Las declaraciones del presidente Alberto Fernández sobre el aprendizaje de los “chicos con capacidades diferentes” en las escuelas generó el rechazo de varias organizaciones y expertos vinculados al tema, los cuales señalaron que, en primer lugar, el término correcto para referirse a estos alumnos es “personas discapacitadas”.
En este misma línea se expresó más tarde la escritora Cintia Fritz, quien comparte a diario en las redes su experiencia como mamá de Lautaro, de siete años, desde que fue diagnosticado con TEA (Trastornos del Espectro Autista). Consideró que el mandatario nacional colaboró “inmensamente con la exclusión, la discriminación, la ignorancia y la mitología que alimenta permanentemente la ‘realidad’” de estos alumnos.
Al respecto de esos dichos, la mujer se manifestó de forma irónica al opinar que con la frase que eligió, el jefe de Estado se debía estar refiriendo a “los chicos que pueden volar o algo así”, y recordó que este grupo “no tuvo clases presenciales el año pasado”, excepto por “las dos primeras semanas de marzo”, ya que “las escuelas y los CETs (Centro Educativo Terapéutico) donde asisten muchos de ellos, estuvieron cerrados y comenzaron a abrir sus puertas algunos recién el mes pasado”.
“Trabajar con chicos que vuelan es más complejo en ciertos aspectos porque, por ejemplo, si estamos hablando de discapacidad mental, tal vez no puedan entender ciertos conceptos como ‘pandemia’, ‘riesgo país’ o ‘la teoría de la relatividad’”, escribió Fritz en un hilo en su cuenta de Twitter.
La escritora utilizó las redes sociales para hablarle directamente al Presidente, a quien le remarcó “que todas las personas aprendemos de maneras diferentes” y que, en el caso de los niños con discapacidad, “el aprendizaje muchas veces se da de manera natural por imitación, juego, reglas, explicaciones sencillas”.
De esta manera, criticó las declaraciones que hizo Alberto Fernández cuando, durante una entrevista con Radio 10, justificó la decisión del Gobierno de volver a cerrar las escuelas al señalar que ha “hablado con maestras de escuela de chicos con capacidades diferentes, de lo difícil que se les hace trabajar con esos chicos, que no entienden la dimensión del problema sanitario que enfrentan”.
“Mi hijo no entiende ni siquiera qué significa cumplir años. Pero sí fue bastante sencillo lograr que se acostumbre al uso del barbijo y cada vez que alguien se pone alcohol en gel, él también quiere ponerse. Y eso que es tan diferente que ni habla. Imagínese”, respondió la autora del libro “La aventura diferente” y madre de Lautaro.
Además, la escritora destacó que “cuando este año pudieron abrir las escuelas y los CET’s, todos o casi todos los protocolos se armaron con una minuciosidad” y con un “sentido de la responsabilidad” que le “gustaría ver en otros ámbitos”.
“Me alarma que ninguna de las personas que lo rodea y tiene la función de asesorarlo no le haya explicado que nada de lo que dijo colaboró con la construcción social de la inclusión, la comprensión e integración de la diversidad y la realidad de la discapacidad”, agregó.
En esta línea, Fritz volvió a ser sarcástica al señalar que “si fueron los chicos con ‘capacidades diferentes’ quienes desataron esta masacre que estamos viviendo (por el aumento de los contagios), después de estar un año encerrados y sufriendo retrocesos en cada cosa que habían logrado superar”, entonces podría creer “que tienen superpoderes”.
“Usted le acaba de decir a todo el país que la discapacidad es una capacidad diferente. Que con ‘esos chicos’ no se puede, y permítame una confesión: hasta parece insinuar que fueran personas a las que no hay nada que los haga entender ciertas cosas”, cuestionó.
Por último, la mujer le propuso al jefe de Estado una reunión para conversar sobre este tema, porque “los padres de chicos con discapacidad” pueden “contarle sobre quiénes son” sus hijos y “tal vez hasta se asombre” al conocer sus historias.
“Presidente, acaba de colaborar inmensamente con la exclusión, la discriminación, la ignorancia y la mitología que alimenta permanentemente la ‘realidad’ de la discapacidad. Si, Alberto Fernández, nos debemos una charla. Baje al barro. Haga que su entorno también baje al barro. Hay cosas que solo se aprenden cuando uno tiene la dignidad y la grandeza de bancarse estar con el barro hasta la pera”, cerró.
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