El mediodía del jueves hubo dos reuniones. Una en la Cámara Federal y otra en el Consejo de la Magistratura. La primera fue de reencuentro. Los jueces Pablo Bertuzzi y Leopoldo Bruglia volvieron a la Cámara después del fallo de la Corte Suprema de Justicia sobre los traslados y se reunieron con sus pares del tribunal, Martín Irurzun y Mariano Llorens. Según pudo confirmar Infobae, ahí se habló de las autoridades del tribunal para el 2021 –un año electoral- y de cómo quedarán integradas las salas, algo que se definirá en los próximos días. La segunda reunión fue para empezar a definir el futuro de la Cámara Federal y la situación de los jueces trasladados. Aunque no parezca, en los dos encuentros se discutió poder.
Cuando el lunes pasado Bruglia y Bertuzzi regresaron a sus cargos después del fallo de la Corte Suprema sobre sus traslados, lo hicieron con una decisión tomada. Se van a presentar al concurso que abrió el jueves el Consejo para cubrir sus cargos y al que los habilitó el máximo tribunal. “Nos vamos a presentar a concursar para estar en los primeros puestos”, le dijo uno de ellos a sus allegados. Pero saben que el Gobierno –el que impulsó la revisión de sus traslados– nunca los va a designar en la Cámara como jueces titulares.
Pero tampoco los jueces quieren que el oficialismo la tenga fácil. Por eso su regreso a la Cámara es con un plan: concursar para controlar. Quieren estar dentro del concurso para poder seguir cada uno de sus pasos, tratar de evitar las “picardías” que siempre hay alrededor del concurso, designar veedores y pedir auditorias. Incluso hacer denuncias en caso de que sea necesario. “No queremos demorar nada. Pero si vemos irregularidades, las vamos a denunciar en la justicia”, advirtieron a sus colaboradores.
Por eso, ya pusieron en marchar el plan. Presentaron el viernes una nota en la Comisión de Selección del Consejo, a cargo de la diputada peronista Graciela Camaño. “Venimos a solicitarle ser notificados de la fecha en la que se sortearán los miembros del jurado que intervendrá en el referido concurso, en virtud de que es nuestra voluntad participar en forma personal de dicho procedimiento”, le pidieron.
Y dejaron un dardo. Criticaron que la Comisión el jueves solo abrió el concurso de la Cámara Federal y no el del resto de los jueces trasladados que también quedaron en la mira por el fallo de la Corte: “La decisión de la mayoría de la comisión que preside de sólo reparar acuciosamente en disponer llamar a concurso respecto de los cargos que desempeñamos, es claramente demostrativa de una maniobra obstinada, de característica centralizada, para excluirnos de nuestras funciones, ahora en tiempo récord. Es solo un indicio más de muchos hechos ya pasados, perfectamente ideados desde hace tiempo, planificados y ejecutados en forma coordinada y con un claro y único objetivo”, escribieron en la nota a la que accedió Infobae.
El fallo de la Corte sobre los traslados fue discutido el jueves por los integrantes del Consejo de manera reservada en la Comisión de Labor. Allí quedaron plasmadas las dos posturas que luego se llevaron a la Comisión de Selección. En minoría, el diputado del PRO Pablo Tonelli sostuvo que había que llamar a concurso para todos los jueces trasladados, ya que la Corte no había hecho distinciones. La mayoría sostuvo que primero había que llamar por los cargos de Bruglia y Bertuzzi y que el resto de los casos se debían analizar. No solo votaron en esta línea los consejeros oficialistas y sus aliados, sino también los jueces Ricardo Recondo y Juan Manuel Culotta, que se referencian más con la oposición.
Por Zoom, en la reunión pública de la Comisión de Selección, el voto mayoritario planteó analizar el resto de los jueces trasladados más adelante. Pero en rigor el ánimo en el Consejo es otro: no hay apuro ni urgencia en tratar esos casos. Así se lo confiaron a Infobae tres consejeros. “Es más un problema que una solución”, dijeron. Si bien es cierto que la Corte dijo que todos los jueces trasladados son transitorios y sus cargos deben ir a concurso, una idea mayoritaria en el Consejo es que no todos los casos son iguales", aseguran.
