Esta mañana, cerca de las seis de la mañana, más de 4.000 efectivos bajo la dirección del ministro de Seguridad bonaerense, Sergio Berni, entre gritos, corridas y detonaciones, comenzaron el desalojo de la toma de Guernica, ocupado por más de 1.400 familias desde principios del mes de julio. Una hora después de que comenzara el operativo, organizaciones sociales se movilizaron hasta el Obelisco y cortaron los principales accesos a la Ciudad de Buenos Aires.
Las principales manifestaciones se registran desde temprano en el Puente Pueyrredón, donde están interrumpidos los dos sentidos de la Autopista 9 de Julio Sur, mientras el remanente de vehículos que quedó es desviado hacia la salida de avenida Suárez; en el Puente La Noria, corte total en ambos sentidos, en la Avenida General Paz a la altura de Cabildo, donde hay un corte parcial con sólo un carril habilitado y en el Acceso Oeste, a la altura del kilómetro 16, sentido a Capital. También se registra un corte en la avenida de Mayo, a la altura de la calle Lima.
Bajo la consigna “No al desalojo, tierra para vivir”, organizaciones sociales, políticas y de derechos humanos se asentaron también en la intersección de la avenida Corrientes y 9 de Julio, donde el tránsito está totalmente interrumpido. “Es un día trágico, es un dia terrible”, señaló esta mañana Myriam Bregman desde la manifestación del Obelisco. “A vos te pueden hacer el relato que quieran, que hay una orden de un juez, todos argumentos llamativos de un Gobierno que construyó su relato diciendo que la Justicia estaba amañada”, señaló la legisladora del PTS en el FIT-Unidad en diálogo con el periodista Ernesto Tenembaum en Radio Con Vos.
Después de casi 100 días que lleva la toma, las negociaciones entre las autoridades provinciales y los usurpadores fracasaron y ante el rechazo de la Justicia a un nuevo pedido de prórroga, Sergio Berni llevó a cabo la desocupación que contó con la participación de fuerzas especiales, y dejó un saldo de más de 35 personas detenidas.
Mientras tanto, en Guernica, después de dos horas, cerca de las 8 de la mañana, el predio fue desocupado. Mientras muchos de los ocupantes abandonaron pacíficamente el lugar, otro grupo de usurpadores resistió con barricadas, tirando piedras y botellas. El cuerpo de Infantería, con los equipos tácticos de la Policía, realizaron distintas formaciones para avanzar en bloque sobre los manifestantes. A su paso, los efectivos fueron derribando las casillas que fueron montadas en el predio de Presidente Perón.
Según los usurpadores, la Policía avanzó con violencia sobre ellos. “¿Qué corazón tienen para sacarnos así? Estamos desesperados, es una situación muy difícil, el Gobierno no hace nada”, dijo Rosalía, una de las mujeres de la toma, en declaraciones al programa “Todos juntos”, que conduce Fernando Carnota por Radio Rivadavia.
SEGUÍ LEYENDO: