El diputado nacional por el PTS-FIT Nicolás del Caño confirmó que no va a acompañar ni dará quórum al proyecto de ley del kirchnerismo que busca reformar el Ministerio Público Fiscal. De esta manera, se cayó una de las últimas esperanzas que tenía el oficialismo para sumar adhesiones a la iniciativa.
A través de una serie de mensajes que publicó en su cuenta oficial en Twitter, Del Caño se manifestó en contra del proyecto del kirchnerismo para colonizar el Ministerio Público Fiscal y aseguró: “Implica un mayor control del gobierno de turno sobre la Justicia”.
“El macrismo impulsó un proyecto casi idéntico en 2017. Vamos a rechazarlo como lo hicimos en su momento y no aportaremos al quórum”, adelantó, mientras el kirchnerismo debate en un plenario de comisiones de Diputados la modificación de la ley Ministerio Público Fiscal.
Según sus declaraciones, el proyecto, que cambia la forma de designación y remoción del Procurador General de la Nación, “empeora aún más” el sistema actual ya que, en caso de aprobarse, “la Justicia se acomoda al poder de turno”.
“Siempre hemos hablado de lawfare, así como la persecución a la izquierda y a dirigentes obreros y populares procesados por jueces que tienen el aval de los diferentes gobiernos que criminalizan la protesta. También rechazamos en total soledad la Ley del Arrepentido en 2016″, recordó.
En ese sentido, concluyó con el planteo de la izquierda: “Que la elección del procurador, jueces y fiscales se realice a través del sufragio universal y que perciban el salario de un docente. Basta de privilegios. Ese es el ‘consenso’ que defendemos, y no el de la rosca bipartidista”.
El oficialismo cuenta con 118 legisladores, a los que le suma cinco de los seis del Interbloque Unidad Federal para el Desarrollo, que conduce el mendocino José Luis Ramón. Este bloque aporta a Ramón, Pablo Ansaloni, Flavia Morales, Diego Sartori y Ricardo Wellbach. El único que no se suma es el rionegrino Luis Di Giacomo que, al igual que el senador Alberto Weretilneck de la misma provincia, están enfrentados en el “pago chico” con el actual ministro de Justicia y Derechos Humanos, Martín Soria.
En este escenario, el Frente de Todos se encuentra lejos de alcanzar el número necesario para poder aprobar el proyecto de ley que ya cuenta con media sanción del Senado, y el “poroteo” para poder alcanzar las voluntades necesarias se torna cada vez más complejo. Por ese motivo, cada voto cuenta. Y mucho. Una de las grandes dudas giraba en torno a la postura de Del Caño. Tras sus declaraciones, las esperanzas del kirchnerismo se esfuman.
Asimismo, un grupo de personas llevaban a cabo esta noche un cacerolazo frente al Congreso contra el proyecto de reforma del Ministerio Público Fiscal. Con cacerolas, silbatos, aplausos, bocinazos y pancartas contra la vicepresidenta, Cristina Kirchner, los manifestantes expresaron su malestar para con el proyecto.
La reforma de la ley del Ministerio Público Fiscal fue aprobada por el Senado en noviembre del año pasado y estuvo en la lista inicial de temas para las sesiones extraordinarias pero las diferencias dentro del propio oficialismo hicieron que recién esta semana pueda tener despacho de comisión.
La nueva ley modifica el procedimiento de designación del Procurador, reemplazando la mayoría de dos tercios de los miembros presentes por el de “mayoría absoluta de sus miembros”. Así, ya no sería necesario el consenso calificado entre las fuerzas políticas.
El candidato propuesto por el presidente Alberto Fernández, Daniel Rafecas, reiteró ayer que esa modificación es un límite para seguir en carrera. “Si a mitad del proceso para mi designación, se reduce por ley la mayoría necesaria en el Senado para nombrar al Procurador, eso será para mí un limite ético insuperable, que me hará imposible seguir adelante con la postulación. Respeto otras posturas, pero esta es mi convicción, ética y jurídica”, posteó en su cuenta de Instagram.
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