Intendentes e intendentas de la Tercera sección electoral que integran el Frente de Todos mantuvieron un encuentro para apuntalar un plan en común en medio de la tensión del sistema sanitario, producto del sostenimiento de casos de coronavirus. Acordaron pedir medidas más severas para limitar la circulación en los distritos y le enviaron un mensaje al jefe de Gobierno porteño, Horacio Rodríguez Larreta, para que, esta vez, las decisiones entre la Nación, CABA y PBA sean iguales. Esto se traduce en dejar de lado la presencialidad escolar en el ámbito de la CABA.
“Tenemos que sostener y extender las medidas preventivas para que no colapse el sistema sanitario y así evitar más contagios y muertes”, advirtió el intendente de Lomas de Zamora, Martín Insaurralde, uno de los que más escucha el gobernador bonaerense Axel Kicillof e impulsor de estas puestas en común virtuales. De igual forma opinó Mayra Mendoza de Quilmes: “Las últimas restricciones implementadas fueron las correctas porque impidieron una mayor suba de contagios, pero tenemos que sostener y extender las medidas de prevención para que no colapse el sistema de salud y evitar más contagios y muertes”.
En el encuentro participaron, además de Insaurralde y Mayra Mendoza, Mariano Cascallares (Almirante Brown), Fernando Espinoza (La Matanza), Marisa Fassi (Cañuelas), Alejo Chornobroff (Avellaneda), Mario Secco (Ensenada), Nicolás Mantegazza (San Vicente), Andrés Watson (Florencio Varela), Fabian Cagliardi (Berisso), Hernán Y Zurieta (Punta Indio). De allí salió un documento contundente. “Apelamos a que la CABA y los municipios gobernados por Cambiemos cumplan con las restricciones porque es un riesgo para todo el AMBA”, sintetizó la conclusión final.
En el tramo político, el problema que notan los intendentes del peronismo es la falta de acuerdo que hubo con la Ciudad en cuanto a medidas a tomar, ya que el AMBA -repiten- es un mismo conglomerado.
En el plano sanitario la situación es más delicada. Como describió Infobae, en el Conurbano el traslado de los pacientes puede demorar entre 10 y 15 horas porque no hay camas. El consumo de oxígeno en las unidades de cuidados intensivos aumentó en un 300% y, si bien es un termómetro dinámico, la ocupación de camas de terapia en el sector público y privado supera el 75% en todo el AMBA, algunos municipios con más margen que otros.
Las últimas mediciones que maneja el gobierno provincial -y a las que accedió Infobae- en cuanto a la ocupación de camas ubica a municipios como Berazategui, Berisso, Ezeiza o Lanús con ocupación por encima del 80%. Al día de hoy en Berisso, por ejemplo, quedaban cinco camas libres de terapia.
La reunión virtual que tuvieron algunos intendentes de la Tercera sección electoral es un mecanismo que vienen adoptando siempre en los días previos a la toma de nuevas decisiones que tiene que definir el gobierno nacional. También se habían reunido días antes de la resolución del 14 de abril pasado cuando el presidente Alberto Fernández dispuso, entre las restricciones que adoptó, suspender la presencialidad escolar.
Los mismos intendentes que esta semana pidieron mayores restricciones y le enviaron un mensaje a Larreta habían pedido, antes de que lo dispusiera la Nación, la suspensión de la presencialidad escolar. Se lo habían dicho a Kicillof.
Según le deslizaron a Infobae desde el sector de intendentes, el gobernador bonaerense ya está en tema. Este jueves, el mandatario provincial irá a Quilmes para participar de una actividad en la tradicional cervecería. Allí se cruzará con algunos jefes comunales de zona Sur, como hizo este miércoles cuando recorrió junto a Cascallares las nuevas instalaciones en el Hospital Dr. Oñativia.
Hay otros distritos del Conurbano que esperan decisiones aunque buscan encontrar un margen para que la presencialidad escolar funcione. Son los municipios que hoy gobierna el PRO en la zona AMBA: Lanús con Néstor Grindetti, Tres de Febrero con Diego Valenzuela y Vicente López con Jorge Macri; además de Gustavo Posse, de San Isidro.
Lanús tiene la particularidad de que se encuentra “rodeado” de municipios que hoy gobierna el Frente de Todos. El diálogo entre su intendente, Grindetti, y el resto de los jefes comunales está enfriado por diversos motivos.
La relación oficialismo-oposición en el Conurbano fue mutando de manera espejada a lo que sucedió con el tridente que armaron el gobierno nacional, provincial y porteño. Es decir: al inicio de la pandemia hubo acciones en conjunto e intercambio de información. Hoy dista bastante de lo que fueron aquellos días.
La intención es poder consensuar medidas, pero las propuestas son diferentes. Mientras La Matanza, Lomas o Almirante Brown piden mayores restricciones, en Lanús sostienen que las escuelas pueden volver abrir sus puertas si se organiza un esquema especial donde los últimos años continúen en modo virtual y la presencialidad sea en grados escalonados y a través de corredores sanitarios. Va en línea con el plan que imagina el Gobierno de la Ciudad si los casos siguen en alza y hay que limitar más actividades. Otros intendentes opositores como Jorge Macri fueron más allá e imitaron el camino de Larreta de ir a la Justicia para sostener la presencialidad.
La situación es compleja en el Conurbano. Por ejemplo, en Quilmes se reactivó un centro de aislamiento que había funcionado durante la primera ola en la Universidad Nacional de Quilmes (UNQUi). Es el municipio de la Región Sanitaria VI donde más dosis se aplicaron de la vacuna contra el coronavirus: 94.787.
Por su parte, el Ejecutivo provincial aguarda definiciones del gobierno nacional. Este martes el jefe de Gabinete bonaerense Carlos Bianco encaró el acercamiento de parte de la administración bonaerense cuando se sentó en la mesa con su par porteño, Felipe Miguel, en una reunión convocada por el jefe de ministros nacionales, Santiago Cafiero. De la reunión no salió nada en concreto: que seguirán monitoreando la situación y que volverán a juntarse este jueves. “Ojalá podamos tomar decisiones en conjunto”, decía Bianco antes y después de la reunión del deshielo. Los intendentes peronistas empujan mayores restricciones con un mensaje direccionado hacia el otro lado del Riachuelo y la avenida General Paz.
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