Un informe preliminar de los peritos de la Superintendencia de Bomberos y División Siniestros de la Policía Federal Argentina, descartó la presencia de material combustible y acelerantes en los dos sectores donde comenzó el incendio de Chubut y abona la teoría de que el siniestro habría tenido su origen en una falla del tendido eléctrico.
De esta forma, y a pesar de que los especialistas todavía trabajan en el lugar, pierde fuerza la hipótesis de que las llamas fueron originadas de forma intencional.
“No se detectaron materiales hidrocarburos ni acelerantes”, menciona el primer borrador de los peritos, al tiempo que alimenta la versión de que el fuego podría haber tenido su origen en un desperfecto eléctrico.
Los expertos continúan relevando el terreno y se cree que seguirán trabajando durante los próximos días aunque la primera conclusión a la que arribaron es que no hay elementos compatibles para sospechar que el incendio comenzó de manera intencionada.
El cuerpo de bomberos de la Policía Federal Argentina arribó el sábado pasado a la zona norte de la provincia de Chubut y desde este perita la zona afectada por los incendios, que dejaron como saldo dos personas fallecidas, cuantiosos daños en viviendas y en recursos naturales.
La causa es investigada por el fiscal Carlos Díaz Meyer, quien solicitó al Ministerio de Seguridad de la Nación el despliegue de los especialistas, quienes tienen experiencia en relevamientos luego de siniestros ígneos de grandes dimensiones.
Las causas del incendio generaron múltiples expresiones públicas que abonan distintas teorías sobre su origen aunque la pesquisa inicial de la fuerza federal respalda el informe de los peritos de la Policía de Chubut, quienes pocas horas más tarde del siniestro relevaron el terreno.
El ministro de Ambiente y Desarrollo Sustentable, Juan Cabandié, fue el primero en arriesgar que los incendios del sur “fueron intencionales” y radicó una denuncia penal en el Juzgado de Esquel.
Luego moderó su discurso y relativizó la intencionalidad. “Llama la atención que el fuego comenzó de forma simultánea en seis puntos distintos, pero es misión de la Justicia determinar cómo fue el inicio”, dijo.
El informe preliminar de la Policía Federal Argentina respalda el trabajo de la fuerza provincial y señala que existieron al menos dos puntos de origen de los incendios que afectaron la Comarca Andina y siguen la línea del tendido eléctrico. “Mismo origen, mismas condiciones climáticas”, resumieron fuentes vinculadas a la causa.
Los especialistas cuentan con el aporte de Rocco, un ovejero belga malinois especialista en rastrear sustancias acelerantes de la combustión aunque durante los tres días de búsqueda, no indicó rastros.
El mismo can fue utilizado para realizar peritajes en Villa Mascardi, a 35 kilómetros de Bariloche, donde detectó la presencia de combustible en uno de los edificios incendiados. Su desempeño fue solicitado por la fiscalía federal del Juzgado de Bariloche, en el marco de la causa para determinar la responsabilidad de la comunidad mapuche Winkul Lafken Mapu en los incendios intencionales de varios edificios públicos y privados del lugar.
El documento que elaboró la policía provincial menciona que las llamas tuvieron una dinámica de “tormenta de fuego” y que se iniciaron en dos puntos próximos a la línea del tendido eléctrico, lo que pudo producirse por la caída de algún árbol sobre el cableado.
Los bomberos provinciales, al igual que los de la Policía Federal Argentina, no tienen dudas que “los puntos de origen fueron claramente dos” y mencionan también el factor climático, con ráfagas de hasta 100 kilómetros por hora que contribuyeron a la dispersión de las llamas.
Las piñas (o piñones) que son las semillas de los pinos fueron claves también en la irradiación del fuego porque se esparcían encendidas provocando cientos de focos secundarios, o las mismas chispas que superaron con facilidad el ancho de la ruta 40 incendiando a uno y otro lado de la cinta asfáltica, agregaron.
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