Aunque apenas salió el fallo de la Corte se sostuvo desde la oposición que el universo de jueces afectados superaba los 70, como indicó Infobae, lo cierto es que la Comisión de Selección hizo un listado con los jueces trasladados desde la creación del Consejo, que son los casos a los que allí creen que hizo referencia la Corte. Son los magistrados trasladados desde el 2000, cuando se creó el Consejo de la Magistratura y comenzó a aplicarse el régimen que el máximo tribunal entendió inconstitucional.
Además de Bruglia y Bertuzzi hay otros 36 jueces trasladados. De esos 36, 26 lo fueron entre cargos similares. Por eso una opinión mayoritaria del Consejo cree que no hay que hacer nada. Se trata de jueces que pasaron de una sala a otra dentro de la misma Cámara o que pasaron de un Tribunal Oral a otro. Uno de ellos es el propio Recondo. “No creo que la Corte se haya referido a que un traslado de sala sea transitorio, si bien no lo aclaró. Ese tema vamos a tener que resolverlo o pedir una consulta a la Corte”, dijo Recondo en la reunión del jueves.
Además, en esa lista, se presentan casos en los que si se llamara a concurso para todos los trasladados, requerirían “soluciones creativas”. ¿Cómo hacer para resolver el caso del juez Javier Anzoátegui, del Tribunal Oral Criminal 8? ¿Debería volver a otro tribunal oral que ya no existe? Él pertenecía al TOC 23, que se transformó en el Tribunal Oral Federal 8 y en donde ya existen jueces titulares.
Está claro que el fallo de la Corte puso en alerta a la totalidad de jueces trasladados. Algunos están preocupados y analizan hacer presentaciones para que se les dé certeza a su situación. Otros, en cambio, se inclinan por jugar a la “mancha hielo”: no hacer ningún movimiento.
La posibilidad de pedirle a la Corte una aclaración sobre su propio fallo está presente desde que se emitió la resolución, pero tampoco convence a todos en el Consejo. “A la Corte le mandás una nota para solucionar un quilombo y te devuelve dos quilombos”, dijo a Infobae uno de los hombres del Consejo que sigue a diario la discusión por los traslados. Por eso la intención del Consejo es tratar que el tema vuele bajo.
Lo que sí estará en discusión son los concursos de los jueces traslados que están en una situación similar que Bruglia y Bertuzzi. Son otros nueve magistrados. Siete pertenecen al listado original que elaboró el Consejo. Los otros dos son Carlos Mahiques, juez de la Cámara Federal de Casación Penal, y Ricardo Basílico, del Tribunal Oral Federal 1 de Comodoro Py donde está radicada la causa de dólar futuro en la que están acusados la vicepresidenta Cristina Kirchner y el gobernador bonaerense, Axel Kicillof. Ellos tenían acuerdo del Senado –activado tras las acordada 7 del 2018-, pero no llegaron por concurso. Con el fallo de la Corte, sus traslados se convirtieron en provisorios.
En el Consejo quedó por el momento en ‘stand by’ la situación del juez Eduardo Farah, el único de los jueces trasladados que quiere regresar a su lugar de origen. Es nada menos que a la Cámara Federal de Comodoro Py. De allí salió eyectado en 2018 por el macrismo después de firmar el fallo que liberó momentáneamente a los empresarios Cristóbal López y Fabián de Sousa en la causa Oil Combustibles.
Cuando el Consejo activó la revisión de los jueces trasladados, la situación de regreso o no de Farah estaba en manos del kirchnerismo en el Senado. Fue un juez que tuvo fallos a favor y en contra de Cristina Kirchner y que tuvo el padrinazgo del integrante de la Auditoría General de la Nación Javier Fernández. Desde ahí, Farah confirmó los procesamientos de la hoy vicepresidenta en las causas dólar futuro y el encubrimiento por el Memorándum con Irán, pero liberó a Amado Boudou cuando había sido arrestado en jogging en su casa y cambió la calificación en la causa Oil Combustibles. Lo cierto es que, sin esperar el pulgar para arriba en el Senado, el fallo de la Corte devolvió a Farah a su despacho en el segundo piso de Comodoro Py.
