El gobierno de la provincia de Buenos Aires ya está facultado para iniciar gestiones formales como subestado con distintos laboratorios para la dotación de vacunas contra el coronavirus. En la tarde de este jueves, el Senado bonaerense aprobó el proyecto de ley que faculta al jefe de Gabinete, Carlos Bianco y al ministro de Salud, Daniel Gollan, a “iniciar gestiones, negociaciones y celebrar los contratos -incluso en moneda extranjera- previo informe fundado de la autoridad sanitaria provincial, necesarios para la adquisición de vacunas destinadas a generar inmunidad adquirida contra la COVID-19”.
A la par, el jefe de Gabinete bonaerense aseguró ante la consulta de Infobae que desde la primera conversación con Rusia por la vacuna Spuntik V hasta la fecha han “entablado conversaciones con no menos de 20 laboratorios. Los únicos en los que se puede avanzar de manera razonable, entendiendo que somos funcionarios públicos y que tenemos responsabilidades penales por nuestros actos, son las negociaciones que uno encara con laboratorios oficiales y con las Naciones”. Actualmente esas negociaciones se enfocan en seis laboratorios, según el jefe de ministros provinciales.
“Andan pululando por todos lados intermediarios, en algunos casos más serios porque son empresas que distribuyen medicamentos y en otras oportunidades con lisa y llanamente mercachifles, que dicen tener vacunas, con precios exorbitantes”, sostuvo Bianco. El jefe de Gabinete también reconoció que “mantenemos conversaciones con seis laboratorios para trabajar en la obtención de vacunas y con algunos de esos laboratorios con la situación muy encaminada”.
Hasta el momento, hay cinco laboratorios con los que la provincia de Buenos Aires lleva adelante las negociaciones: Gamaleya (Rusia), CureVac (Alemania), Cansino (China), Moderna (Estados Unidos) y Johnson y Johnson (Bélgica). Sobre el sexto laboratorio, no hay mayores precisiones.
Las negociaciones de carácter formal deberán ser informadas a la comisión bicameral que sigue las acciones del Ejecutivo por la pandemia. Esa fue una de las cláusula que la oposición puso para acompañar el proyecto que se terminó de votar este jueves por unanimidad.
“Es importante no solo que tengamos el consenso suficiente para aprobar este proyecto sin que, en nuestra responsabilidad como dirigentes políticos territoriales, más allá de las pertenencias políticas e incluso de la etapa electoral, tengamos la seriedad y prudencia necesarias para que en todo lo que tenga que ver con los avances en el plan de vacunación y con el manejo de la pandemia evitemos las criticas tribuneras”, remarcó el senador provincial del FdT, Franciso ‘Paco’ Durañona durante el debate.
La oposición acompañó la iniciativa. Como contó Infobae, desde Juntos por el Cambio sostenían que la cláusula de confidencialidad en realidad es exigida por los laboratorios, pero lo que se logró es que la Comisión Bicameral de seguimiento de la Emergencia pueda, votando por mayoría, exigir al Ejecutivo que abra las cláusulas de confidencialidad en caso de necesitarlo, haciéndose cargo de la responsabilidad emergente de la violación a la confidencialidad.
Entre los cambios, la oposición también logró que el Ejecutivo debe informar sobre la entrega y distribución territorial de las vacunas “destinadas a generar inmunidad adquirida contra la COVID-19″. Este fue un pedido de los intendentes opositores, ya que la logística y ejecución de la vacunación corre por parte de la provincia, una situación que ha despertado ciertas críticas de parte de los intendentes de Juntos por el Cambio.
En el medio de la sesión se metió el tema de Matías Almeyda, que había declarado haber conseguido 20 mil vacunas para el municipio de Azul. La senadora azuleña Lucrecia Egger, de Juntos por el Cambio explicó que “no quisimos generar polémica, se quiso cooperar para que ingresen más vacunas a nuestra Provincia”, y admitió que no hubo un contacto con el Ejecutivo.
Mientras que el senador Juan Pablo Allan también de Juntos por el Cambio advirtió que se llegó tarde a “muchas negociaciones” y que “alguna vez vez sabremos qué pasó con Pfizer”. Sin embargo siguió la postura de su bloque al remarcar que “hoy necesitamos reforzar esto”; es decir la adquisición de dosis.
En el gobierno bonaerense remarcaron que las negociaciones encaminadas están acordadas con el gobierno nacional y que las dosis que puedan llegar a conseguir los propios negociadores provinciales -si cierra algún acuerdo- serán puestas a disposición de la Nación para que las autoridades sanitarias realicen la distribución correspondiente.
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