Horas de tensión se viven en la toma de Guernica. En las asambleas que se realizaron en los cuatro barrios que forman la toma, 20 de Junio, La Lucha, La Unión y San Martín, las numerosas familias que aún no acordaron con el gobierno bonaerense retirarse de manera voluntaria: rechazaron las últimas y finales propuestas realizadas por el ministro de Desarrollo de la Comunidad, Andrés “Cuervo” Larroque, para evitar un desalojo forzado.
El gobernador Axel Kicillof ya anunció que no le solicitarán al juez de la causa, Martín Rizzo, una nueva prórroga para llevar adelante, a través de la Policía Bonaerense, el “lanzamiento” que deberá realizarse, a más tardar, el 30 de octubre próximo.
Sólo el titular del Juzgado de Garantías número 8 de Cañuelas, tiene la potestad para decidir el día en que se llevará a cabo la medida. Infobae pudo establecer por fuentes judiciales que el magistrado, antes de dar la orden, evaluará los avances y las propuestas que realizaron los funcionarios de Kicillof.
Esto no ocurrirá antes del viernes. Ayer se terminó de realizar el relevamiento complementario del censo que se demoró, según denunció Larroque, “por la obstrucción de algunas organizaciones y partidos de izquierda” que coparon la usurpación.
La compulsa estuvo supervisada por integrantes del Centro de Estudios Legales y Sociales (CELS) y el Servicio Paz y Justicia (SERPAJ). Los resultados serán procesados hoy y se espera controversia. Los delegados de los barrios y dirigentes de Frente de Organizaciones en Lucha (FOL) y del Polo Obrero, hablan que en el asentamiento hay más de mil personas.
Los funcionarios bonaerenses aseguran que hay que ser prudentes con los números. Lo explican así: “Hay que cruzar estos resultados con el censo anterior y realizar varias verificaciones porque se nota que mucha gente que se anotó parece no estar en la toma y de esa forma se duplica la cantidad de manera ficticia".
Con esos datos volcados en las planillas, Larroque o alguno de sus funcionarios se sentará a hablar con los delegados y las organizaciones para explicarles que “no tiene sentido inflar el número” y se esperanzan en que “prime la responsabilidad”.
Recién después de dar esos pasos y si todo sigue el curso esperado, las familias que ya acordaron -unas 650 según las declaraciones oficiales- serán trasladas a los dispositivos transitorios. La misma posibilidad se les dará al resto que hasta ahora se vienen negando a aceptar las condiciones propuestas por el ministerio de Desarrollo de la Comunidad.
Hasta ahora hay cuatro de alojamiento, algunos son abiertos y otros cerrados, todos en el partido de Presidente Perón. De manera paralela ya se están gestionando los lugares definitivos para realizar los loteos de predios, que tendrán todos los servicios y donde podrán construir de manera definitiva.
Varios núcleos familiares ya aceptaron subsidios de 50 mil pesos para ampliar las viviendas donde vivían antes de tomar el predio de Guernica, para mejorar sus condiciones de vida hasta la solución final, la cual podrá demorar unos seis meses.
Con este panorama volcado en la documentación oficial, el juez Rizzo decidirá que camino toma. Tiene dos bifurcaciones: o fija la fecha del desalojo forzoso o prorroga por tercera vez la medida sin que se lo soliciten.
Durante la tarde del miércoles, los funcionarios de Kicillof, encabezados por el ministro de Desarrollo de la Comunidad, asistieron con alimentos y otros insumos básicos a las familias asentadas en Guernica que perdieron parte de sus pocas pertenencias a causa de las fuertes lluvias.
En la casa de gobierno de La Plata, si bien confían en el buen rumbo de las negociaciones, saben que el núcleo de la toma, compuesta por organizaciones como Darío Santilllán, Libres del Sur y los partidos de izquierda, buscan forzar un enfrentamiento ya que ese “es su negocio político".
En la última asamblea, los cuatro barrios votaron la propuesta original que las organizaciones ya le realizaron a Kicillof y que este, hasta ahora, se niego a aceptar: la cesión de tierras que obliga a los grandes emprendimientos a ceder el 10%, según la interpretación que se realiza de la ley 14449 y que hasta ahora “nadie lo ha hecho a pesar de que la ley los obliga, pero el estado no la hace cumplir”, o la otra opción es “tierra por tierra”, pero de manera inmediata, no a seis meses.
“Vamos a hacer lo que ustedes quieran, vamos a apoyar la decisión de los compañeros y las compañeras", aseguraron los dirigentes del PO y el FOL, en la última asamblea. Como respuesta escucharon un grito cerrado: “Vamos a resistir. Tierra para vivir”.
Desde el ministerio de Seguridad confirmaron que Sergio Berni ya tiene organizado un gigantesco operativo de unos 4.000 policías para intimidar a los más valientes.
A pesar de esto, ni el juez Rizzo ni los funcionarios de Kicillof quieren llegar a ese extremo. La sola idea de una posible refriega entre la policía provincial y un grupo de integrantes de la toma, por más pequeño o marginal que sea, los preocupa y ocupa.
La premisa es que no se repitan, por ejemplo, las imágenes del miércoles a la mañana entre la policía jujeña y un grupo usurpadores que dicen pertenecer a la comunidad aborigen Tusca Pacha que habían tomado tierras en Los Alisos, en la localidad de Palpalá. El desalojo termino con balas de goma, golpes y cuatro detenidos.
Como se ve, Guernica aún es un foco de tensión que puede estallar en cualquier momento, a pesar de los ingentes esfuerzos que se están realizando para evitar que esto suceda.
Seguí leyendo