Durante el gobierno de Mauricio Macri, Emilio Monzó se mostró y actuó como el ala moderada de Cambiemos. Fue el responsable de insistir hasta último momento en incluir en la coalición al sector del peronismo republicano que no era parte del Kirchnerismo. Tras la derrota de Juntos por el Cambio, el ex presidente de la Cámara de Diputados se mantuvo al margen de las discusiones cotidianas de la política, rodeado de otros dirigentes filoperonistas que fueron parte de la gestión de Macri como Rogelio Frigerio y Nicolás Massot. Con un mensaje “antigrieta” y aspiraciones en la provincia de Buenos Aires se incluye dentro de la oposición pese a que continuó criticando al ex presidente al punto tal que lo incluyó junto a Cristina como parte de de una “etapa terminada”.
Monzó reapareció. Habló de su relación personal con Macri, su consideración sobre Marcos Peña con quien ha tenido notables diferencias cuando fueron parte del gobierno y cuestionó a Alberto Fernández sobre quien tenía cierto “optimismo” pero que ahora lo percibe débil frente al espacio que ocupa La Cámpora en el Frente de Todos.
En diálogo con Luis Novaresio (Animales Sueltos-América), el ex titular de la Cámara baja fue consultado por la reunión de este martes en la que participaron Horacio Rodríguez Larreta, María Eugenia Vidal e intendentes de Juntos por el Cambio. Justificó su ausencia en la foto explicando que se trató de un encuentro del PRO. En ese sentido planteó que está “trabajando para tener una identidad en la oposición”.
Luego de cuatro años al frente de Diputados, comentó que pasó este último tiempo llamando a dirigentes y amigos de la política con los que perdió trato producto del trabajo que demanda la gestión pública. Sin embargo a Mauricio Macri no lo llamó. “Llamé a los que sentía que le debía una disculpa, la relación no terminó de la mejor manera en lo personal, pero no siento que tengo algo para decirle si lo llamo”, explicó.
Al respecto manifestó que no está “para encarar un proceso juntos” con Macri pero no se opone a ser parte de un armado más amplio que los incluya a ambos: “Va a ser difícil recuperar la relación personal, pero la política es mucho más fácil”.
De las críticas para la gestión de la cual fue parte, habló sobre Marcos Peña sobre quien ha tenido notables diferencias que se profundizaron en la campaña electoral de 2019. Sin embargo, hoy lo definió como “el mejor ministro que tuvo Macri”. “Es inteligente, fue mi adversario en cuanto a las ideas, pensó distinto a lo que yo pensaba, pero fue honesto intelectualmente; mejoró muchísimo Macri, lo llevó al lugar de la prudencia, pero no compartí su visión política durante cuatro años”, agregó sobre el ex jefe de Gabinete.
Monzó también brindó su opinión sobre Cristina Kirchner. La definió como “una militante incansable” y “de las mejores oradoras que tiene la Argentina”. No obstante, luego de los elogios, sostuvo que ve “una parte de Cristina que me preocupa, que excede y comienza a tener cierta prepotencia que no ha tenido buenos resultados”. En ese sentido vinculó su arremetida contra la Justicia con la disputa del 2009 con el campo: “Me extraña que continúe con los mismos errores, reincide en los mismos defectos”.
En ese sentido planteó como uno de los errores que tienen líderes como CFK es que “se rodean de obsecuentes”. Pero asumió que en Cambiemos también “tuvimos un espacio rodeado de obsecuentes”. “La soberbia fue el defecto de ambos”, definió sobre Macri y Cristina Kirchner.
Al defender su postura “antigrieta”, reveló que “Alberto me despertó un optimismo” al inicio del gobierno. “Confiaba en él”, sin embargo “lo veo a Alberto yendo a ver a Evo (Morales), a Lula (da Silva), al Grupo de Puebla, pero para ahí no tenía que ir, tenía que ir para el centro”, planteó. En ese sentido expresó que el Presidente se tendría que haber volcado hacia el sector del peronismo referenciado en gobernadores e intendentes bonarenses, sin embargo ahora lo ve “con cierta debilidad”, frente a “una Cámpora con fortaleza; es el espacio político más sólido e importante del oficialismo”.
“Veo al peronismo huérfano hace mucho tiempo con una vacancia de un líder nacional -desde Menem (Carlos)-, pero con Alberto tenía la misma esperanza. Sentí que cuando ganó el equilibrio de poder iba a estar basado en un Alberto que, es verdad que ingresa ungido por la vicepresidente, pero que tenía un peronismo vacante en las provincias y en los municipios que podía ocupar él, conducirla y generar un equilibrio de tres patas: el sector de Sergio Massa, el de Cristina Fernández y un Alberto Fernández más sólido basado en la estructura tradicional del peronismo”, analizó. “Lo estábamos esperando con expectativa muchos peronistas del lado del centro”, remarcó
Monzó agregó que la “principal defraudación” para con Alberto Fernández fue que no haya continuado la relación con Horacio Rodríguez Larreta, que haya confrontado por la quita de la coparticipación a la Ciudad y por el operativo de seguridad en el velorio de Diego Maradona.
Sobre el jefe de Gobierno porteño, consideró que es “la figura más moderada y mesurada de la oposición”. Si se presentara como candidato a presidente aseguró: “Lo voto”.
De cara a las elecciones legislativas Monzó concluyó la entrevista declarando que no sabe si “las circunstancias” le son favorables parar ser candidato el año que viene “pero me gustaría ser gobernador de la provincia de Buenos Aires” y para ello trabaja de cara al 2023.
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