Las luces de alarma se prendieron en el Gobierno porteño el martes por la mañana cuando en las redes sociales comenzaron a circular imágenes y videos de adultos mayores haciendo largas filas al sol y sin distanciamiento a la espera de recibir la vacuna contra el COVID-19. A las pocas horas, la noticia había llegado a los medios nacionales y los principales funcionarios de la Ciudad buscaban la forma de reorganizar el operativo a contrarreloj para evitar que la situación escale.
Ese mismo día a la mañana, Horacia Rodríguez Larreta suspendió su visita al vacunatorio montado en el Luna Park para tomar distancia del escándalo. Por la tarde, el ministro de Salud, Fernán Quirós, pidió disculpas por los inconvenientes y adelantó que los turnos serían reasignados para evitar aglomeraciones. Al día siguiente se sumaron cinco centros más de vacunación. Además del Luna Park, La Rural y la sede de San Lorenzo, fueron habilitados el Club Italiano, Ferro, Oscoema, La Boca y el Centro Islámico.
Al término de la semana, tanto en el Ejecutivo como en la cartera de Salud porteña respiraron aliviados ya que los problemas de organización no se repitieron y los adultos mayores con turnos asignados -como Mirtha Legrand- fueron vacunados sin mayores complicaciones.
“El flujo de vacunación funcionó bien, porque todos los que tenían turnos se vacunaron dentro del horario previsto, no es que lo tuvimos que extender hasta las diez de la noche”, explicaron a Infobae. No obstante, admitieron que el error fue no prever que muchos adultos mayores suelen llegar antes a los turnos y con más de un acompañante. “En estas ´superpostas´ se dan 180 turnos por hora, si llegan una hora antes con acompañantes terminás con 300 personas en la puerta”, lamentaron, y agregaron que igualmente sirvió como “aprendizaje”.
En la mesa chica del jefe de Gobierno el episodio del martes se vivió con “frustración”, ya que entienden que opacó un proceso de vacunación que hasta ese día había avanzado sin sobresaltos. Sin embargo, estiman que justamente por eso el oficialismo porteño no pagará demasiado “costo político”.
“Es difícil saber qué piensa la gente, pero ya habíamos vacunado a 160 mil personas sin problemas y al día siguiente se resolvieron las fallas de organización. Los porteños también tienen una buena percepción de cómo venía la vacunación antes y cómo siguió después de ese día”, explicaron a Infobae.
En el plano político el primer día de caos alcanzó para que llovieran críticas desde la oposición. Desde el gobierno nacional se encargaron de difundir que la ministra de Salud, Carla Vizzotti, se había comunicado con Quirós para ponerse a disposición y colaborar con la logística del operativo. Mientras, en un tono mucho más confrontativo, la titular del PAMI Luana Volnovich, cuestionó la “falta de empatía” de las autoridades de la Ciudad y reveló que algunos días antes habían rechazado un ofrecimiento de lugares de vacunación. En esa línea, los legisladores del Frente de Todos incluso intentaron -sin tener votos suficientes- interpelar al ministro de Salud.
“Escuchamos todas las críticas, pero Fernán no pierde ni un minuto en la política”, aseguraron a Infobae desde la cartera sanitaria. Por su parte, en la sede de Uspallata tampoco culparon a todo el gobierno nacional. Según su visión, se trató de “algunos dirigentes que son mezquinos y buscaron rédito político”. También se quejaron que a veces “dicen cosas que ni siquiera se ajustan a la realidad”.
Fiel a su estrategia política y discursiva, el Gobierno porteño eligió no salir al “palo por palo” contra el kirchnerismo. Optó por reconocer el error a través de los medios -el encargado de poner la cara fue el mismo Quirós- y buscó dejar atrás el fiasco lo más rápido posible.
De hecho, ya se preparan para la próxima semana, según lo previsto se avanzará con la etapa final del personal de salud y se terminará con el remanente de los 16 mil turnos asignados a docentes. En cuanto a los mayores de 80, se habilitarán nuevos turnos a los empadronados cuando el gobierno nacional entregue un nuevo lote de vacunas Sputnik V.
Hasta el momento, no han recibido precisiones sobre el embarque de 3 millones de vacunas de Sinopharm que el oficialismo nacional anunció que llegarán la semana que viene. La Ciudad tiene capacidad para vacunar a 25 mil personas por día. Pero ese flujo debe ser ajustado en base a la disponibilidad de nuevas dosis.
La vacunación a los docentes continuará en las sedes del Club Racing de Villa del Parque, Usina del Arte y el Centro Cultural Recoleta.
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