El presidente del laboratorio Richmond, Marcelo Figueiras, fue el segundo expositor en la audiencia pública que se realiza en el Congreso de la Nación con los laboratorios para que los diputados nacionales presenten preguntas respecto de la producción, entrega y contratos de las vacunas contra el COVID-19.
El empresario local, que cerró un contrato con el laboratorio ruso Gamaleya y el Fondo de Inversión de ese país para producir localmente la vacuna Suptink V, comenzó su exposición haciendo alusión al apoyo del arco político y a la diferencia que significará para la economía la producción en el país del inoculante.
“Quedó demostrada la diferencia entre los países que producen y los que no producen las vacunas respecto al acceso. Los países que producen vacunas, vacunan; los que no, esperan. Y solo por este proyecto significa que dejaríamos de pagar 10 millones de dólares de derechos de exportación”, explicó.
Desde el Frente de Todos consultaron sobre la capacidad productiva del laboratorio y el ejecutivo adelantó: “Desde esta semana -ya que llega el componente- vamos a empezar a producir 500.000 dosis por semana con una capacidad de 5 millones al mes. Esto dependerá de que vaya llegando el componente, pero tenemos confianza de que se va a estabilizar la llegada”.
Consultado por el bloque de Juntos por el Cambio respecto a la relación con el gobierno nacional, Figueiras explicó que Richmond tiene un “contrato exclusivo con el laboratorio Gamaleya, del Fondo ruso, y con el laboratorio de la India”. Y advirtió: “No formamos parte del contrato con el Estado ruso. A nosotros se nos encarga la producción de la fase final y lo hacemos por cuenta y orden de ellos”.
Al referirse al lugar de producción, Figueiras contó que alquiló una planta que ya estaba habilitada para la producción de biológicos y que se le hizo una actualización para la producción de vacunas: “Vamos a tener una capacidad productiva de 500 millones de dosis pensando en 500.000 dosis semanales”, insistió.
Otra pregunta del bloque tenía que ver sobre si el Gobierno definió el laboratorio o fueron las empresas rusas. Al respecto, el empresario señaló: “Hubo una delegación del gobierno ruso que visitó varios laboratorios. No recibimos de parte del gobierno nacional ninguna indicación de que nosotros podíamos o no fabricar la vacuna”. Según Figueiras, fue la relación de Richmond con el laboratorio de la India Hetero.
Frente a la pregunta de cuándo podía llegar el componente 2, Figueiras destacó que la escala de producción de la India, del laboratorio Hetero, fue una “buena noticia” y que “en dos o tres semanas podría llegar el componente 2”. Y añadió: “La buena noticia es que el laboratorio Hetero escaló en la producción del componente 2 y ahora estamos hablando con el Fondo ruso y el Gamaleya para que el suministro del componente venga directo desde la India ya que tenemos una relación muy aceitada”.
Consultado por el diputado José Luis Ramón sobre si existía algún acuerdo de confidencialidad, Figueiras negó que eso exista. “Nosotros tenemos un acuerdo con Gamaleya, no con el Estado argentino”.
Para finalizar, desde la oposición reclamaron la presencia de la ministra de Salud, Carla Vizzotti, para la semana que viene y el presidente de la Cámara, Sergio Massa, hizo referencia al surgimiento de la iniciativa de parte del diputado Mario Negri y del diputado Máximo Kirchner: “Les quiero agradecer este primer paso. Lo hicimos con el respeto y la seriedad con la que se trabajó. La semana que viene vamos a repetir con otros dos actores-laboratorios”. Según se adelantó, será con el fondo Covax y con el laboratorio AstraZeneca.