno ausente, pensado con una lógica que no es de esta provincia, ni pensado en las necesidades de esta provincia”.
Hasta La Plata se trasladaron también intendentes, candidatos a diputados nacionales, diputados y senadores provinciales y concejales. La idea es que los candidatos se lleven un insumo de primera mano de parte de los principales actores del espacio.
Entre otros temas, se trabaja en la modalidad de ternas para recorrer la provincia hasta el cierre de la campaña: candidatos (principalmente Victoria Tolosa Paz y Daniel Gollan) acompañados de dos funcionarios cada uno, que variarán según el eje de la visita. Por ejemplo, si en alguna recorrida Gollan incluye una visita a una fábrica estaría acompañado por el ministro de Producción bonaerense, Augusto Costa.
El evento era también una demanda de distintos participantes del Frente de Todos: sobre todo intendentes y legisladores bonaerenses que se quejaban de la escasa participación que se les daba a la hora del pre armado electoral, cuando los movimientos del oficialismo se debatían en la llamada “mesa de los lunes”.
La provincia de Buenos Aires -y particularmente el conurbano- es la apuesta del Frente de Todos en la elección de medio término. Pero para el gobierno de Kicillof lo importante será también el desempeño electoral en el interior bonaerense, sobre todo por el impacto que tendrá en la composición 2021-2023 del Senado bonaerense, donde hoy tiene mayoría Juntos por el Cambio. Son 26 bancas para JxC y 20 para el FdT.
Una vez activada la reducción de daños por el caso de Olivos -que el gobierno cree que se empezará a notar a la brevedad- el oficialismo ofrecerá otras cartas para la discusión electoral: dar cuenta del impacto que tiene la ley de tarifa fría que alcanza a más de 50 municipios bonaerenses, el plan de desarrollo urbano en lo que fue la toma de Guernica y los cambios realizados en materia impositiva, tanto con la suba del piso de impuestos a las ganancias como la ley del monotributo. Eso, sumado al plan de vacunación y algunas cuestiones de corte más provincial como el Plan de Desarrollo Rural o los fondos para el sector turísticos y hoteleros que se desplegaron desde el ministerio de Producción bonaerense.
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