La titular de Madres de Plaza de Mayo, Hebe de Bonafini, arremetió contra los supermercados luego de que se viralizaran en las redes sociales una serie de imágenes de la carne “a precios populares” y su mala calidad.
“Nosotros tenemos que aprender a suplantar la carne, con algunas cosas, no te digo todos los días. Tenemos que aprender a comprar. Ahora empecé a ver las diferencias de los precios. Tenemos que aprender a caminar, hay que buscar precios. Hay muchas cooperativas que venden de todo baratísimo”, dijo en la marcha de los jueves, la cual encabeza de manera virtual.
“Conseguí la bolsa de yerba para hacer mate cocido a $30 el kilo, de muy buena calidad. La gente la compra para tomar mates, está bien, tenés que comprar una bolsa de 10 kilos pero te imaginás lo que te ahorrás. La comprás entre dos o tres y la dividís”, sostuvo. Luego indicó: “Me pareció muy bueno lo que dijo el ministro de Economía (Martín Guzmán), que para los sueldos no puede haber techo. Que los sueldos tienen que ser mejores que los aumentos de las mercaderías. Los supermercados son siempre los que ganan. Con esto de la carne y toda esta historia...”.
En su discurso, de Bonafini remarcó: “Tenemos que aprender a comprar, a suplantar. La lenteja, la quinoa, los garbanzos, tienen muchísimas vitaminas y muchísimos proteínas. Está bien tenemos que cocinar más que la carne, más que el churrasco y el asadito de vez en cuando nos gusta, no digo que no. Pero no estemos centrados en comprar carne y vivir de la carne”.
Y recordó: “Piensen que los chinos, los coreanos y los vietnamitas vivieron la guerra comienzo arroz. Nosotros tenemos que aprender a comprar para ayudar. Así ayudamos al Gobierno a que se de cuenta de que el supermercado es una estafa. Que la carne la tendrían que vender todos, los carniceros y los supermercados”.
Allí aprovechó para enfatizar su crítica hacia los supermercadistas: “¿Cuántas veces el almanecero o el carnicero de barrio te da una mano? Los supermercados siempre los ponen altísimos. No compremos la fruta que no es de estación. Cuando una cosa es cara decir ‘no la compro, ya se van a encargar de rebajarla’. Si todos decimos que a ese precio no la vamos a comprar, las manzanas se la van a tener que comer ellos”.
“Compremos duraznos que están más baratos, compremos bananas. Pero que no se nos ocurra comprar manzanas rojas porque no se pueden pagar esos precios. No estoy diciendo nada del otro mundo, estoy hablando como una ama de casa que he sido toda la vida que he ahorrado mucho para vivir un poco mejor. No nos empeñemos en comprar carne. Si hay pueblos que se han alimentado a eso -arroz, garbanzos, cus cus y lentejas-, ¿por qué nosotros tenemos que comer todo el día carne? Los únicos que se llenan de oro son los supermercados. Peleemos y luchemos para que pongan mercados como el central en la Capital Federal”, dijo la referente de derechos humanos.
Y completó: “Inventemos otras cosas y pidamos que haya de esas cosas. Yo hace años que no voy a un supermercado, y no voy a ir. Hay que hacerles boicot. Les tengo bronca porque hay muchas cosas que pasan y la gente no lo sabe”.
Previo a analizar el plan del gobierno nacional, que comenzó el miércoles pasado con rebajas en diversos cortes de carne que superaron el 30%, De Bonafini también criticó la decisión de la ciudad de Buenos Aires sobre el retorno a las clases presenciales: “Las escuelas no tienen vidrio, no tienen los baños arreglados, no hay transporte escolar. El protocolo es todo mentira. No hay vacunas para la gente de la Capital. No hay dónde anotarse. Estas cosas son muy graves. La gente llama desesperada y dice ‘¿dónde me anoto?’. No hay. Primero no querían la vacuna, ahora la quieren pero no llega. Pónganse de acuerdo”.
“Ahora van a hacer una marcha contra la vacuna. Si no se quieren vacunar que no se vacunen. Y si se enferman y se mueren, que se mueran. Pero que no nos metan a nosotros en ese baile. Que no hagan propaganda contra la vacuna. Esta vacuna tiene el 91% de efectividad, es la mejor vacuna que hay. Los rusos hicieron la mejor vacuna”, agregó.
Y concluyó: “El martes me vacuno, hace falta que nos vacunemos por nosotros y por los otros, para volver lentamente al país que teníamos antes, a la familia, a abrazar, a matear, a las cosas más chiquitas. Eso nos da vida”.
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