Una comunidad mapuche cortó la circulación de vehículos en la Ruta Nacional 40, entre El Bolsón y Bariloche, y en cuanto intervinieron las fuerzas de seguridad los atacaron con palos y gomeras.
El corte se ubicó a 95 kilómetros de Bariloche y a 25 de El Bolsón, en un sector denominado paraje El Foyel, donde la comunidad mapuche Las Huaytekas ocupa una porción de territorio desde noviembre de 2010.
La medida comenzó a las 10 de la mañana con la interrupción total del tránsito en esa ruta nacional, aunque luego flexibilizaron la manifestación y permitieron el paso de vehículos de manera intermitente.
El arribo de efectivos de la Policía de Río Negro y del Escuadrón 35º de Gendarmería Nacional desarticuló el corte aunque se produjeron incidentes cuando integrantes de esa comunidad mapuche atacaron con piedras, arrojadas con gomeras, y palos a los efectivos policiales, sin provocar daños ni heridos.
Luego el grupo ingresó al predio donde mantiene el asentamiento y los uniformados de ambas fuerzas se encargaron de despejar la ruta de las piedras, montículos de residuos forestales en llamas y palos que habían dejado los encapuchados.
La permanencia de la comunidad en ese lugar fue avalada en 2015 por la Corte Suprema de Justicia de la Nación, que en su fallo fijó conceptos establecidos en la Ley Nacional 26.160 relacionada a la posesión de tierras de las comunidades mapuches.
El objetivo del corte de ruta era plantear más de 10 puntos en los que la comunidad no está conforme, la mayoría de ellos criticando las explotaciones forestales de la zona cordillerana y los daños al medioambiente.
“Basta de dañar a nuestra madre tierra”, menciona el panfleto que era entregado a los conductores mientras estaban retenidos en el corte. “Los mapuches repudiamos todo tipo de extractivismos y decimos no a la forestación de especies exóticas, como los pinos, que ponen en peligro a la flora nativa y a toda naciente de agua”, enumera el texto.
Describe además que “el agua no se negocia ni se cotiza, es parte de toda vida; ni la meseta ni la cordillera, la tierra no es zona de sacrificio, fuera mineras”.
Además se negaron al paso de la histórica formación ferroviaria Trochita Angosta por el territorio mapuche sin previo consentimiento de las comunidades y rechazaron un loteo en las inmediaciones de su asentamiento.
Luego brindaron su acompañamiento a otras comunidades mapuches que atraviesan instancias de “recuperación territorial” como la comunidad Lafken Paillako, en el Parque Nacional Los Alerces, en Chubut, que días atrás ocupó una seccional del guardaparque cerca del lago Futalaufquen.
Pobladores de El Foyel se mostraron sorprendidos por la movilización debido a que “la comunidad Las Huaytekas no es como la comunidad de Villa Mascardi (Lafken Winkul Mapu), sus reclamos no son violentos y nadie resulta herido ni lesionado”.
También explicaron: “Convivimos desde hace varios años con la familia Palma, integrante de esa comunidad, y nunca tuvimos situaciones de violencia, más allá de las diferencias”.
Hace dos días, en Villa Mascardi más de 100 efectivos tuvieron que intervenir para garantizar una inspección ocular en un predio que había sido usurpado y cuyos alrededores continúan siendo controlados por grupos violentos e integrantes de la comunidad Lof Lafken Winkul Mapu.
Cerca de 20 vehículos de la Policía Federal, 100 efectivos, un carro hidrante, móviles de transporte de personas y hasta un blindado contrainsurgencia donado por el gobierno de China, que se utilizó para la seguridad de la Cumbre del G20, llegaron hasta un predio perteneciente a la Administración de Parques Nacionales que estuvo tomado para que la fiscal Sylvia Little pudiera ingresar al lugar.
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