Por eso el juez presentó en la semana una nota en el Consejo pidiendo su regreso. “No hay margen para decirle que no”, le dijo a este medio un funcionario nacional. Pero sí lo hay para demorar una respuesta. El jueves la Comisión de Selección no trató el tema –no estaba en el orden del día– y no está previsto tampoco que se reúna la semana que viene. Será una definición pendiente.
Lo que queda es el sorteo de los jurados para los cargos de Bruglia y Bertuzzi. La última vez que el Consejo hizo sorteos fue en marzo pasado. Desde entonces están pendientes 20 sorteos para iniciar los concursos. Se dejaron de hacer cuando se detectó una presunta irregularidad, que derivó en una auditoría interna sobre el sistema tecnológico. Ahora hay que fijar fecha para el sorteo. Podría ser la semana que viene. Un consejero pidió que no solo se sortee el jurado para Bruglia y Bertuzzi sino todos los que están pendientes. El resto de los consejeros coincidieron.
En la discusión también está el concurso 412. Se trata del concurso que se abrió en 2016 cuando se produjo la vacante de Horacio Cattani en la Sala II de la Cámara Federal. Con el traslado de Eduardo Farah, el Consejo de la Magistratura abrió dos plazas para ocupar. La jugada para desplazar a Bruglia y Bertuzzi de Sala I planteaba que esa elección le abría al oficialismo la posibilidad de nombrar a cuatro candidatos para el segundo piso de Comodoro Py.
El fallo de la Corte frenó esas intenciones al disponer que Bruglia y Bertuzzi no podían quedarse para siempre, pero que debía abrirse un concurso para las dos vacantes de la Sala I y que, además, Farah estaba en condiciones de regresar. Con el correr de los días, pese a que no era lo que esperaban, en la oposición terminaron sonriendo frente a la resolución de la Corte por arruinar los planes del Gobierno. “Fueron por lana y terminaron esquilados”, dijeron a Infobae los consultados.
Ahora, solo hay una silla vacante a ocupar en el concurso 412. Un total de 18 postulantes que tuvieron los mejores puntajes dieron entrevistas personales cuando se pensaba que había cuatro plazas. Por ahí desfilaron los jueces Diego Amarante, Alejo Ramos Padilla, Pablo Yadarola, Marcelo Martínez De Giorgi o el abogado Roberto Boico, que defiende a Cristina Kirchner en la causa Memorándum. Cuando los cargos son varios, hay más chances de negociar con la oposición. Cuando se trata de uno solo, no hay juego posible, sostienen a Infobae en el oficialismo.
En tribunales había circulado la versión de que se podía demorar la definición del concurso 412 a la espera de que se abriera el segundo concurso por las vacantes de Bruglia y Bertuzzi, precisamente para tener ese margen de negociación. Pero ante Infobae las fuentes del Consejo rechazaron esa idea de plano. El objetivo del oficialismo es sacar el concurso este año. Sobre todo porque “el año que viene es un año electoral” y todo puede complicarse más, señalaron los consultados.
La terna que se mande al presidente se definirá en breve. El jefe de Estado elegirá el nombre y lo mandará al Senado. Todas las apuestas se centran en Boico -que salió segundo en el orden de mérito- y como segunda opción Ramos Padilla, aunque el juez de Dolores está más interesado en ir al juzgado federal 1 de La Plata, con competencia electoral, cargo por el que compitió antes de que el caso D’Alessio lo hiciera ocupar la tapa de los diarios. En ese concurso salió primero durante el macrismo. Después, le tocará a la política en el Senado dar el aval al candidato que se envíe. Todavía en la Cámara Alta debaten qué harán con el pliego del juez Daniel Rafecas para ocupar el cargo de procurador general de la Nación.
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