Este lunes a las 17:15 un avión con 934.200 dosis de Astrazeneca, proveniente de Estados Unidos, aterrizará en el Aeropuerto Internacional de Ezeiza. Con ese cargamento Argentina alcanzará un total de 20.677.145 dosis recibidas desde que comenzó el operativo de vacunación contra el Covid-19 en diciembre del 2020.
Según el último registro del Monitor Público de Vacunación, el Gobierno aplicó 16.360.449 dosis, de las cuales 13.025.688 fueron primeras dosis y 3.334.761 son segundas dosis. Con esa cantidad de inoculaciones, recién se vacunó con una dosis el 28,63% del total de la población, sobre un universo de 45.376.763 habitantes que hay en el país, según el registro del INDEC en 2020.
Los distritos en donde más se avanzó con la vacunación son la Ciudad Autónoma de Buenos Aires, que vacunó al 37,71% de los habitantes, Tierra del Fuego con el 30%, La Pampa con el 33,15%, San Luis con el 32,19% y Jujuy con el 31.51%.
El aumento en el porcentaje de vacunación durante las últimas semanas está íntimamente relacionado al caudal de dosis que comenzó a llegar a la Argentina. El Gobierno tiene estipulado en su plan de acción que lleguen cerca de 7 millones de vacunas por mes y tratar de vacunar un promedio similar. La clave está en que el ritmo de llegada se mantenga a lo largo de las semanas. Que no se frene. Porque el impasse disminuye la efectividad logística.
El último jueves, con la aplicación de 376.815 dosis, fue el día con más inoculaciones realizadas desde que comenzó a implementarse el plan de vacunación. El ministerio de Salud que conduce Carla Vizzotti apuntaba a aplicar un promedio de 300.000 dosis diarias con el envión generado por el crecimiento en el volumen de vacunas. El número de aplicaciones está mejorando lo que esperaban.
Sin embargo, en la última semana desde la Casa Rosada le llamaron la atención a los gobernadores que agilicen las aplicaciones. En el Gobierno notaron que había algunas provincias que se habían demorado en el operativo de vacunación y tenían dosis en su poder. Fernández quiere acelerar al máximo el proceso de vacunación y tensó la cuerda con algunos mandatarios por la tardanza en las aplicaciones.
Hasta el momento Argentina cuenta con 19.742.945 vacunas disponibles: 9.415.745 corresponden a Sputnik V (7.875.585 del componente 1 y 1.540.160 del componente 2, 4.000.000 a Sinopharm, 580.000 a Astrazeneca - Covishield, 1.944.000 a Astrazeneca por el mecanismo COVAX y 3.803.200 a las de Astrazeneca y Oxford cuyo principio activo se produjo en la Argentina. Con las 934.200 que llegarán hoy se superará la barrera de los 20 millones.
Las negociaciones con los laboratorios
Uno de los principales proveedores de vacunas del Gobierno es el Instituto Gamaleya. Los une un contrato por 30 millones de dosis de Sputnik V. Rusia demoró la entrega de las vacunas en el primer semestre pero a partir de este mes regularizaría los envíos. En Balcarce 50 consideran que, según se comprometió el gobierno ruso, llegarán a la Argentina cerca de 4.000.000 de dosis por mes.
La vacuna de AstraZeneca, desarrollada por la Universidad de Oxford, comenzaron a llegar después de una extensa demora. Las primeras deberían haber arribado en marzo. Contando las que arribarán en el vuelo de esta tarde, el Gobierno contará con 4.237.000 dosis de ese laboratorio que forman parte del acuerdo por 22.431.000 dosis. El promedio de entrega que esperan en el oficialismo es similar al de Rusia. Cerca de 4 millones de dosis mensuales.
La última semana Carla Vizzotti anunció que el Gobierno firmó el contrato con China por 6 millones de dosis de la vacuna Sinopharm. De ese total, el país recibirá 2 millones en junio y 4 millones en julio. Estas dosis se suman a las 4 millones que el gobierno nacional compró en el primer trimestre del año.
En en ese mismo anunció agregó que se autorizó el uso de emergencia de la vacuna Convidecia, de la empresa Cansino Biologics INC, que le permitirá al Gobierno avanzar en el acuerdo por 5.400.000 de dosis.
Del Fondo Covax, Argentina recibió 1.944.000 de dosis de Astrazeneca de las 9.000.000 que le deben llegar. La relación con Covax quedó bajo la lupa luego de que Santiago Cornejo, el director de ese organismo para América Latina, asegurara que el Gobierno le había pedido que no enviara vacunas de Pfizer a la Argentina.
La revelación generó un escándalo político que duró pocas horas. Al día siguiente Cornejo de desdijo y sostuvo que la gestión de Fernández no se había negado a recibir la vacuna sino que el Gobierno aún no había firmado un contrato con Pfizer.
Para las últimas semanas de junio el presidente Alberto Fernández espera contar con las primeras vacunas Sputnik V producidas en Argentina. Se trata de las dosis que pondrá en circulación el laboratorio nacional Richmond, luego de que Rusia aprobara las primeras muestras y enviara el principio activo para terminar la producción.
El último martes, durante una exposición en el Congreso, el director del laboratorio, Marcelo Figueiras, brindó precisiones sobre la cantidad de dosis que podrá venderle al gobierno argentino. “Vamos a empezar a producir 500.000 dosis por semana con una capacidad de 5 millones al mes”, señaló. Las primeras estarían antes de que termine el mes en curso.
Dos de las negociaciones más importantes que están abiertas son las que el Gobierno lleva adelante con Janssen, productora de la vacuna Johnson & Johnson y Moderna. Ambas de laboratorios de Estados Unidos. En la Casa Rosada sostienen que las negociaciones están “avanzadas” y que podrían definirse en un muy corto plazo. No hay un total de dosis definidas ni la fecha de posible entrega.
En tanto, las negociaciones con Pfizer están abiertas pero no avanzan demasiado. En el Gobierno dicen tener voluntad de cerrar un acuerdo pero las dos partes están paradas en la misma posición desde hace tiempo. La última semana Nicolás Vaquer, gerente general de Pfizer, informó en el Congreso que la compañía le había ofrecido al gobierno argentino un contrato por más de 13 millones de vacunas contra el coronavirus.
El paquete incluía un millón de dosis que iban a ser entregadas antes de que finalizara el 2020, otras dos millones que iban a ser enviadas en el primer trimestre del 2021, 5 millones en el segundo trimestre de 2021 y las restantes 6 millones en la segunda parte del año.
El directivo aseguró que el impedimento para cerrar el acuerdo se encuentra en que “el marco legal no es compatible con algunos de los mecanismos contractuales que pide Pfizer que tienen que ver con la indemnidad y otras cuestiones”.
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