El plenario del Consejo de la Magistratura de la Nación aprobó hoy el concurso público para cubrir una vacante en la Cámara Federal de Comodoro Py. Con 10 votos, tanto del oficialismo como de la oposición, el organismo elevó al Poder Ejecutivo el nombre de los seis mejores postulantes, entre los que se encuentran Roberto Boico, abogado de la vicepresidenta Cristina Kirchner en una de sus causas, y quien se perfila para ocupar el cargo.
La aprobación fue con los votos de los jueces Ricardo Recondo y Juan Manuel Culotta; los diputados Pablo Tonelli (PRO), Vanesa Siley (Frente de Todos); los senadores Mariano Recalde, María Inés Pilatti Vergara (ambos del Frente de Todos) y Silvia Giacoppo (UCR); el representante de los académicos Diego Molea; el representante del Poder Ejecutivo Gerónimo Ustarroz; y el abogado Carlos Matterson. El también abogado Diego Marías se abstuvo, el juez Alberto Lugones estaba excusado de participar en el concurso y la diputada peronista Graciela Camaño no participó de la reunión que se hizo de manera virtual por la pandemia del coronavirus.
Por otra parte, el Consejo también aprobó el regreso del juez Eduardo Farah a la Cámara Federal de Comodoro Py luego del fallo de la Corte Suprema de Justicia de la Nación sobre los magistrados trasladados.
El concurso para la vacante en la Sala II de la Cámara Federal no tuvo ninguna discusión. En la reunión se leyó la terna y se aprobó. Entre oficialismo y oposición ya había acuerdo para aprobarlo. La terna está integrada por el juez en lo Penal Económico Diego Amarante en el primer lugar, Boico en el segundo y el juez federal de Dolores Alejo Ramos Padilla, en el tercero. Como los tres están postulados a otros cargos -el Gobierno ya eligió a Ramos Padilla para ser juez federal y electoral de La Plata y envió su pliego al Senado- elaboró una lista complementaria con el también magistrado en lo Penal Económico Pablo Yadarola, el defensor oficial Federico Feldtmann y la secretaria de la Cámara Federal Ivana Quinteros.
La terna será enviada al Poder Ejecutivo donde el presidente Alberto Fernández deberá elegir a uno de ellos. Tanto en el Consejo como en el gobierno sostienen que será Boico, abogado de Cristina Kirchner en la causa por la firma del Memorándum de entendimiento con Irán desde 2018 y también defensor de Oscar Parrilli, ex secretario General de la Presidencia y actual senador nacional. Boico ya conoce los tribunales de Comodoro Py. En julio de 2015 la mayoría del kirchnerismo en el Consejo lo designó conjuez de la Cámara Federal de Casación Penal -una instancia superior a la de la Cámara Federal-, lo que generó una disputa política con la oposición.
El gobierno deberá enviar el nombre de Boico al Senado donde se aprueba el nombramiento de los magistrados. Esa designación podría darse en los próximos meses ya que el Poder Ejecutivo puso como uno de los temas de las sesiones extraordinarias al tratamiento de los pliegos de jueces y fiscales.
El de la Cámara Federal no fue el único concurso que se aprobó en lo que seguramente fue el último plenario del Consejo del año. El organismo hizo lo propio con otros siete para ocupar cargos en la Cámara en lo Penal Económico, en los Tribunales Orales Federales de La Plata, en la Cámara del Trabajo, en el Tribunal Oral Federal 2 de Rosario, en la Cámara Comercial, en la Cámara Civil y Comercial Federal y en la Cámara de Defensa de la Competencia. Todos pasarán al Poder Ejecutivo para la elección de los postulantes.
En tanto, el plenario del Consejo aprobó el regreso de Farah a la Cámara Federal. Lo había hecho la Comisión de Selección el martes. Ahora el tema será enviado al Poder Ejecutivo para que dicte el decreto que reintegre a Farah a la Sala II de la Cámara Federal.
Farah fue juez de la Cámara desde 2008 hasta 2018. Se fue tras su participación en la causa “Oil Combustibles”. Primero se lo trasladó a un Tribunal Oral en lo Penal Económico y luego al Tribunal Oral Federal 2 de San Martín, donde está actualmente. Con el fallo de la Corte Suprema que sostuvo que los traslados no son definitivos, Farah pidió volver a la Cámara.
El regreso de Farah contó con los votos del oficialismo y de los jueces, la abstención de los abogados y el rechazo de la oposición del PRO y la UCR.
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