El gobernador bonaerense, Axel Kicillof, volvió a defender este sábado la campaña de inmunización contra el coronavirus en Buenos Aires, destacó que están por alcanzar el medio millón de dosis aplicadas y explicó las razones por las que fueron inmunizados los trabajadores de un centro de telemedicina.
“No nos van a distraer. No nos van a detener. Vamos a seguir consiguiendo vacunas contra el Covid. Y vamos a vacunar a todas las y los bonaerenses que así lo deseen”, sostuvo Kicillof en su cuenta de la red social Twitter.
En un hilo de tuits, el mandatario bonaerense apuntó a los sectores de la oposición que “primero, atacaron los cuidados como si fueran un atentado a las libertades. Después, llamaron ‘veneno’ a la vacuna. Ahora, apuntan contra el proceso de vacunación, cuando la Provincia está llegando al primer medio millón de vacunados”.
En ese contexto, defendió el plan de vacunación oficial al sostener que se trata de un proceso “transparente” que “respetó las prioridades, como estaba establecido por el Plan desde el comienzo”.
Y agregó: “Así como me inventaron un primo vacunado que no tengo para ensuciarme, ahora agitan el fantasma de la vacunación de militantes y quieren hacer pasar un centro de atención para pacientes Covid por una unidad básica. Siguen tratando de sembrar odio y desconfianza”.
Además, remarcó: “Cumpliendo la normativa impartida por el Ministerio de Salud de la Nación, comenzamos por vacunar a todos los trabajadores del sistema de salud, íntegramente. El objetivo es tener protegido del Covid a todo el sistema de salud ante la posibilidad de una segunda ola. Se trata de cuidar a quienes nos cuidan”.
“Desde los médicos y enfermeros de terapia hasta los administrativos que distribuyen los insumos, pasando por personal de limpieza y profesionales que trabajan en su domicilio. La disposición era clara: todos”, detalló.
Luego sostuvo que “esto incluyó, dentro de los parámetros indicados, a quienes desde el principio de la pandemia hicieron el seguimiento de los casos y respondieron los llamados. Si los trabajadores de los centros de telemedicina Covid-19 (CETECS) se contagian, perdemos una herramienta fundamental”.
En la misma línea, el ministro de Salud bonaerense, Daniel Gollán, también criticó a la oposición y a un sector del periodismo. “Primero que la cuarentena no servía, después que la vacuna era veneno. Ahora la nueva es que no hay que vacunar a los pibes y pibas que sostienen la campaña de vacunación y los centros de telemedicina. Periodismo basura y oposición irresponsable, dos modelos que hacen daño”, publicó en las redes sociales.
El escándalo de las vacunas VIP, que terminó con la renuncia de Ginés González García, también salpicó a la administración bonaerense. En San Nicolás, al norte de la provincia de Buenos Aires, también funcionó un vacunatorio paralelo bajo el mando de La Cámpora en el Hospital San Felipe.
Cabe destacar que de esa ciudad son oriundos el ex ministro de Salud y su sobrino, Lisandro Bonelli. Infobae reveló que varios de los amigos de Bonelli de San Nicolás se habían vacunado. Se trata de Martín Sabignoso, que estaba a cargo de la Secretaría de Equidad del Ministerio; Facundo Dinoto y Marcelo Guille, una suerte de secretario privado todoterreno del ex ministro. En San Nicolás se los conoce como el “Grupo Regatas” porque frecuentaban el club que lleva ese nombre.
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