A casi 9 meses de que la Organización Mundial de la Salud (OMS) declarara al coronavirus como pandemia y en el marco del comienzo de la vacunación en Rusia, casi la mitad de los argentinos desaprueba la gestión de Alberto Fernández en relación al manejo de la situación.
Los datos se desprenden de una encuesta nacional de la Consultora Poliarquía, que fue que fue actualizada semanalmente desde el inicio de la pandemia en más de 40 localidades del territorio argentino. De acuerdo con las cifras arrojadas por el último monitoreo sistemático de opinión pública, la aprobación del desempeño del Presidente con respecto al coronavirus cayó al 43%, mientras que la desaprobación escaló 7 puntos al 49%, siendo el valor más alto hasta el momento.
Según el estudio de opinión pública, realizado en base a una muestra telefónica de 1646 casos, aquellos que no coinciden con las decisiones tomadas por el Gobierno durante la pandemia son, en su mayoría, macristas o simpatizan con Cambiemos.
El 6 de noviembre, luego de que el Presidente dispuso el fin de la etapa de aislamiento social, preventivo y obligatorio (ASPO) en casi todo el país, la proporción de quienes consideran que hay que endurecer las medidas de restricción descendió al 25% (la cuarta caída consecutiva). Por otro lado, el porcentaje de quienes señalan que hay que flexibilizarlas se redujo al 41%, y subió cinco puntos respecto de aquellos que creen que tiene que continuar sin cambios (22%).
Asimismo, el nivel de preocupación por el coronavirus (“Muy preocupado” + “Bastante preocupado”) cayó al 72% y, a pesar de seguir siendo elevado, es el registro más bajo desde la primera semana de marzo.
Con respecto a la probabilidad de vacunarse contra el COVID-19, descendió 17 puntos con respecto a agosto 2020: 41% versus 58%, respectivamente. Otro 31% de los encuestados consideró que podría llegar a vacunarse y el 21% declaró que seguro no se vacunará.
De la encuesta también se desprende que la circulación social creció 10 puntos respecto a la medición anterior: uno de cada tres encuestados señala haber salido de su casa 5 días o más durante la última semana (34%). El aumento se da principalmente en el Gran Buenos Aires y en el interior del país.
Este accionar va de la mano con la expectativa de que el virus no seguirá avanzando en el país: la misma cayó 11 puntos y, con el 42 %, alcanza el valor más bajo de la serie.
Por último, de acuerdo con la encuesta de Poliarquía, solo el 19% de los encuestados tiene pensado celebrar las fiestas de fin de año como todos los años, mientras que otro 33% lo haría con menos gente y el 45% planifica celebrar las fiestas solamente con las personas que viven en su hogar.
Sobre este punto, y con el objetivo de evitar que los contagios vuelvan a aumentar como consecuencia de un descuido masivo, el Gobierno trabaja en un protocolo para utilizar en las reuniones familiares.
Desde la gestión de Axel Kicillof le van a pedir a los bonaerenses que construyan burbujas con personas conocidas y traten de pasar las fiestas con ellos. Evitar compartir las celebraciones con desconocidos. Uno de los puntos clave del protocolo navideño será el cuidado de los adultos mayores, aquellos que pasaron la barrera de los 60 años, y también de los que tienen enfermedades prexistentes. Dos subgrupos que están dentro del grupo de riesgo en esta pandemia.
El gobierno bonaerense también va a pedir que la gente no participe de fiestas masivas y que, dentro de lo posible, las celebraciones sean al aire libre o, en caso de que no se pueda, realizarlas en ambientes que estén bien ventilados. Además, pedirán que dejen las ventanas abiertas en vez de utilizar el aire acondicionado. Ventilación natural.
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