Este miércoles, la Justicia requirió que se investigue la denuncia presentada contra el jefe de Gobierno porteño, Horacio Rodríguez Larreta, y su ministro de Salud, Fernán Quirós, por la presunta firma de convenios para entregar vacunas a algunas obras sociales y empresas de medicina prepagas. En ese contexto, Diego Santilli les contestó a quienes acusan al Gobierno porteño de privatizar la vacunación: “Dejen de politizar y pónganse a trabajar”.
“Es indignante la politización y es insostenible este nivel de mentiras y que jueguen con la escasez de un bien tan necesario como la vacuna”, sostuvo el vicejefe de Gobierno esta tarde, en declaraciones ante la prensa.
Asimismo, sostuvo que frente a un extenso padrón de mayores de 80 años a los que hay que inmunizar, el sector público y el privado están uniendo esfuerzos para vacunarlos a todos lo antes posible. “La Ciudad de Buenos Aires hace décadas que vacuna de la misma manera: a través de sus centros de vacunación más las obras sociales, para llegar de forma equitativa y más rápidamente a la gente”, explicó al respecto.
Ayer, el fiscal federal Carlos Stornelli impulsó la investigación judicial para determinar si se cometieron irregularidades en el reparto de las vacunas contra el coronavirus por parte de las autoridades de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires. La denuncia había sido presentada por la abogada Natalia Salvo, quien apuntó contra Quirós por haber presuntamente beneficiado a instituciones de salud privadas y a sus socios por encima de la población. “Hay un desprecio de la legalidad en el Gobierno de la Ciudad”, aseguró la letrada. A su vez, el gobernador bonaerense, Axel Kicillof, hizo mención a esta situación durante una conferencia de prensa: “No hay vacunatorios ocultos ni privatizados en la provincia”, afirmó.
“No tenemos ningún problema con ninguna denuncia. Si algún ciudadano tiene alguna duda, aquí estamos para mostrar y explicar lo que hacemos e hicimos y para transparentar los datos. Lo más importante es explicarle a la gente”, se defendió el ministro de Salud porteño durante el reporte epidemiológico semanal.
En tanto, el juez Ariel Lijo ordenó un procedimiento que llevó a cabo la Gendarmería en el ministerio de Salud porteño, para obtener la documentación sobre el modo en que se repartieron las vacunas que fueron recibidas por la Ciudad. En esa dirección, Stornelli solicitó información sobre los listados de todos los lotes de vacunas que la cartera sanitaria envió para que se apliquen. También pidió la nómina de todos los centros de vacunación a los que se enviaron los lotes de vacunas y un detalle preciso de cada una de las dosis suministradas en cada vacunatorio. Otro de los allanamientos se realizó en la sede de la Asociación Civil denunciada como vacunatorio.
Con respecto a la campaña de vacunación, el lunes pasado la Ciudad de Buenos Aires comenzó la segunda etapa, destinada a mayores de 80 años. Hasta este miércoles, 12.659 personas ya habían recibido la primera dosis de la vacuna Covishield contra el COVID 19.
El operativo de vacunación, que permite atender 5 mil turnos por día, se realiza en 29 centros públicos que funcionan de lunes a viernes de 8 a 17 con un equipo de más de 2 mil personas. Todos esos sitios fueron especialmente acondicionados y están distribuidos a lo largo del territorio porteño en clubes, edificios de gobierno y centros culturales, mientras que también hay otros 7 lugares de vacunación en centros privados.
Complementariamente, también recibieron la vacuna 978 residentes de geriátricos. Para este caso, se están desplegando 8 unidades móviles que llevan adelante la tarea en cada institución. Los equipos están conformados por 3 vacunadores, 2 registradores, un responsable de frío, y una persona de seguridad.
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